Una intensa lluvia descarga cerca de 40 litros por metro cuadrado en menos de una hora y provoca preocupación entre los vecinos
El barranco de la Saleta, en el municipio de Aldaia, volvió a desbordarse parcialmente durante la noche del sábado tras una fuerte tromba de agua que dejó casi 40 litros por metro cuadrado en menos de una hora. El episodio, que afectó a buena parte del área metropolitana de Valencia, reavivó el miedo entre los vecinos por los recuerdos de la grave riada sufrida durante la DANA de 2024.
Según los datos de la Associació d’Afectats d’Aldaya per la DANA, la crecida del barranco se produjo poco después de las 22:00 horas, cuando una lluvia torrencial anegó la zona en cuestión de minutos. En total, se han acumulado más de 130 litros por metro cuadrado en apenas dos días, lo que ha saturado el terreno y los sistemas de drenaje.
El Ayuntamiento afirma que las compuertas evitaron el desbordamiento total
Desde el Ayuntamiento de Aldaya han confirmado que, aunque el agua alcanzó niveles preocupantes y llegó a inundar parcialmente uno de los túneles que cruza el barranco, no se produjo un desbordamiento hacia las calles del municipio, gracias al sistema de comportas canalizadoras instalado en la zona tras las inundaciones del pasado año.
“Siempre nos preocupa la Saleta porque discurre a cota cero y cualquier tormenta intensa genera riesgo. Pero, afortunadamente, las medidas de contención han funcionado y han evitado males mayores”, explicó el alcalde Guillermo Luján, quien destacó la rápida respuesta de los equipos de emergencia y la colaboración ciudadana.
Medidas de precaución y aviso a la población
Durante la noche, el consistorio difundió varios avisos de precaución en sus redes sociales, recomendando a las personas mayores o con movilidad reducida permanecer en las plantas altas de sus viviendas. También se pidió a los residentes en las zonas próximas al barranco retirar sus vehículos para evitar daños.
Doce horas después, la situación se encuentra estabilizada, sin agua acumulada, aunque los vecinos reconocen haber vivido con angustia el repentino crecimiento del caudal. “El miedo vuelve cada vez que llueve así”, comentó una vecina de la calle Pintor Segrelles, una de las más cercanas al cauce.
Vigilancia en otros puntos críticos: Poyo y Horteta
El episodio de fuertes lluvias también provocó crecidas en otros barrancos de la provincia de Valencia. El Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat informó de aumentos de caudal en el barranco de Poyo, en su confluencia con el barranco de los Cavalls y el de l’Horteta, en el término municipal de Torrent, así como en el barranco del Gallego, en Chiva.
Efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia permanecieron en la zona durante toda la madrugada. Según su informe, la situación se normalizó alrededor de las 4:00 de la mañana tras el seguimiento de los puntos de control hidrológico.
Lluvias intensas también en la Ribera y el Camp de Turia
El fuerte episodio de lluvias no se limitó al área de Aldaya. Según la Aemet, se registraron acumulados significativos en distintos municipios de la provincia, con 29,7 litros por metro cuadrado en Alborache, 28,2 en Betera, 26,9 en Macastre, 26,4 en Paterna, 24,7 en Yatova y 24,4 en RibaRoja de Turia.
En el norte de la provincia también se reportaron lluvias destacadas: 29,2 l/m² en Calig, 28,2 en Borriana, 24,7 en la Pobla de Benifassà y 22,6 en Moncofa.
Un recordatorio de la vulnerabilidad ante la lluvia
El nuevo episodio de saturación en el barranco de la Saleta evidencia la fragilidad de los municipios del área metropolitana de Valencia frente a las lluvias torrenciales. Aunque las inversiones en canalización y compuertas han reducido los daños, la preocupación vecinal sigue latente cada vez que el cielo amenaza con nuevas tormentas.
“Estamos mejor preparados, pero el miedo no desaparece”, resume un vecino de Aldaya, que anoche, como muchos otros, durmió pendiente del sonido de la lluvia.