El Ayuntamiento aprueba la evaluación ambiental del nuevo plan urbanístico de la pedanía para reducir el riesgo de inundaciones tras la DANA del pasado otoño.
Valencia, 3 de octubre de 2025.
La Junta de Gobierno Local ha aprobado este viernes la evaluación ambiental y territorial estratégica de la modificación del Plan Especial del Sector La Torre, en la pedanía de Pobles del Sud, con el fin de que los futuros edificios cuenten con aparcamientos en altura y no en sótano. La medida busca prevenir daños por inundaciones, como los que provocó la DANA del 29 de octubre de 2024.
Aparcamientos en altura hasta dos plantas
Los servicios técnicos municipales han optado por la construcción de aparcamientos sobre la planta baja, concretamente en las plantas primera y segunda, frente a la opción alternativa planteada por la Asociación de Promotores de Valencia (APROVA), que proponía semisótanos elevados un metro y medio sobre la calle.
Esta solución permitirá que las nuevas edificaciones, tanto las torres en bloque (TOB) como las torres exentas (TOE), sitúen las plazas de aparcamiento en niveles superiores, fuera del alcance de posibles inundaciones.
La decisión implica un aumento de la altura máxima edificable, que pasará de planta baja más 20 alturas a planta baja más 22 alturas, para permitir la incorporación de los dos niveles de aparcamiento.
Inspirado en el PATRICOVA
El Servicio de Planeamiento ha señalado que la propuesta de APROVA, presentada el 28 de marzo de 2025, es “de interés” y que, al aplicarse en un sector donde aún quedan por construir numerosos edificios, permitirá prevenir futuras catástrofes similares a la del pasado otoño.
Según los informes municipales, la modificación sigue la línea del PATRICOVA (Plan de Acción Territorial sobre Prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat Valenciana), al ofrecer alternativas de diseño urbano que minimicen los daños por fenómenos meteorológicos extremos y garanticen la seguridad de la población residente.
Sin impacto ambiental negativo
El informe de evaluación ambiental concluye que la modificación no tendrá efectos negativos sobre el medio ambiente, al no suponer aumento de emisiones, contaminación ni riesgo añadido. Además, se aclara que el mantenimiento de las nuevas estructuras recaerá en las comunidades de propietarios, al construirse sobre espacio libre privado de parcela.
“Se trata de una medida preventiva que adapta la ciudad al cambio climático y a los nuevos retos de seguridad urbana”, destacan fuentes municipales.