En el Hospital Universitario del Vinalopó, la atención al paciente oncológico va más allá del tratamiento médico: se trata de acompañar, escuchar y ofrecer un apoyo real durante todo el proceso. Bajo esta visión humanizadora, el Departamento de Salud del Vinalopó ha puesto en marcha una serie de reuniones didácticas dirigidas a pacientes oncológicos y oncohematológicos, sus familiares y personas interesadas, en las que han participado más de 80 pacientes y familiares.
Estos talleres, organizados por el hospital y coordinados por Laura Riquelme, Enfermera Gestora de Casos de la Unidad de Oncología y Oncohematología, buscan crear espacios seguros donde se combina formación integral con acompañamiento emocional. “Estos talleres no sólo son talleres como tal, sino que se han convertido en momentos de comunicación y de compartir aspectos personales y vivencias, con los profesionales sanitarios y con otros pacientes”, explica Laura Riquelme.
Impartidos por un equipo multidisciplinar compuesto por nutricionistas, psicooncólogas, fisioterapeutas y enfermería especializada, los talleres abordan temas que los pacientes han planteado en consultas a lo largo del tiempo. Cada sesión combina teoría, práctica y espacio para el diálogo, garantizando una atención personalizada y cercana. Los grupos suelen estar compuestos por unas 15 personas, lo que favorece un ambiente íntimo y de confianza. Esta dinámica ha resultado especialmente positiva para el bienestar emocional de los pacientes, al facilitar la expresión personal y el apoyo mutuo.
Las opiniones de los propios pacientes reflejan el valor humano de esta iniciativa expresando su gratitud por poder formar parte de estas reuniones, destacando que “esencial para una atención más cercana y empática. Es una muestra de dedicación y preocupación por el paciente que debería estar en todos los hospitales”. Por su parte, un paciente compartió al finalizar una sesión “es un alivio poder hablar de cosas tan personales delante de otras personas y contar mi sufrimiento sin miedo a hacer sufrir al resto, ya que a mi familia no quería preocuparle con estas cosas” por lo que podemos considerar que estos talleres representan un lugar seguro donde expresarse libremente, sin juicios ni temor.
Desde el Hospital del Vinalopó, la apuesta es clara: humanizar la atención en oncología no solo mejora la relación terapéutica, sino que fortalece el bienestar emocional de los pacientes y sus familias. Como afirma Laura Riquelme, “más que resolver dudas, construimos puentes de confianza y acompañamiento. Entre ellos, se forman conversaciones muy productivas que les ayudan a verse reflejados en otros y a apoyarse mutuamente. Eso marca la diferencia en un proceso tan complejo.”
Con estos talleres, el Hospital Universitario del Vinalopó reafirma su compromiso con una atención sanitaria integral, cercana y humana, donde cada paciente es tratado como una persona con necesidades únicas.