Valencia. Diez meses después de la DANA del 29 de octubre, la Confederacion Hidrografica del Jucar (CHX) ha confirmado que la presa de Forata, en la Foia de Bunyol, no estuvo en ningún momento en riesgo de colapsar pese a la magnitud de la riada.
El director técnico del organismo, Manuel Torán, explicó que la infraestructura del rio Magre, con 57 años de funcionamiento, “superó con éxito una prueba extrema” y se encuentra en “buen estado para muchos años más”.
Una crecida histórica
Torán detalló que aquel día llegaron a entrar 2.000 metros cúbicos por segundo, un caudal equivalente a un periodo de retorno de 10.000 años. En apenas diez horas, la presa gestionó 550 veces más agua de la que soporta en condiciones normales.
“En ningún momento estuvo en peligro de reventar. La presa se encontraba en situación de sequía y, aunque el nivel subió de manera brutal, el seguimiento estructural fue constante y no hubo riesgo real”, afirmó el responsable técnico.
Una infraestructura clave para el regadío
La presa de Forata, de planta circular y construida en hormigón, tiene capacidad para poco más de 37 hectómetros cúbicos y garantiza el riego de unas mil hectáreas agrícolas.
Hoy libera apenas dos metros cúbicos por segundo, una cifra insignificante si se compara con los 1.100 litros por segundo que llegó a expulsar en las horas críticas de la DANA.
“Sobresaliente” en la gestión de la riada
La CHX califica la respuesta de la presa como un éxito: “Forata aprobó con nota superexcelente, tanto por haber soportado la rápida subida del nivel de agua como por el control de la avenida, que duró unas tres horas”.
La presa será una de las protagonistas de la nueva temporada del programa La via verda, dedicado a mostrar el corazón y los secretos de las principales infraestructuras hidráulicas de la Comunitat Valenciana.