El Arzobispado de Valencia anunció el 19 de agosto de 2025 que el cardenal Antonio Cañizares Llovera, arzobispo emérito de Valencia, ha recibido el alta hospitalaria tras permanecer ingresado desde el 7 de agosto debido a un «delicado estado de salud». Según el comunicado oficial, el cardenal, de 79 años, «evoluciona favorablemente» y ha sido trasladado a su residencia habitual, donde continuará recibiendo atención médica para completar su recuperación. El Arzobispado expresó su gratitud por las oraciones y muestras de cariño recibidas durante este periodo y solicitó a los fieles que sigan rezando por la plena recuperación del prelado.
Contexto de la hospitalización
El cardenal Cañizares fue ingresado el 7 de agosto de 2025 en un hospital de Valencia, aunque no se han revelado detalles específicos sobre la naturaleza de su enfermedad ni el centro médico donde fue atendido, respetando la privacidad del cardenal. La noticia de su ingreso generó preocupación en la comunidad eclesiástica y entre los fieles, dado que Cañizares es una figura destacada en la Iglesia católica española. El arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, pidió en aquel momento a los creyentes que elevaran oraciones por el restablecimiento del cardenal, quien fue su predecesor en el cargo.
Durante su hospitalización, que duró aproximadamente 12 días, surgieron rumores infundados sobre su fallecimiento, los cuales fueron desmentidos por el Arzobispado. La favorable evolución de su estado de salud ha sido recibida con alivio y esperanza, tanto por la diócesis como por la comunidad católica en general, que ha mostrado un amplio apoyo a través de mensajes y plegarias.
Trayectoria de Antonio Cañizares
Antonio Cañizares Llovera, nacido en Utiel (Valencia) en 1945, es una de las figuras más relevantes de la Iglesia católica en España. Ordenado sacerdote en 1970, estudió en el Seminario Diocesano de Valencia y obtuvo un doctorado en Teología con especialidad en Catequética en la Universidad Pontificia de Salamanca. Su carrera eclesiástica incluye cargos de gran responsabilidad, como arzobispo de Toledo (2002-2008) y prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos en el Vaticano (2008-2014), donde fue considerado uno de los españoles con mayor influencia en la curia romana. Fue nombrado cardenal por el papa Benedicto XVI en 2006, recibiendo el título de cardenal presbítero de San Pancrazio.
Cañizares fue arzobispo de Valencia desde el 4 de octubre de 2014 hasta el 10 de octubre de 2022, cuando presentó su renuncia por motivos de edad, conforme a la normativa canónica, y fue sucedido por monseñor Enrique Benavent. Durante su mandato en Valencia, destacó por su defensa de la educación católica, la libertad religiosa y los valores cristianos, impulsando iniciativas como la campaña #yoelijo, que promovió la enseñanza de religión en escuelas públicas y concertadas. También dejó un legado institucional con la creación de la Comisión Mixta de Cooperación entre la Generalitat Valenciana y el Arzobispado, enfocada en temas de patrimonio cultural, educación y asistencia social.