Los vecinos del Cabanyal próximos al Jardín del Doctor Lluch siguen denunciando en unas obras del solar junto a la Guardia Civil la presencia de toxicómanos y de jeringuillas diaria.
Todo hace indicar que la crisis abierta de nuevo hace años en las denominadas Casitas Rosas se ha extendido y este lugar se ha convertido en una zona donde los toxicómanos se inyectan y se ha llenado de agujas, desplazados por la presión de los vecinos de la Malvarrosa han acudido a este lugar contigua al Cuartel de la Guardia Civil. Un lugar intermedio entre dos focos de drogadicción y de marginalidad, por un lado las Casitas Rosas de la Malvarrosa y por otra el Bloque Portuarios del Cabanyal.
Los vecinos en redes sociales están denunciando de nuevo la presencia de jeringuillas y advierten que en los últimos días están durmiendo en los tubos de la sobras a modo de poblado.
«Delante de La Pascuala, en el Cabanyal, al lado del tranvía y de la Guardia Civil, en pleno jardín del Dr. Lluch se está montando un poblado de toxicómanos. Están durmiendo en tubos de las obras de la avda Malvarrosa. Con total consentimiento policial y del Ajuntament de Valencia»
Afirma el ususario en X @sangarvi, al que le responde la misma asociación vecinal del Cabanyal que «estamos hablando de la presencia de jeringuillas desde hace tiempo»
https://x.com/sangarvi/status/1836066243389878569
Inseguridad ciudadana y problema sanitario
En un supuesto jardín donde pasean mascotas, juegan niños y pasean mayores la presencia de jeringuillas puede constituir un serio problema, ya que entre la hierba no se advierte su presencia y uno puede pincharse, constituyendo un problema grave de salud pública.
Catalá quiso solucionar los problemas derivados de la venta de drogas en la Plaza interior de las Casitas Rosas, reurbanizando la zona y dejando un simple asfaltado que no permite ningún elemento que utilizar como escondite. Pero la presión en esta zona ha hecho desplazar el problema de la venta y consumo de drogas y los toxicómanos a zonas cercanas.