Alcàsser (Valencia), 5 de julio de 2025
Una fuga de ácido clorhídrico procedente de un camión averiado en la autovía A-7 ha obligado a las autoridades a confinar durante varias horas a los vecinos de Alcàsser, en la provincia de Valencia, como medida de precaución. El suceso se produjo durante la madrugada de este sábado y ha provocado una importante movilización de medios de emergencia ante la peligrosidad del vertido.
El camión, que transportaba una carga de 1.000 litros de ácido clorhídrico, sufrió una avería en el kilómetro 352 de la A-7, a la altura del municipio de Picassent, en sentido Alicante. A causa del incidente, 400 litros del químico altamente corrosivo se derramaron en la calzada, generando una nube tóxica que obligó a activar el protocolo de emergencia química.
Activación inmediata del protocolo de seguridad
El aviso se recibió a las 2:27 horas de la madrugada, momento en el que el Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia movilizó varias dotaciones desde los parques de Silla y Torrent, apoyadas por unidades especializadas en riesgos químicos.
Los efectivos se desplazaron con trajes de protección específicos y comenzaron las labores de contención del vertido y neutralización del producto químico. Debido a la dirección del viento, se decidió confinar de forma preventiva a toda la población de Alcàsser. También se restringió el acceso al polígono industrial de Picassent y se cortó la circulación en el tramo afectado de la autovía.
El peligro del ácido clorhídrico
El ácido clorhídrico es un compuesto químico altamente corrosivo, utilizado habitualmente en procesos industriales, limpieza y tratamiento de metales. En contacto con el aire húmedo puede liberar vapores irritantes, y su exposición directa representa un riesgo tanto para la salud humana como para el medio ambiente.
Aunque el derrame fue controlado, la nube tóxica generada obligó a tomar medidas extraordinarias. Las autoridades recomendaron a la ciudadanía permanecer en sus casas y cerrar puertas y ventanas, y a los conductores de la zona, circular con las ventanillas cerradas.
Evolución del operativo y retirada del material
Los trabajos de contención y limpieza se han prolongado durante la mañana del sábado. La situación está ya bajo control, según han confirmado fuentes del 112 y del Consorcio de Bomberos. Sin embargo, las labores de retirada del material contaminado y del camión averiado aún continúan.
Una empresa especializada en gestión de residuos peligrosos se encargará de extraer el ácido clorhídrico restante, y una grúa pesada ha sido movilizada para retirar la cabeza tractora del vehículo, mientras se organiza la retirada segura del remolque.
El confinamiento, levantado pero se mantienen recomendaciones
A lo largo de la mañana, las autoridades han procedido al levantamiento del confinamiento, una vez asegurada la zona y neutralizado el riesgo. No obstante, se mantiene la recomendación de no circular por la zona si no es estrictamente necesario y, en caso de hacerlo, mantener los sistemas de ventilación del vehículo cerrados.
Sin daños personales pero con preocupación vecinal
Afortunadamente, no se han registrado heridos ni intoxicaciones a consecuencia del vertido, aunque el suceso ha generado alarma entre los vecinos de Alcàsser, que se despertaron sobresaltados por los avisos de emergencia y el dispositivo desplegado.
Algunos residentes han criticado la falta de información inicial o la escasa claridad de las instrucciones. “Nos enteramos por redes sociales y el boca a boca. No sabíamos si salir o no”, comenta un vecino de la zona más cercana al polígono.
Revisión del transporte de mercancías peligrosas
El incidente ha vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre la seguridad del transporte de productos químicos peligrosos, especialmente en zonas cercanas a núcleos urbanos. Desde el Ayuntamiento de Alcàsser se ha solicitado una reunión urgente con responsables de emergencias y del Consorcio Provincial para revisar los protocolos y prevenir futuras situaciones similares.
Conclusión:
La rápida actuación de los bomberos ha evitado que el suceso tuviera consecuencias más graves, pero el vertido de ácido clorhídrico en plena A-7 y el confinamiento de Alcàsser evidencian la necesidad de reforzar los sistemas de alerta, información ciudadana y control de mercancías peligrosas que transitan a diario por nuestras carreteras.