Nueva bronca en Compromís por el nombramiento como senador autonómico de Enric Morera en vez de Mulet

Nueva bronca en Compromís por el nombramiento como senador autonómico de Enric Morera en vez de Mulet

Compromís, el partido nacionalista «que no tenía jefes en Madrid ni Barcelona» que en estas elecciones a Cortes Generales ha ido bajo el paraguas de SUMAR no sale de una polémica para meterse en otra.

El ya ex-senador por designación autonómica Carles Mulet ha denunciado en sus redes sociales la maniobra de Més Compromís (antiguo Bloc) para desalojar a la gente de Iniciativa (otro de los componentes de Compromís). Esta vez le ha tocado a él, y es que Més Compromís ha impuesto el nombre del ex-president de les Corts Valencianes Enric Morera como próximo senador autonómico por designación de Compromís, dejando fuera a Carles Mulet.

Carles Mulet habla de «voladura controlada y persecución»

 

Asegura el senador del «apocalipsis zombie» que hace ya tiempo que iban a por él y que ahora Més Compromís incumple nuevamente los acuerdos de la coalición catalanista. Asegura que siguiendo el acuerdo, Iniciativa empezó un proceso de primarias y él consiguió el 90% de los apoyos.

Han salido algunos ex-altos cargos de la coalición asegurando que no es el primer incumplimiento ni juego sucio dentro de la coalición, con múltiples frentes y problemas abiertos. Incluso algunos les acusan de irregularidades muy graves.

 

También la Ciudad de Valencia dentro de incluso iniciativa hubo gran polémica al exigir la concejal Gloria Tello repetir las primarias con acusaciones nunca probadas de fraude. Al quedarse fuera de los cargos de Compromís que encabezarían la lista municipal de Valencia. Así consiguió una nueva votación donde sorprendentemente quedó primera ( antes había quedado cuarta). Lo que catapultó a la concejal al tercer puesto de la lista de Compromís per Valencia. Una concejal que no dudó en acusar a sus propios compañeros, como no ha dudado en insultar desde sus redes sociales a colectivos que le pidieran responsabilidades por sus tareas de gobierno, fueran de derechas o de izquierdas, insultos que extendió a comunicadores y medios.

Otra polémica más de una coalición que es una sopa de siglas y que más bien parece una amalgama de intereses particulares de unos y otros. Una nueva crisis abierta en Compromís y que dinamita nuevamente la vida interna del partido considerado de «poca calidad democrática» por sus propios afiliados, y donde algunos no dudan en «chafar cabezas» para seguir ascendiendo en sus ansias de poder. Lo hemos visto en los últimos años una y otra vez.

«Sóm molt de Mónica» pero la realidad es que a rey muerto, rey puesto, y Baldoví aprovechó su oportunidad para enterrar a Oltra y ocupar su lugar. Ahora de nuevo tensiones y acusaciones que una vez sus cargos dejen de cobrar el erario público seguirán las peleas por tener un «sillón» y seguir cobrando…

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