Una operación de la Policía Nacional en una zona rural de Dénia destapa una red de delitos tras localizar una vivienda ocupada con 318 plantas de marihuana, objetos robados y un enganche ilegal a la luz.
Alerta vecinal que destapa una red criminal
Una simple denuncia de un vecino terminó por desvelar un complejo entramado de delitos en la partida rural de Dénia (Alicante). La Policía Nacional ha detenido este lunes a tres personas —un hombre de 32 años y dos mujeres de 28 y 35— como presuntos responsables de una plantación ilegal de marihuana, robo con fuerza y usurpación de fluido eléctrico. La intervención policial se desarrolló en una vivienda rural ocupada ilegalmente, situada en las afueras de la localidad.
El detonante de la operación fue la denuncia de un residente de la zona, quien alertó sobre la sustracción de diversos enseres personales. Lo que parecía un incidente aislado acabó revelando una trama con varias aristas delictivas.
Un registro revelador: marihuana, objetos robados y fraude eléctrico
La investigación arrancó con labores de vigilancia discreta en la vivienda sospechosa, donde los agentes identificaron a uno de los ocupantes. Una vez obtenida la autorización judicial, se procedió al registro del inmueble, hallándose objetos sustraídos del domicilio del denunciante, así como diversos artículos cuya procedencia está bajo investigación.
Pero lo más impactante estaba aún por descubrir: en una edificación anexa al jardín, los agentes encontraron una instalación perfectamente organizada para el cultivo de cannabis. En total, se contabilizaron 318 plantas en diferentes fases de crecimiento, acompañadas por sofisticados sistemas de iluminación, ventilación y riego.
Lo más alarmante es que todo funcionaba gracias a un enganche ilegal a la red eléctrica. La vivienda no tenía contador y estaba conectada de forma clandestina, lo que implica un delito de usurpación de fluido eléctrico, además del riesgo para la seguridad del vecindario.
Narcotráfico en zonas rurales: un fenómeno en crecimiento
La Policía Nacional considera que esta infraestructura estaba diseñada para la producción intensiva de marihuana destinada al mercado negro. “Se trata de una operación con potencial de obtener beneficios económicos considerables, lo que indica un nivel de organización elevado”, apuntan fuentes policiales.
La plantación desmantelada se suma a una preocupante tendencia en Dénia y otras zonas rurales de Alicante: la proliferación de cultivos ilegales en viviendas ocupadas. Solo en los últimos seis meses se han desmontado al menos cuatro instalaciones similares, con un total de nueve detenidos.
“Es un fenómeno que está creciendo, sobre todo en áreas menos transitadas donde los responsables creen que pueden operar sin ser detectados”, explica un portavoz de la Comisaría Provincial. “A menudo estas actividades están vinculadas con otros delitos como robos, extorsiones o incluso violencia”, añade.
Reacciones vecinales: “Aquí no estamos acostumbrados a esto”
Los residentes de la zona afectada han expresado su preocupación. “Aquí siempre ha sido una zona tranquila. Nunca pensamos que en una casa a pocos metros de la nuestra estuvieran pasando estas cosas”, comenta Antonio Giner, vecino de la partida. “Lo peor no era solo el cultivo, sino el enganche a la luz, que es un peligro para todos”.
Algunos vecinos afirman haber notado movimientos extraños y un incremento del trasiego de personas, especialmente por las noches. Sin embargo, nadie imaginaba el nivel de sofisticación de la plantación. “La verdad, nos ha sorprendido mucho”, comenta Carmen Soler, que vive a escasos 200 metros.
Un cuarto implicado sigue en paradero desconocido
Durante la operación, los agentes identificaron a un cuarto sospechoso vinculado a la vivienda, pero este no se encontraba en el lugar en el momento del registro y continúa fugado. Las autoridades han intensificado las labores de búsqueda, y no se descartan nuevas detenciones en los próximos días.
La investigación permanece abierta, con el objetivo de determinar el alcance de la red delictiva. No se descarta que los implicados mantuvieran vínculos con otros grupos dedicados al narcotráfico en la Comunidad Valenciana.
Un desafío para las fuerzas de seguridad
Este caso refleja las dificultades que enfrentan las autoridades en el control de delitos asociados a la ocupación ilegal de viviendas, una problemática creciente en ciertas zonas de la provincia de Alicante y del litoral mediterráneo. Las viviendas deshabitadas en áreas rurales se han convertido en un blanco frecuente para redes de delincuencia organizada.
Desde la Policía Nacional se insiste en la colaboración ciudadana como clave para detectar este tipo de actividades. “La denuncia vecinal ha sido fundamental para destapar esta situación. La colaboración de los vecinos es esencial”, subrayan.
Reflexión final: ¿Qué ocurre en nuestras zonas rurales?
El caso de Dénia abre un debate necesario sobre la seguridad en las zonas rurales, muchas veces fuera del foco de las grandes operaciones policiales. ¿Están estas áreas suficientemente vigiladas? ¿Cómo pueden las instituciones prevenir que se conviertan en refugios para actividades ilegales?
Sin duda, este tipo de intervenciones son una llamada de atención sobre una realidad que no siempre está presente en la conversación pública. La marihuana ya no se cultiva solo en polígonos industriales ocultos o naves abandonadas; ahora también se instala en antiguas casas de campo, a la espera de pasar desapercibidas.
La lucha contra el narcotráfico pasa también por cuidar nuestro entorno y nuestras comunidades. ¿Y tú? ¿Has notado algo extraño en tu barrio?
📌 Preguntas frecuentes
¿Dónde se encontró la plantación de marihuana en Dénia?
En una vivienda rural ocupada ilegalmente, situada en una partida de la zona rural del municipio.
¿Cuántas plantas de marihuana había?
Un total de 318 plantas en diferentes fases de crecimiento.
¿Cuántas personas han sido detenidas?
Tres personas han sido detenidas y una cuarta está siendo buscada.