Balance de la primera limpieza
Se ha realizado la limpieza de las zonas requeridas por bomberos para realizar sus trabajos con grúa evitando que pinchen los vehículos grúa, y la limpieza de calzada de los alrededores empleando los siguientes medios:
- 2 autocubas
- 1 barredora
- 1 recolector
- 1 hidrolimpiadora
- 14 operarios de limpieza
Los trabajos de limpieza se han realizado en aproximadamente 4 horas y media con un pesaje total de los residuos recogidos de 4110 kg .
Se seguirá trabajando en diversas actuaciones según los bomberos vayan solicitándolo para operar en las mejores condiciones de seguridad.
Tal y como avanzábamos en otra noticia esta tarde
Una brigada municipal ayudada de los Bomberos del Ayuntamiento de Valencia han comenzado a limpiar las aceras y calles aledañas, ya que la rotonda de la Av. del General Avilés y de Maestro Rodrigo está cerrada así como ambas avenidas desde la tarde del jueves.
48 horas llevan cerradas las avenidas y calles cercanas, y ya con el edificio sin llamas y donde no peligra su estabilidad toca proceder a limpiar todas las calles cercanas.
Planchas desprendidas de la fachada, restos de cristales, de planchas metálicas y de distintos elementos como lana de roca se acumulan en las calles aledañas.
La intención es abrir parte del perímetro al menos de las avenidas principales a la circulación a partir de mañana o el lunes. La zona necesita recuperar parte de la normalidad en sus calles, aunque el edificio y su esqueleto ennegrecido hará difícil pasar página.
No sólo las calles y avenidas que rodean al edificio tienen restos de chapas que salieron despedidas el núcleo antiguo de Campanar sigue lleno de pequeños trozos de chapas. Así durante este fin de semana se pretende a nivel municipal hacer un plan de choque de limpieza en la zona para conseguir eliminar estas piezas peligrosas para la circulación y para los vecinos y así poder reabrir las calles del barrio y recuperar una cierta normalidad.
Estas labores se realizan después que los bomberos la tarde de ayer y la mañana de hoy estuvieran saneando las fachadas de los edificios devorados por el incendio y eliminando materiales que se pudieran desprender tales como cristales, barandillas sueltas o más planchas de la fachada.