El plan de autoprotección de la residencia Savia de Paiporta descartaba cualquier peligro por lluvias fuertes pese a encontrarse a apenas dos kilómetros del barranco del Poyo
Paiporta, 21 de octubre de 2025. — La residencia Savia de Paiporta, escenario de una de las mayores tragedias humanas durante la DANA del 29 de octubre de 2024, no contemplaba ningún riesgo de inundación en su Plan de Autoprotección, según un informe de la Conselleria de Igualdad incorporado a la causa judicial que instruye el Juzgado de Catarroja.
El documento, fechado en mayo de 2022 y revisado en diciembre del mismo año, señala literalmente que “no se prevé ningún peligro de inundación por lluvias fuertes”, a pesar de que el centro está situado en una zona rústica, a las afueras de Paiporta y próxima al barranco del Poyo, uno de los puntos más afectados por la riada.
Paradójicamente, las inspectoras sí mencionan en otro apartado que “las inundaciones se incluyen entre los riesgos naturales del entorno”, aunque no se detallan medidas específicas de prevención o evacuación ante una eventual crecida de agua.
💧 Una avalancha que arrasó la planta baja
El informe de inspección, elaborado el 4 de noviembre de 2024, describe con crudeza los efectos del temporal: “La planta baja del centro quedó totalmente destruida como consecuencia de la avalancha de agua y barro ocasionada por las lluvias”.
La residencia, con 124 plazas residenciales y 14 de centro de día, albergaba en ese momento 95 residentes y 15 trabajadores. Según los testimonios recogidos, cuando el agua irrumpió en el edificio, el personal formó una cadena humana para evacuar a los mayores por las escaleras, cargando en brazos a quienes no podían caminar.
“No había luz; solo las luces de emergencia nos permitían ver. Se pudo atender a 89 personas, pero seis no lograron sobrevivir”, recoge el documento.
⚖️ La jueza pide las imágenes sin editar del Cecopi
La magistrada que dirige la investigación ha solicitado a Emergencias las grabaciones completas del Centro de Coordinación (Cecopi) correspondientes al 29 de octubre, “sin ningún tipo de edición”, para determinar si la respuesta institucional fue adecuada y en qué momento se tuvo conocimiento del riesgo que afectaba a la residencia.
Además, el juzgado analiza si otras dos residentes, fallecidas el 1 y el 3 de noviembre en hospitales valencianos, deben ser consideradas también víctimas directas de la DANA.
👩⚕️ Sin negligencia del personal, según el informe
Las inspectoras que elaboraron el informe subrayan que “no se puede constatar negligencia alguna en las actuaciones del personal”. Aseguran que la situación fue “dramática e imprevisible”, y que los trabajadores actuaron “con valentía y humanidad, pese a carecer de medios para hacer frente a una riada de tal magnitud”.
El mismo día del desastre, los responsables de la red de residencias Savia estaban centrados en otros centros —como los de Cheste, Requena y Llíria— ante los avisos meteorológicos, y llegaron a valorar trasladar a residentes a Paiporta, sin sospechar que sería el lugar más golpeado por la tormenta.
📉 Un fallo estructural y de planificación
La tragedia de Paiporta ha reabierto el debate sobre la falta de planificación de riesgos en centros sociosanitarios y la necesidad de revisar los planes de autoprotección para adaptarlos al cambio climático y a los fenómenos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes en la Comunitat Valenciana.