Valencia, 25 de octubre de 2025. — El Ayuntamiento de Valencia y la Universitat de Valencia han renovado su compromiso conjunto para frenar las adicciones entre adolescentes. Ambas instituciones acaban de firmar un nuevo convenio de colaboración, con una inversión que supera los 90.000 euros, para reforzar los programas de prevención e investigación en los centros educativos de la ciudad.
El acuerdo, que une la experiencia técnica del Servicio de Adicciones municipal con el conocimiento científico del Departamento de Psicología Básica de la UV, busca actuar antes de que los problemas aparezcan: educar, informar y ofrecer herramientas que ayuden a los jóvenes a tomar decisiones más sanas.
“La prevención es una de las herramientas más eficaces para cuidar la salud y el bienestar de nuestros jóvenes”, explicó la concejala de Bienestar Social, Marta Torrado, durante la presentación del convenio. “Queremos seguir apostando por la educación y la investigación como pilares fundamentales para reducir las conductas de riesgo y construir una Valencia más saludable”.
Una inversión con mirada a largo plazo
El nuevo convenio tendrá una vigencia inicial de dos años, con posibilidad de prórroga, y contempla una aportación municipal de 42.500 euros para 2025 y 50.000 euros en 2026. Los fondos servirán para financiar materiales, actividades formativas y la puesta en marcha de programas de prevención en colegios e institutos.
Entre las acciones más consolidadas figura el taller interactivo “Astrolabio”, una iniciativa que ya se imparte en centros escolares y que ha demostrado su eficacia a la hora de informar y sensibilizar sobre el consumo de drogas.
El taller combina dinámicas participativas con contenidos científicos y educativos. En él, los estudiantes aprenden sobre los efectos y consecuencias del consumo de sustancias, reflexionan sobre la presión del grupo y descubren estrategias para decir “no” sin sentirse excluidos.
Durante el curso pasado, más de 2.500 alumnos de 30 centros escolares participaron en “Astrolabio”, lo que demuestra la buena acogida del programa.
Ciencia y educación, de la mano
El convenio también contempla la formación de futuros psicólogos a través de los practicums de la Facultad de Psicología, así como la elaboración de informes de resultados y estudios científicos que servirán para mejorar las políticas públicas de prevención.
“El trabajo conjunto entre la administración local y la universidad es una garantía de que las intervenciones están basadas en la evidencia y no en la improvisación”, subrayó Torrado.
Prevenir antes que curar
Con esta iniciativa, el Ayuntamiento de Valencia refuerza su compromiso con la promoción de hábitos saludables entre los jóvenes y con una prevención que no se limite a sancionar o advertir, sino que eduque y acompañe.
“Trabajar junto a la Universitat de Valencia nos permite acercar la ciencia a las políticas públicas, y eso es clave para que las acciones sean efectivas y sostenibles en el tiempo”, concluyó la concejala.
El reto, dicen desde el consistorio, es claro: formar una generación capaz de decidir por sí misma, informada y libre de dependencias.
















