El ayuntamiento enviará a la Policía Local estos días para comprobar si han cerrado los locales donde de los 400 trabajadores un tercio resultó afectado por la DANA
Los restaurantes de la Marina Real de Valencia, ubicados en la zona norte, han denunciado que la ausencia de licitación del futuro concurso para adjudicar dicho espacio de restauración por la Delegación de Patrimonio del Ayuntamiento de Valencia, a estas alturas de la temporada de ocio, puede suponer el cese de más de 400 trabajadores, de los cuales una tercera parte resultaron afectados por la DANA en sus lugares de residencia.
La orden de cierre del Ayuntamiento de Valencia de dichos locales supondría un problema para ellos, según ha afirmado el portavoz del bufete Chapapría-Navarro & Asociados, Juan Chapapria. Además, desde el ayuntamiento, se ha comunicado el envío de agentes de la Policía Local estos días para comprobar si los locales están cerrados o no.
El portavoz del bufete, Juan Chapapria, ha manifestado que “debemos recordar que los adjudicatarios cumplen con todos los requisitos que el Consorcio Valencia 2007 solicitó en su día y también con lo que se ha demandado desde delegación de Patrimonio en la actualidad. Se han firmado dos prórrogas y se han pagado las fianzas solicitadas por parte de la administración, en temporada baja, para que ahora incumpla su palabra la corporación local de permitir a dichos locales permanecer abiertos hasta la adjudicación al nuevo concesionario, que pueden ser nuestros clientes u otros” .
La realidad es que sí el cierre se produce en estos momentos del año la zona quedará vaciá y podría convertirse en un espacio de botellón y ocupación de los locales con la consiguiente peligrosidad y molestias que ello supondría para la población
“Los adjudicatarios que recibieron la concesion hace más de 20 años , piden mantenerse donde se encuentran hasta la adjudicación del nuevo concesionario porque se corre peligro de ser un Maremagnum como en Alicante. Además, los empresarios han sufragado la vigilancia cuando no la ha habido en estos espacios cuya vigilancia corresponde a la Policía Local. Han sido y quieren seguir siendo ser colaboradores con la administración pero siguen sin darles una justificación cuando les niegan continuar en una zona de ocio generada a partir de la Copa del América
“Nadie les ha dado nada a los empresarios que están en esa zona. Pocas son las molestias que generan y, además, esperan contar con el respaldo de la Federación de Hostelería de Valencia”, ha comentado el abogado del bufete valenciano.
Reacción municipal de la propia alcaldesa
La alcaldesa de Valencia tras la denuncia de los empresarios ha asegurado que dos de los 4 locales afectados a los que no ha renovado la concesión este mismo viernes saldrán a licitación directa, y ha anunciado que se adjudicarán a «La Mare de Va», un moedlo de escuela de hostelería para personas con síndrome de dawn que ya funciona en La Marina y con el que colaboran tanto el Ajuntament de Valencia como la Diputació de Valéncia.
Los otros dos locales saldrán -según hoy mismo ha dicho la propia Catalá- próximamente a concurso.
El Ayuntamiento niega la persecución a los locales y ha asegurado que «ha decidido no prorrogar el contrato de adjudicación de estos locales de hostelería».
«Durante 8 años allí no pasaba nada, pero se ha permitido todo»
Son las duras palabras de la alcaldesa María José Catalá a estos empresarios de hostelería, sin explicar nada más. deslizando algo que después ni explica y dejando a la libre interpretación sus palabras, generando más incertidumbre y complicando aún más las cosas.
«Este mismo viernes se adjudicarán de manera directa dos de los locales, para ampliar La Mare que Va, con una escuela de hostelería para personas con discapacidad, ese es el modelo de ciudad que queremos»
Han sido las únicas palabras de una alcaldesa que tras esta decisión los hosteleros aseguran irán 400 personas a la calle y esperaban que tras acabar la concesión se adjudicaran mediante concurso de nuevo los locales «y si ganamos el consurso seguiremos y si no nos marcharemos«, una situación que sólo se dará con 2 de los cuatro locales ya que dos saldrán por adjudicación directa, y no hay fecha concreta para ese concurso público.
Los empresarios acusan directamente a la alcaldesa de persecución y de arruinar su negocio de hostelería. «Tenemos licencia de actividad», es verdad, así que si Catalá como ha asegurado envía a los agentes de la Policía Local sólo podrán realizar un informe que certifique la actividad y deberá acudir a los tribunales como propietario de los locales para demandarlos, ya que el Ayuntamiento entiende en una interpretación libre» que se acabó su concesión este domingo y por tanto deben cerrar, y espera que a lo largo del mes desalojen los locales y les devuelvan las llaves de los mismos.