Al final del turno de noche de hoy, cuando los funcionarios procedían a trasladar a los internos que tenían que ser conducidos a otros centros penitenciarios, un interno alterado por el simple hecho de tener que esperar su turno para el dirigirse al autobús de la Guardia Civil, ha comenzado a proferir gritos e insultos a los funcionarios. Cuando se le ha abierto la celda para conducirlo al vehículo, sin mediar palabra ha propinado un fuerte cabezazo en la cara al Jefe de Servicios que ha comenzado a sangrar por la nariz por lo que ha tenido que ser atendido en la enfermería del centro para una primera cura. Los servicios médicos le han recomendado acudir al hospital para una evaluación más exhaustiva donde se encuentra en la actualidad.
Desde el sindicato de prisiones Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM) destacan que la profesionalidad y rápida intervención de los trabajadores ha impedido daños mayores y, sobre todo, deseamos una pronta recuperación a nuestro compañero.
“De nuevo, por desgracia, queda patente que la nuestra es una PROFESIÓN DE RIESGO y es inaudito que el Ministerio del Interior y la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias se nieguen a reconocerlo así.”
“De igual modo, de una manera anacrónica e inexplicable, seguimos sin tener la consideración de AGENTES DE AUTORIDAD en el desempeño de nuestro trabajo, lo que brindaría una mejor protección ya que las agresiones a las que estamos expuestos tendrían un mayor reproche penal y en muchos casos ese simple hecho podría tener un carácter disuasoria de la agresión.”