La Universitat de Valéncia (UV) y el Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad Valenciana (CERMI CV) han dado un paso decisivo hacia una universidad más justa e inclusiva.
Ambas entidades firmaron un convenio de colaboración que busca promover la plena inclusión educativa del alumnado con discapacidad, así como garantizar su derecho a la igualdad de oportunidades en el entorno universitario.
El acuerdo fue suscrito por el presidente de CERMI CV, D. Luis Vañó Gisbert, y la Rectora de la Universitat de València, Dª. María Vicenta Mestre Escrivá, en un acto institucional que pone de manifiesto el firme compromiso de ambas instituciones con los valores de equidad, accesibilidad y respeto a la diversidad.
Este convenio tiene como base la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, y contempla una amplia gama de acciones dirigidas a transformar el modelo educativo hacia uno verdaderamente inclusivo.
Acciones concretas para una universidad accesible
Según lo establecido en el convenio, la UV se compromete a impulsar actividades de sensibilización e información sobre la realidad del alumnado con discapacidad, con el objetivo de generar conciencia y eliminar prejuicios.
Además, se facilitará el acceso a los estudios universitarios mediante los apoyos y ajustes razonables que resulten necesarios, todo ello conforme a la legislación vigente.
También se prevé la elaboración e implementación de planes de inclusión educativa, diseñados conjuntamente con CERMI CV, para garantizar una participación plena y efectiva de las personas con discapacidad en todas las dimensiones de la vida universitaria.
Otro aspecto destacado es el fomento del deporte adaptado, a través del Servicio de Educación Física y Deportes de la UV, como vía para promover la integración social y el bienestar físico del alumnado.
Un convenio con visión de futuro
CERMI CV, en su rol de plataforma representativa del sector de la discapacidad en la Comunitat Valenciana, aportará sus recursos técnicos y humanos para colaborar en todas las iniciativas planteadas.
Para asegurar el cumplimiento de los objetivos del acuerdo, se constituirá una comisión de seguimiento paritaria, integrada por representantes de ambas instituciones. Esta comisión será responsable de definir, desarrollar y evaluar las acciones que se vayan implementando.
El convenio tendrá una vigencia inicial de cuatro años, con posibilidad de prórroga por otros cuatro, y aunque no implica compromisos económicos inmediatos, abre la puerta a futuras aportaciones a través de convenios específicos.
Este acuerdo marca un hito en el camino hacia una universidad verdaderamente inclusiva, donde cada estudiante, independientemente de sus capacidades, pueda desarrollarse académica y personalmente en igualdad de condiciones.