Un pulmón verde en alerta máxima
El Parque Natural de la Devesa-El Saler, uno de los entornos naturales más valiosos de la ciudad de València, se encuentra bajo vigilancia intensiva este fin de semana debido al riesgo extremo de incendios forestales declarado por la Generalitat. Las altas temperaturas, el viento y la baja humedad han activado los protocolos de prevención más estrictos para evitar una catástrofe ambiental en pleno verano.
Un operativo humano y tecnológico sobre el terreno
Un total de 45 efectivos integran el dispositivo de vigilancia, formado por:
- Bomberos
- Policía Local de València
- Voluntarios de Protección Civil
- Cruz Roja
- Guardas forestales de la Devesa-Albufera
Este equipo actúa tanto por tierra como por aire, con patrullas distribuidas a pie, en vehículos y mediante drones o vuelos de reconocimiento. El objetivo: prevenir cualquier conato de incendio, disuadir conductas imprudentes y garantizar una respuesta inmediata en caso de emergencia.
La joya ecológica de la ciudad
La Devesa de El Saler es una de las últimas formaciones de bosque litoral mediterráneo, un entorno que combina dunas, pinares y lagunas interiores, junto a la Albufera de València. Este espacio alberga una rica biodiversidad con especies vegetales autóctonas y aves protegidas, además de funcionar como barrera natural contra la erosión marina y el cambio climático.
Un incendio aquí supondría no solo una pérdida ecológica incalculable, sino también un duro golpe al equilibrio ambiental de toda la zona costera.
Zonas de riesgo, medidas y concienciación ciudadana
El plan de vigilancia incluye puntos estratégicos como:
- El paseo litoral junto al mar
- Las sendas forestales de uso público
- Los accesos a zonas de picnic o recreo
- Las áreas de aparcamiento cercanas al bosque
Además, se han intensificado los mensajes de advertencia en redes sociales, paneles informativos y medios locales para concienciar a vecinos y visitantes sobre la prohibición de encender fuego, fumar, tirar residuos o transitar fuera de las sendas autorizadas.
La amenaza es real
Cada año, durante las olas de calor estivales, los parques naturales de la Comunitat Valenciana se convierten en zonas críticas. La combinación de vegetación seca, turismo masivo y negligencias humanas convierte estos espacios en auténticos polvorines. Solo una vigilancia activa, coordinada y sostenida puede evitar que una chispa desencadene una tragedia.
En este contexto, el papel de la ciudadanía es clave. La colaboración con las autoridades y la actitud responsable en el entorno natural marcan la diferencia entre la prevención y el desastre.
Conservar para el futuro
Proteger la Devesa-El Saler no es solo una cuestión de preservar un paisaje; es un compromiso con el futuro ecológico de València. Este espacio es parte del alma verde de la ciudad, y su integridad depende de todos: instituciones, cuerpos de seguridad y cada persona que pasea entre sus pinos o contempla la laguna.
La vigilancia continua, la concienciación ambiental y la acción rápida ante cualquier indicio de fuego son hoy más necesarias que nunca. Porque la naturaleza no se apaga sola. Y porque una chispa puede acabar con siglos de vida en cuestión de minutos.