El barrio valenciano de Sant Antoni celebra a través de la Cofradía de los antonianos la fiesta de Sant Antoni del Porquet, o Abat. Una celebración que reúne a miles de valencianos cada año, y que este año está completamente deslucida por la lluvia y el viento. La ausencia total de público que normalmente se acapara en las vallas es la tónica dominante y los dueños de mascotas que no faltan a la tradición se acompañan de paraguas y abrigos para los perros y demás animales domésticos.
El tiempo no acompaña y el palco de autoridades está guardecido con una carpa que trata de proteger de una lluvia pero que no lo hace debido al viento y empapa a todos.
Los paraguas y los abrigos junto con los animales son los protagonistas de esta jornada, la más desapacible que se recuerda en los últimos años y que quizá se debería haber aplazado al sábado, donde se espera la lluvia cese.
Nadie entiende la decisión de continuar, pero aún así existen colas de cientos de personas que convenientemente abrigadas, al igual que sus mascotas acuden a la Calle Sagunt a bendecir a sus animales aunque en una fiesta totalmente deslucida opr las inclemencias meteorológicas que no cesarán durante esta jornada. Y es que la lluvia no para de hacer acto de presencia, aunque en algunos momentos con mayor intensidad, esto unido al viento constante y a las bajas temperaturas no invitan a acudir. De esta manera las miles de personas que abarrotan el recorrido tras el vallado hoy no están, guareciéndose de tan desapacible jornada en su casa y desluciendo por completo la celebración.
Quizá hubiera tenido que aplazarse a mañana sábado esta celebración por las inclemencias meteorológicas, ¿qué opinas?.
Los que sí han acudido a la celebración como cada año son los perros policía, la Unidad canina de las Policías Local y nacional de Valencia.
