El pleno municipal da luz verde al cambio en la ordenanza con el rechazo de PSPV, Compromís y EU-Podem, que lo consideran una medida “injusta” y una “gran estafa”
El pleno del Ayuntamiento de Alicante ha aprobado de forma inicial la modificación de la ordenanza fiscal del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) con los votos a favor de PP y Vox, que defienden la medida como una rebaja que supondrá un ahorro global de 1,1 millones de euros en 2026 y la introducción de nuevas bonificaciones.
Por el contrario, PSPV, Compromís y EU-Podem han votado en contra. Los socialistas han cifrado el ahorro en apenas tres euros anuales de media por familia, advirtiendo que la medida generará un “agujero” de un millón en las arcas municipales. Compromís la ha calificado de “gran estafa” y EU-Podem de “rebaja injusta”.
Bonificaciones incluidas en la ordenanza
Según explicó la concejala de Hacienda, Nayma Beldjilali (PP), la modificación beneficiará a 336.409 inmuebles entre viviendas y locales. Entre las bonificaciones destacan:
- Viviendas de protección oficial (VPO): 50 % de reducción durante los tres primeros años y 25 % en los dos siguientes.
- Jóvenes hasta 35 años: 50 % de rebaja durante cinco años en la compra de VPO.
- Familias numerosas: hasta un 90 % en función del valor catastral y número de hijos.
- Inmuebles con instalaciones solares: reducción de hasta un 50 %.
- Actividades económicas de interés municipal: bonificaciones específicas.
El pago podrá realizarse entre el 15 de marzo y el 30 de junio, con posibilidad de fraccionamiento en seis plazos.
Defensa de PP y Vox
Beldjilali defendió que la medida alivia la presión fiscal sobre los alicantinos tras la implantación de la nueva tasa de basuras, que atribuyó al Gobierno central. “El dinero de los alicantinos tiene que estar en el bolsillo de los alicantinos”, afirmó.
El edil de Vox, Mario Ortolá, agradeció la “capacidad de negociación” del equipo de gobierno del PP y reiteró que su grupo apoyará “cualquier rebaja fiscal que esté en manos de las competencias municipales”.
Críticas de la oposición
Desde el PSPV, la concejala Silvia Castell acusó al alcalde, Luis Barcala (PP), de “dar la espalda a los jóvenes y a las familias”, reclamando que los grandes propietarios con más de diez viviendas vacías paguen un 30 % más de IBI.
El portavoz de Compromís, Rafa Mas, insistió en que la medida “favorece a los que más tienen” y reclamó un IBI más bajo para quienes disponen de menos recursos. Calificó la rebaja como “una gran estafa” y criticó que el consistorio destine recursos a lo que denominó “chiringuitos de Vox”.
Por su parte, Manolo Copé (EU-Podem) lamentó que PP y Vox rechazaran en bloque 19 enmiendas presentadas por su grupo, que planteaban medidas de progresividad, penalización a grandes tenedores de viviendas vacías y apoyo al alquiler asequible. “Es una rebaja injusta que trata igual a quien no es igual”, sostuvo.