Salomé Pradas tras ser preguntada en la rueda de prensa posterior al Consell por Noticias Ciudadanas sobre las cercanías de Valencia ha querido expresar su solidaridad con los miles de valencianos que cada día “sufren un servicio que es una vergüenza”.
La Consellera de Infraestructuras Salomé Pradas ha recordado como ella misma en el Senado presentó en la pasada legislatura varias iniciativas al respecto, ignoradas por el Gobierno de Pedro Sánchez.
“El servicio deja mucho que desear en muchas ocasiones entre retrasos y cancelaciones continuas”
Salomé Pradas ha asegurado que desde el Consell son conscientes de esta situación y solicitarán a la Delegada del Gobierno Pilar Bernabé una reunión y las explicaciones pertinentes.
Desde el Consell, la nueva Consellera de Agua, medio Ambiente e Infraestructuras añade que todo es fruto de la escasa inversión estatal en las cercanías de Valencia. Añadiendo que del Plan de Infraestructuras previsto en 2017 y dotado con 1.400 millones de euros sólo se han acometido poco más del 25% de las inversiones previstas.
“Iremos a Madrid a reclamar una red de Cercanías decente, esté el gobierno que esté”
Tajante ha sido la Consellera Pradas que ha asegurado que los ciudadanos de Alicante, Castello y Valencia no se merecen este trato cada día. A trenes absolutamente llenos se unen los retrasos continuos de hasta 90 minutos en algunos casos y las cancelaciones de convoyes. Un servicio claramente mejorable y que sufrimos miles de valencianos con la incertidumbre de si llegaremos a tiempo al trabajo o podremos volver a a casa.
Obras en las infraestructuras sin explicaciones a los usuarios
Otro de los problemas son las obras que se han empezado del Canal de Acceso de Valencia y que tienen un plazo de ejecución de cerca de 6 años y que lograrán soterrar un tramo de cerca de 1.500 metros en la actual avenida de Federico García Lorca. Cuando las obras se acerquen a la zona del puente de Giorgeta entre Malilla y San Vicente la proximidad de los edificios harán necesaria la eliminación de vías, con loq ue Renfe ni ADIF ha informado a la Generalitat ni a los pasajeros de un Plan previsto, más allá de saber que habrá líneas que se deban quedar en otros lugares antes de las obras.
Tampoco sabemos los problemas que ocasionarán la propia restructuración de la Estacio del Nort de Valencia. Cuyo principal problema es la cubierta de uralita que produce fibrillas cancerígenas y que la UE exige retirar antes de 2.028. Se sustituirá por una cubierta de zinc y de paso se limpiará y restaurará la estación. Para las obras se ha eliminado el aparcamiento lateral que daba a la Calle Bailén y varios andenes. Si bien Renfe asegura que se mantendrá el tráfico ferroviario sí reconoce habrá que hacer ajustes.
Igualmente tenemos las obras de amplicación de la “estación provisional” Joaquín Sorolla. La obra que se concibió como provisional lleva 13 años. Así, los materiales que se utilizaron como planchas metálicas y hierro se han oxidado. pero además, la llegada de más operadores ferroviarios y con trenes más largos hacen necesaria otra reestructuración integral “provisional”. Así, se construirán más andenes, un aparcamiento para vehículos mayor y en varias alturas y un paso superior peatonal. unas obras cifradas en más de 9 millones de euros.
Las obras de sustitución de traviesas en algunos tramos de cercanías además están dando lugar a fuertes retrasos y la supresiónd e trenes en plena campaña turística hace que los trenes vayan casi todo el día llenos, especialmente el líneas como Castello Valencia o Gandía. ADIF no coloca dos trenes unidos para ampliar el aforo y por consiguiente hay veces que hasta pasajeros se quedan en el andén sin poder subir por el exceso de peso aforo.
Averías continuas
Este exceso de peso y con un aforo que a veces llega a superar en dos el aforo máximo permitido, unido a patinetes, bicis, maletas, carros… hace que el viaje en tren se convierta en un infiernos con maquinaria que no soporta el exceso de peso que dobla al previsto inicialmente, lo que hace que muchos trenes se estropeen. Es la pescadilla que se muerde la cola continuamente que causa todos los días desesperación entre los usuarios
El paso a nivel de “la muerte”
Todo estos e une a la reivindicación de los municipios de Alfafar, Sedaví y Benetusser de soterramiento de las vías a lo largo de 1,5 kilómetros y eliminación del paso a nivel de Alfafar que se ha cobrado ya 76 vidas y muchos más sustos. un paso a nivel en cuya área de influencia viven 100.000 personas y rodeado de colegios e infraestructuras básicas y que recorren diariamente cerca de 6.000 personas. Por la misma circulan 240 trenes de pasajeros cada día. La peligrosidad ha hecho aumentar los pitidos de los trenes que causan problemas a todos los vecinos cercanos que los escuchan durante más de 18 horas al día. Además de la cantidad de trenes de mercancías, incluso peligrosas que circulan por este trayecto.