Este diario, Noticias Ciudadanas fue el primero en denunciar de la mano de los vecinos y de la inestimable e impagable labor del Círculo por la Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural de las vomiteras y orines en La Lonja y los Santos Juanes. Una imagen deplorable de unos animales de dos patas, evidentemente alcoholizados y que no tienen respeto alguno por el patrimonio.
Ayer mismo la alcaldesa de Valencia, María José Catalá tuvo que salir al paso de la polémica, y aseguró que “no voy a tolerar conductas incívicas como las del pasado fin de semana” y añadió que se multará a quién se pille orinando en la vía pública y en un monumento con más de 600€.
Pero este pasado fin de semana se desmadró con los tardeos primero y nocheos después, y con la evidente falta de previsión municipal. Por eso el Círculo del Patrimonio pedía medios al Ayuntamiento y le recordaba las cámaras de videovigilancia que parece nadie observa…
Vomiteras en la puerta de la Lonja y Les Covetes utilizadas como urinarios
Vallado de la Lonja
Ayer mismo y tras la polémica, el Consistorio Municipal decidió vallar todo el perímetro de La Lonja a un metro de su fachada, vallas amarillas de poco más de un metro, para “proteger este edificio patrimonio de la humanidad de los incívicos”.
El Consistorio Municipal asegura se van a vallar los principales monumentos, pero anoche las Torres de Serranos carecían de este vallado y los orines en las esquinas eran visibles y sobre todo se podían oler.
La oposición de Compromís hoy mismo ha criticado la falta de previsión y pide muchos más wateres químicos en las calles.
La alcaldesa ha querido salir al paso de la polémica, pero es evidente que el Ayuntamiento ha fallado en previsión en estas las primeras fallas del nuevo gobierno PP-Vox y que las distintas concejalías no se han coordinado nuevamente, repitiendo los errores del pasado de Compromís – PSPV, ya que sigue cada concejalía a lo suyo, y cada partido como si estuviera en un Ayuntamiento distinto.
Rectificar es de sabios, pero pasadas las Fallas alguien deberá poner negro sobre blanco y pedir explicaciones de algo que sucede todos los años y es perfectamente previsible. Parece que pasar de 52 a más de 60 asesores le ha servido de poco a la Alcaldesa María José Catalá, porque los errores siguen siendo los mismos en un deyavú continuo en el Ajuntament del Cap i Casal…
¿Y las cámaras?. Mismos errores una y otra vez
Se repiten los errores de la legislatura anterior, donde se denunciaron por parte del Ayuntamiento pocas conductas incívicas, de hecho la limpieza de pintadas se disparó un 300%, a pesar de negar algunos de los concejales el problema. Ahora es el momento de solucionar lo que no funciona, pero para eso hay que tener voluntad política, y sobre todo reconocer el problema, no caigamos una y otra vez en los mismos problemas de egos personales, y hagamos un Ayuntamiento propio de la tercera capital de España que funcione coordinado y no múltiples ayuntamientos donde cada concejalía y servicio va a la suya, ya tenemos el mal ejemplo de la experiencia de legislaturas anteriores, pero parece que nada ha cambiado, excepto los gobernantes.
“Todo ha cambiado para que al final nada cambie más que los que gobiernan”.
Instamos a las autoridades municipales a cambiar de actitud, a tener que reconocer que este diario se equivoca, pero de momento, los hechos nos dan la razón en la mayoría de ocasiones… Cambiemos la actitud, las formas y sean coherentes. Pongan soluciones.