En política cuando uno dice una cosa y la contraria es que no se tiene claro el mensaje, y esto ha sucedido este fin de semana en el Partido Popular de la Comunitat Valenciana, donde mientras Mazón anunciaba esta semana un proyecto de Ley de Señas de Identidad para proteger a la Comunitat Valenciana del catalanismo, su presidente provincial acudía a una “Trobada” de la catalanista Escola Valenciana emulando al propio Chimo Puig en legislaturas anteriores.
La futura ley de Señas de Identidad
La Futura Ley de Señas de Identidad que han anunciado en repetidas ocasiones desde el PPCV, la que nadie conoce quién está redactándola, si es que alguien lo está haciendo, servirá según Mazón contra las injerencias catalanistas, una ley que proteja a la Comunitat Valenciana de los ataques a su lengua, su territorio y su cultura y en la que el propio president aseguró esta semana ante el cooperativismo valenciano que lo incluirá en la futura ley de señas como una de las singularidades a proteger por las instituciones públicas valencianas, un “totum revolutum” que no tiene fecha y que parece sacado de la chistera, porque nadie conoce quién lo está redactando.
Según ha relatado el propio mazón, -eso sí a un medio madrileño-, servirá para proteger a la Comunitat Valenciana e impedir subvenciones y apoyos a entidades, actividades, actos o colectivos donde se ataque a la integridad territorial de la Comunitat Valenciana, a su lengua o a sus costumbres. Lo de filtrar estas cosas a medios de Madrid va siendo habitual, en un claro desprecio a los medios valencianos y a su ámplio sistema comunicativo, pero puede esconder que como pasa con el Ajuntament de Valéncia los dirigentes valencianos están más preocupados en la imagen que tienen de ellos en Madrid que en la de los propios valencianos, incluyendo sus propios votantes.
El caso del apoyo del President de la Diputació a les “Trobades”
Este fin de semana ese relato se ha trucado y roto en pedazos. Todas las alarmas sonaron cuando la propia Diputació anunció mediante nota de prensa su presencia en las catalanistas “Trobadas” de la entidad hipersubvencionada por el gobierno anterior Escola Valenciana, mediante un estand de la Diputació de Valéncia dedicado a Estellés y sus versos…
Muchos no daban crédito a este apoyo explícito a estas “Trobades” donde habitualmente se encuentran mapas de los “països”, material diverso que ataca a la propia integridad de la Comunitat Valenciana o incluso banderas esteladas y cuatribarradas.
Pero este domingo la incredulidad se ha tornado en tremendo rechazo y cabreo monumental, cuando se ha conocido que la del domingo precisamente era en Benimodo.
Benimodo es precisamente la población que gobierna con mayoría absoluta el Diputado de Cultura de la Diputació de Valéncia (PPCV), el mismo que afirmaba estaban preparando grandes celebraciones para el “Año Estellés”. El mismo ayuntamiento que ha convocado un certamen literario de poesía y narrativa corta en homenaje a Estellés y que colabora activamente con Escola Valenciana.
La incredulidad y la sorpresa fue máxima al estar presente, incluso cogiendo la pancarta y dando un discurso el propio president de la Diputació de Valéncia, Vicente Mompó en esta jornada de la catalanista e independentista Escola Valenciana. Mompó no tuvo reparos en posar junto con Baldoví o con destacados dirigentes del PSPV.
¿Entonces hay dos versiones del PPCV o dos corrientes o cómo se comen estos hechos?
Porque ambos son totalmente contradictorios dentro del seno del mismo partido y que nadie puede entender absolutamente nada de lo sucedido. El PPCV deberá dar explicaciones y demostrar que claramente se decanta por una opción, porque jugar a dos bandas ya no es posible.
Les “Trobades”
Estos actos, que en valenciano se denominan “Encontres” han sido fiestas organizadas por Escola Valenciana en múltiples poblaciones para colegios e institutos, donde a lo largo de la historia se han envuelto niños con quatribarradas y paseado, donde hay mapas de “los països catalans” o donde se dice frases como “El nostre valencià és el català de tots“, siempre rodeados de quatribarradas y esteladas, con presencia alguna que otra vez de entidades políticas como ERC o similares en esta “fiesta infantil”.
Dar legitimidad como hizo Chimo Puig es lo que ha hecho ahora el propio president de la Diputació Vicente Mompó, a la par, presidente provincial del PP en Valencia y alcalde de Gavarda. Esto se contrapone frontalmente al discurso enarbolado por Mazón, y desmonta toda la estrategia.
El PPCV no es consciente de la gravedad de los hechos y si cree que tapando estos hechos y no dándoles importancia se acabarán, cuando vean las pancartas y manifestaciones en su sede entonces se tirarán las manos a la cabeza, pero “no hay más ciego que el que no quiere ver”. De momento las entidades valencianistas ya se les han puesto en contra y sólo les queda la amenaza de quitarles las escasas subvenciones, lo mismo que hizo el Botànic, pero eso sería igualarles a lo hecho por Chimo Puig y Compromís, y recordemos que hasta el ex-presidente de la Diputació de Valéncia hoy diputado en Corts Valencianes del PSPV, Toni Gaspar medió para devolver a Lo Rat Penat su esplendor arrebatado.
En estas “fiestas infantiles” nunca faltan las cuatribarradas ni la política, por tanto nunca faltan los ataques a la integridad de la Comunitat Valenciana y a su cultura y lenguas, así es el propio Mompó el que en caso de existir la propia ley de señas de identidad, el que las habría agredido con su presencia institucional. El PP tiene un problema y se tiene que decidir y definir de qué lado está.