Un Mercado Central de Valencia encharcado
La semana pasada, como consecuencia de las lluvias que duraron varios días, el Mercado Central de Valencia amanecía encharcado. Y a pesar de quitar el agua de buena mañana la persistencia de las lluvias producía un panorama de goteras por todo el mercado, con cartones y cajas para recoger en la medida que podían el agua que caía de la cubierta.
Este problema no es nuevo, viene desde hace muchos años consecuencia de la dejadez por parte del Ayuntamiento de Valencia y de la Asociación de Vendedores que autogestiona el mercado, como se dice en argot popular unos por otros y la casa sin barrer, en este caso las filtraciones y goteras sin reparar.
Múltiples daños por las goteras

Cúpula del Mercado Central
Como consecuencia de las filtraciones de la cubierta se han producido daños de todo tipo en los comerciantes: cierre de puestos al caerle el agua y tener su sistema eléctrico mojado, partes de las instalaciones sin poder usar, con la falta de luz en varios puestos no se podían usar pesos, cortadoras o cajas registradoras, motores que dejaban de funcionar otros trabajaban con miedo a que se quedaran sin electricidad al caer agua sobre sus equipos, mercancía mojada. Lo grave es que esto sucede en mayor o menor medida cada vez que hay lluvias y los vendedores lo tienen como un riesgo asumido; el enfado y protesta por los daños cae en saco roto.
La autogestión y el ayuntamiento se lavan las manos
Para el Ayuntamiento el mantenimiento del edificio corresponde a la Asociación de Vendedores que es quien autogestiona el Mercado Central, en precario desde el año 2019 y es tema que deben de solucionar; por contra la Asociación de Vendedores argumenta que el Ayuntamiento es el propietario del edificio y las tareas de mantenimiento de la cubierta es su responsabilidad.
La realidad es que durante años cada vez que llueve se producen goteras y filtraciones provocando daños a las instalaciones de los comerciantes .
Desde la ACEMCCV La Cotorra apuntan que este problema de quitarse la obligación de mantener el edificio en perfecto estado, se soluciona asumiendo el Ayuntamiento la gestión directa del Mercado Central como lo están el resto de Mercados Municipales; así no habría duda alguna de quien es la obligación de solucionar este problema grave y otros muchos.
Molestias para los Clientes
Los charcos y zonas mojadas se convierten en un problema para transitar por el propio mercado, se producen caídas y resbalones, en definitiva hay que andar con mucho cuidado; esto es una mala imagen para el propio Mercado Central y la ciudad de Valencia.