Si hace escasos días miles de jueces y fiscales se concentraban a las puertas de los juzgados exigiendo la retirada de sus reformas jurídicas que les restarán independencia y permitirá a Moncloa controlar los procesos judiciales, un día después el PSOE la presentó en el Congreso de los Diputados para su tramitación.
Multitudinaria protesta de jueces y fiscales paraliza la Ciudad de la Justicia de Valencia
Así, el gobierno hace oidos sordos a la petición casi unánime de jueces y fiscales, a los que sigue ignorando, por ello se han plantado y anuncian no un paro, sino algo inédito en España, una Huelga…
Jueces y fiscales irán a huelga los días 1, 2 y 3 de julio y convocan una concentración el 28 de junio frente a la sede del Tribunal Supremo
Los Jueces y fiscales se han plantado ante Pedro Sánchez y su gobierno y sus intenciones y han dicho basta, por lo que han convocado hasta 3 jornadas de huelga que se prevé paralice por completo la justicia en España durante 3 días, y además antes de esto han convocado una concentración frente a la Sede del más alto tribunal español, el Tribunal Supremo.
Una protesta masiva que no apoyan las asociaciones denominadas como progresistas, a pesar de que casi todos aseguran que es una intromisión más del poder ejecutivo en el judicial en toda regla.
Protestan por por las reformas anunciadas por el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, sobre el acceso a ambas carreras judiciales y sobre la Fiscalía, para adaptarla al futuro cambio de modelo del proceso penal, donde las instrucciones pasarán de jueces a fiscales.
Cabe recordar que los fiscales depende su nombramiento del gobierno, por lo que se compromete la independencia judicial, véase el problema con la investigación en curso del Fiscal General del Estado, nombrado y apoyado a pesar de su investigación en curso por el Ejecutivo de Moncloa.
Si nadie lo remedia, y la actitud del gobierno es desafiar a jueces y fiscales, la huelga hará estragos en los Juzgados de toda España y hará aún más lenta la justicia en este país, que sigue sin contar con los medios necesarios para ser eficaz y ágil, y en vez de esto, se sigue empeñado desde la Moncloa por controlarla.