Valencia, 18 de julio de 2025
Una operación conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil ha permitido desarticular una banda criminal itinerante con base en Novelda (Alicante), especializada en robos con fuerza mediante el método del butrón. Los detenidos actuaban principalmente contra empresas del sector eléctrico, de las que sustraían grandes cantidades de cable de cobre para su posterior venta ilegal en chatarrerías. El valor total del material sustraído asciende a más de 567.000 euros.
Las investigaciones comenzaron en marzo, tras detectarse una serie de robos con un patrón similar en varias provincias españolas. En total, se han identificado al menos trece robos cometidos en las provincias de Alicante, Albacete, Murcia y Valladolid.
Un método organizado y perfeccionado
El grupo, compuesto por al menos seis personas entre hombres y mujeres, destacaba por su alto grado de coordinación. Cada miembro tenía un rol definido: desde los encargados de vigilar los polígonos industriales, hasta quienes ejecutaban los butrones o se encargaban del transporte del material sustraído. Para llevar a cabo los robos, alquilaban vehículos de gran capacidad y empleaban otros como lanzadera para evitar controles policiales.
Su modus operandi consistía en acceder a las empresas objetivo perforando muros o techos desde naves colindantes. En ocasiones, realizaban varios butrones sucesivos para llegar hasta el punto deseado. Una vez dentro, cortaban las bobinas de cobre —algunas de hasta 8.000 kilos— en fragmentos manejables y las cargaban en furgonetas.
Su eficiencia era tal que en una sola noche llegaron a cometer hasta tres robos. En un solo golpe en Ibi, se llevaron cable valorado en más de 246.000 euros. Sumando los robos en otras localidades como Villena, La Cañada y Elche, el total ascendía a más de 380.000 euros.
Actuaban en varias noches consecutivas
Uno de los episodios más llamativos ocurrió en Valladolid, donde estuvieron tres noches seguidas sustrayendo cobre de una empresa, causando daños valorados en 150.000 euros. Tras cada robo, trasladaban el botín a otras provincias para dificultar su rastreo.
Detenciones y desmantelamiento
Los cuerpos policiales establecieron un dispositivo de vigilancia tras detectar que planeaban un nuevo golpe. Así, lograron detener in fraganti a dos de los miembros en la localidad murciana de Bullas, con una furgoneta cargada de cobre robado. Posteriormente, se arrestó a otros tres miembros del grupo en Aspe y Novelda (Alicante).
Chatarrerías implicadas
La operación también reveló la implicación de dos empresas de recuperación de metales, situadas en Leganés (Madrid) y Numancia de la Sagra (Toledo). Estas chatarrerías compraban el cobre robado, pese a conocer su posible origen ilícito. Por ello, se detuvo a dos responsables de dichas empresas por un delito de receptación y se investiga a otras dos personas vinculadas.
Durante los registros, el SEPRONA detectó además numerosas infracciones administrativas en los locales inspeccionados.
Balance final
La operación concluye con un total de nueve personas implicadas: cinco detenidos por robos con fuerza y daños, dos por receptación, y dos más bajo investigación. La actuación policial ha logrado frenar una actividad delictiva altamente lucrativa y perjudicial para el sector eléctrico, afectado tanto por los robos como por los cuantiosos daños materiales causados.