El Ministerio del Interior ha reconocido una “extralimitación” en el uso de la fuerza por parte de un agente de la Policía Nacional que, junto a otros tres compañeros, redujo a un joven en Elche (Alicante) en agosto de 2017, ejerciendo presión sobre su cuello mientras se encontraba engrillado de pies y manos. El joven falleció durante la intervención.
En su resolución, Interior admite que hubo un “ejercicio de la fuerza no ajustado a los principios ni a los protocolos normativos”, lo que provocó un daño grave, irreparable y antijurídico. El ministerio ha reconocido la responsabilidad patrimonial del Estado y ha fijado una indemnización para el padre y el hermano de la víctima. La madre ya había sido indemnizada previamente en otra resolución.
🔹 Los hechos
El suceso ocurrió en agosto de 2017, cuando el joven, que padecía un trastorno médico, sufrió una crisis en su domicilio. Sus padres pidieron ayuda a los servicios de emergencias, y al lugar acudieron agentes de la Policía Nacional.
El joven se atrincheró en el sótano de la vivienda portando una navaja, por lo que fue necesaria la intervención de un segundo grupo policial. Tras reducirlo y esposarlo, los agentes continuaron aplicando presión sobre su cuello, torso y extremidades, lo que provocó su fallecimiento mientras se encontraba inmovilizado en el suelo.
El informe forense determinó que la causa de la muerte fue una “inhibición parasimpática de la circulación por presión en los senos carotídeos”, es decir, un bloqueo de la circulación sanguínea causado por presión a nivel cervical. El documento subraya que no se detectó consumo de drogas, alcohol ni psicofármacos.
🔹 Archivo judicial y resolución administrativa
El caso fue inicialmente instruido en un juzgado, pero quedó archivado de forma provisional cuando el agente principal sufrió un accidente que le dejó incapacitado, impidiéndole declarar. Sus tres compañeros fueron posteriormente absueltos, al no hallarse pruebas de que causaran la muerte del joven.
Pese al archivo judicial, Interior ha reconocido ahora la existencia de “nexo causal entre la actuación policial y el resultado de muerte”, apoyándose en las conclusiones de la autopsia.
🔹 Uso indebido de la fuerza
El ministerio descarta la versión de uno de los agentes, que sostenía que el joven se habría asfixiado por sí mismo, y da por probado que la presión sobre el cuello fue ejercida por el policía mientras el joven estaba engrillado e inmovilizado.
Aunque no se ha confirmado si se trató de la maniobra conocida como “mata león”, el informe oficial indica que fue el único miembro del operativo que actuó sobre la parte del cuerpo donde se produjo la lesión mortal.
Interior concluye que la intervención fue contraria a los principios recogidos en la Instrucción 12/2007, que regula el comportamiento de los miembros de las fuerzas de seguridad para garantizar los derechos de las personas bajo custodia policial.