El exministro socialista José Luis Ábalos rechaza las acusaciones del informe de la Guardia Civil, defiende que los pagos recibidos tienen justificación y califica de “loca” la hipótesis de que usara claves como “folios” para referirse a dinero.
Los sobres del PSOE y los pagos en metálico
El informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detecta supuestas irregularidades en los pagos al exministro José Luis Ábalos. Entre las menciones aparece la existencia de sobres con dinero en metálico vinculados a su nombre.
Ábalos responde que esos sobres no eran exclusivos suyos, sino que todos los miembros de la Ejecutiva del PSOE los recibían, en concepto de gastos de manutención y transporte. Según su versión, no se trataba de fondos opacos, sino de una práctica conocida dentro de la organización.
Las cuentas que “no cuadran”
El informe de la UCO señala desajustes entre lo declarado por el partido y los ingresos detectados. Ábalos lo rebate con dureza:
“Estoy convencidísimo de que cada ingreso refleja el motivo y la cuantía. Lo que ocurre es que a la UCO nunca le cuadra nada”, asegura.
Las “chistorras” y los “folios”: ¿códigos para dinero?
Uno de los puntos más llamativos del informe son las conversaciones entre Ábalos y Coldo García, exasesor investigado, en las que aparecen referencias a “chistorras” y “folios”.
- Sobre las “chistorras”, Ábalos afirma desconocer por completo el término.
- En cuanto a los “folios”, la UCO interpreta que podrían ser una clave para referirse a dinero.
Aquí, el exministro estalla:
“Me cabreé un huevo al leer esa hipótesis loca. Cuando hablaba de folios, me refería a los recambios de mi impresora, que consumía mucho papel. Nada más.”
Los 96.000 euros sin rastro claro
El informe recoge también 96.000 euros localizados pero no justificados. Ábalos los minimiza y hasta ironiza con la cifra:
“Si lo divides entre diez años y doce meses, son unos 790 euros al mes. Si eso es toda la famosa corrupción, se van a dar cuenta de que no existe.”
La crítica a las filtraciones
Más allá del fondo, Ábalos se declara molesto por la filtración del informe a los medios antes de que él mismo pudiera leerlo. Denuncia la rapidez con la que se difundió y considera que se le priva de un derecho básico de defensa.
Un caso abierto con fuerte impacto político
La investigación de la UCO sobre Ábalos y su entorno forma parte de un conjunto más amplio de pesquisas que afectan a antiguos responsables socialistas y a la financiación del partido. Aunque el exministro defiende su inocencia y resta importancia a las cifras, el caso sigue en manos judiciales y con fuerte repercusión política.