El Instituto Valenciano de Seguridad pública que imparte la formación de los policías, cambia el nombre de una asignatura de violencia de género a violencia intrafamiliar, un cambio realizado desde la Consellería de Justicia cuya titular es Elisa Núñez y esto ha generado una nueva polémica
Distintos nombres del curso
El curso ha pasado de denominarse de violencia de género a violencia intrafamiliar, y ayer mismo la Consellera portavoz aseguró que se volvería a cambiar, tildando de error esa nueva redacción. Hoy la Consellera de Igualdad y vicepresidenta segunda, Susana camarero ha asegurado que el título será «violencia contra la mujer».
Desde el Gobierno Central, la Ministra de Igualdad no ha descartado acciones judiciales contra al propia Generalitat Valenciana por este cambio de denominación y el propio ejecutivo de Mazón ha reconocido que «es un error esa denominación».
¿Peligra el pacto de gobierno PP-Vox?
Hoy mismo el diputado Flores Juberías asegura en la red social «X» (antigua Twitter) que esto es un claro incumplimiento del pacto de gobierno, con lo que añade «se van a replantear el pacto de gobierno».
https://x.com/FloresJuberias/status/1808483947640439098
«Mazón hace algo más grave que desautorizar a su Consellera de Justicia: incumple su palabra. Lo que pacto suscrito y firmado entre PPCV y VOX CV contempla es la adopción de medidas de lucha contra la violencia intrafamiliar… y no otra cosa. Y lo sé porque fui yo quien propuso la redacción de ese apartado del acuerdo.»
Así, desde Vox se percibe que esto no es sólo una desautorización directa a la Consellera Elisa Núñez, sino una rotura del pacto de gobierno de la Generalitat Valenciana.
Pero hay que analizar las posibles consecuencias más allá de las palabras y amenazas propias del juego político.
¿Qué hará Vox?
Pues seguir como está, porque dentro de la formación hay un descontento generalizado en la provincia de Valencia, donde los cargos electos están muy alejados de los cargos orgánicos, en este caso Ignacio Gil Lázaro, en esta tricefalia de la cúpula de Vox entre la cúpula orgánica ( Ignacio Gil Lázaro), el candidato apartado a Madrid Carlos Flores Juberías y el propio Vicente Barrera, que si bien se descarta a priori personalmente parece que tampoco tiene buena relación con la orgánica del partido.
Incluso en Valencia Ciudad, Juanma Badena parece un verso libre que añade un trono de hierro más a este juego de tronos en la que se ha convertido la política de Vox en Valencia, donde cada uno tiene su familia y nos e hablan entre sí.
A parte debemos pensar que está pendiente una pequeña crisis de gobierno en la Generalitat Valenciana tras un año de gobierno, unos cambios anunciados por el propio president Carlos Mazón y que aún nos e han llevado a cabo y esperan desde hace semanas…
Todo un panorama que puede condicionar esos pactos o no, o permitir que existan desautorizaciones por quizá mantener el sillón, que equivale a directores generales, asesores, secretarios autonómicos, jefes de prensa, jefes de gabinete… Mucha gente «enchufada» a la que se ha colocado y que si salen del gobierno se pueden fácilmente quedar en la calle, veremos si el poder «dels diners en la boljaca» pueden más que las propias convicciones…
Desde luego que con el pacto se auguraba que no iba a ser precisamente un camino de rosas la legislatura, pero demasiadas polémicas en tan sólo un año auguran más bien el contrario, un verdadero rosario de pasión y problemas… y el Gobierno de la Generalitat valenciana no será nada fácil para Mazón con su socio de gobierno cada pocas semanas liando una nueva polémica, aún no salen de una y ya se meten de lleno en otra…
