Ayer en la inauguración de la Feria Internacional de Turismo de FITUR se produjo una mini-cumbre de presidentes autonómicos, en la que finalmente los presidentes autonómicos de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, el de Andalucía, Juanma Moreno y el de Murcia, Fernando López Miras, los tres del partido popular, al que se unió el presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García-Page.
La infrafinanciación autonómica de relieve
Los cuatro en una breve reunión acordaron exigir al estado al menos 3.000 millones de fondo de nivelación autonómico, como las Comunidades Autónomas más infrafinanciadas.
El presidente de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón ha explicado que hay cuatro comunidades autónomas peor financiadas, y las cuatro han de sostener su sanidad y servicios sociales, exigen un fondo de nivelación autonómico que los equipare a las comunidades mejor financiadas.
Los presidentes autonómicos de la Comunitat Valenciana, Murcia, Andalucía y Castilla La Mancha, tres del pp y uno del PSOE acuerdan acciones conjuntas y una próxima cumbre para este fin.
Reacciones desde el Ministerio de Hacienda
La Ministra de Hacienda ya ha respondido ante la mini-cumbre que se ha celebrado en FITUR Madrid y que ha sido centro de todos los focos y miradas, y ha asegurado que en febrero se volverá a poner sobre la mesa la Reforma del Sistema de financiación autonómico, una promesa aplazada una y otra vez en los últimos años.
Desde Junio de 2018 es Ministra de Hacienda, cinco años y medio, pero culpabiliza del actual sistema de financiación autonómico al ex-ministro popular Montoro. Además María Jesús Montero asegura que ya planteó en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera este fondo de nivelación y que fue rechazado por la mayoría de comunidades autónomas.
Ahora ha bastado una foto de cuatro presidentes autonómicos, uno de ellos, Emiliano García-Page del partido socialista para que la Ministra Montero se ponga las pilas. Pero cabrá saber sobre qué base se trabaja para el reforma del sistema de financiación autonómico, si sobre una base de peso poblacional, o sobre una base que prime el coste de servicios en la denominada como España vaciada, por que la última vez que la Ministra Montero hizo un documento base era mucho más lascivo para la Comunitat Valenciana.
Lo único que reconoce la Ministra María Jesús Montero es que parte de la deuda de las Comunidades Autónomas es debido a esta infrafinanciación, como en el caso de al Comunitat Valenciana, por lo que asegura está dispuesta a asumir el Estado esa parte de la deuda. La próxima batalla si eso llega a buen puerto es la cantidad, ya que el propio ex-presidente Chimo Puig dió una cifra de 10.000 millones de euros que sin embargo la Plataforma por la Financiacio Justa eleva a los 30.000 millones. Ya conocemos que la Ministra aseguró en el propio Congreso de los Diputados que la Comunitat Valenciana era la peor financiada por el gobierno español y que parte de la deuda acumulada era por esa infrafinanciación, de poco sirvieron esas palabras pronunciadas hace casi dos años, porque el texto base presentado perjudicaba aún más a al Comunitat valenciana.
La Comunitat Valenciana relegada, siempre relegada, españoles de tercera
La realidad es que llevamos los valencianos más de diez años en el que el Estado no cubre el coste de las competencias de sanidad y Educación transferidas a las Comunidades Autónomas. La infrafinanciación la sufrimos la Comunitat Valenciana, y en muchos casos ese déficit en el coste de estos servicios se ha elevado a los 2.000 millones de euros cada año. Algunos incluso se ha superado esa cifra. Así, deberemos estar atentos de las maniobras desde Moncloa, porque una vez más, los valencianos reclamamos lo que nos corresponde, ni un euro de más.
Con los pactos a los que ha llegado pedro Sánchez con distintas CC.AA. para llegar a Moncloa estas desigualdades entre territorios aumentarán exponencialmente creando una España a dos velocidades que deberá ser corregida de inmediato por el Estado, ya que si hasta ahora el País Vasco era la autonomía más insolidaria, que no aportaba al estado lo que le correspondería ni asume el principio de solidaridad interterritorial en virtud de su cupo vasco, parece que los acuerdos a los que ha llegado Sánchez con Junts y ERC en cataluña van en la misma dirección, por lo que se deberá sudar sangre literalmente para llegar a un acuerdo beneficioso para la Comunitat valenciana, que una vez más se queda relegada a ser españoles ni de primera ni de segunda, de tercera.