El Hospital Clínico Universitario de Valencia ha lanzado, a través de sus servicios de Cardiología y del Laboratorio de Bioquímica Clínica, un innovador programa centinela para mejorar el control y la identificación del colesterol LDL en pacientes con antecedentes de infarto o enfermedades coronarias, de acuerdo con un comunicado de la Generalitat.
Este sistema permite que, cada vez que alguno de estos pacientes se somete a un análisis de sangre, sin importar el motivo, el laboratorio detecte automáticamente sus antecedentes médicos y compruebe si los niveles de colesterol LDL se encuentran dentro de los parámetros recomendados por las guías clínicas. Si se observan valores anormales, el programa emite una alerta automática al servicio de Cardiología, que evalúa individualmente cada caso y ajusta el tratamiento según sea necesario para mejorar la prevención cardiovascular.
El doctor Enrique Santas, médico adjunto del servicio de Cardiología, ha señalado que este sistema centinela ha tenido buenos resultados trabajando junto a los profesionales de Atención Primaria y ha sido bien recibido por los pacientes. «Siempre que el médico solicite un análisis, y en cualquier momento de la vida del paciente, si existen diagnósticos relacionados con cardiopatía isquémica, el sistema alertará al médico y el paciente será incluido automáticamente en la ruta asistencial, generando alertas si el control del c-LDL es inadecuado. Esto permite actuar de forma anticipada», subrayó Santas.
El programa establece dos niveles de alerta: amarillo y rojo. El nivel amarillo implica un seguimiento no presencial en colaboración con Atención Primaria, mientras que el nivel rojo, que indica un riesgo extremo, requiere que el paciente sea citado directamente en Cardiología.
El jefe del servicio de Laboratorio de Bioquímica Clínica, Enrique Rodríguez, explicó que el laboratorio desempeña un papel crucial en la implementación y gestión de las rutas asistenciales, actuando de manera transversal sobre todos los pacientes. «Con las reglas de soporte a la decisión clínica integradas en nuestros sistemas, podemos identificar automáticamente a los pacientes con cardiopatía isquémica y niveles de c-LDL fuera de objetivo, generando alertas y activando de inmediato la correspondiente ruta asistencial», señaló.
Rodríguez también destacó que «la automatización de estos procesos permite reducir tiempos, evitar oportunidades perdidas y unificar la práctica clínica». En sus palabras, «el laboratorio no solo entrega resultados, sino que lidera la coordinación asistencial, utilizando herramientas que facilitan la toma de decisiones basadas en datos, contribuyendo a una atención más eficiente y personalizada».
















