Un informe judicial revela que el sistema de Emergencias colapsó en plena tragedia con 228 fallecidos

El 29 de octubre, día en que la DANA golpeó con violencia la Comunitat Valenciana, el servicio de Emergencias 112 recibió 19.821 llamadas. De todas ellas, 8.290 no fueron atendidas. Así lo recoge un informe oficial remitido al juzgado de Catarroja, que investiga la gestión de la catástrofe en la que murieron 228 personas.

Un pico de más de 2.400 llamadas en una sola hora

La franja más crítica fue a las 17:00 horas, cuando se registraron 2.438 intentos de comunicación con el 112. La avalancha de peticiones de auxilio desbordó por completo el sistema. Solo 9.605 llamadas fueron atendidas. El resto se quedó sin respuesta por saturación, cortes de línea o colapsos de los operadores telefónicos.

Según detalla el documento, 5.832 llamadas no se atendieron tras más de 10 segundos de espera, y otras 2.458 fueron abandonadas por los propios usuarios antes de ese umbral. Además, se contabilizaron 1.926 llamadas inicialmente fallidas que finalmente consiguieron conectar en intentos posteriores.

Un sistema sin información geográfica de las llamadas perdidas

El informe también indica que solo las llamadas atendidas quedan registradas con datos geográficos, por lo que no existe constancia del origen ni contenido de las no atendidas. Además, algunas de las llamadas no pudieron ser entregadas al 112 valenciano por estar todas sus líneas ocupadas, siendo desviadas automáticamente por las compañías telefónicas a otros centros del Estado o simplemente bloqueadas.

Primeros rescates: desde las 07:29 de la mañana

Paralelamente, el Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia ha informado a la jueza instructora del número de rescates realizados antes de las 15:00 horas. El primero fue a las 07:29 horas, cuando un camión volcó en Alzira y el conductor tuvo que ser evacuado en helicóptero. A lo largo de la mañana se sucedieron decenas de actuaciones, con casos especialmente dramáticos en Catadau, Montroi, Rafelguaraf, Utiel, Llombai y Alzira.

Entre los rescates destacan el de una mujer de edad avanzada con movilidad reducida, el de una familia entera atrapada en una vivienda aislada, y varios evacuados en helicóptero en zonas anegadas.

«Se hizo lo que se pudo, pero estábamos desbordados»

El documento reconoce que el número real de rescates fue superior al registrado oficialmente, ya que la presión de trabajo hizo imposible documentarlo todo con precisión. Según testigos y trabajadores del 112, desde las 15:00 horas el sistema estaba completamente desbordado, recibiendo llamadas desde puntos como Utiel, Chiva o Montserrat de forma ininterrumpida.

Una gestión bajo la lupa judicial

La jueza Nuria Ruiz Tobarra investiga a fondo no solo la atención telefónica, sino también la respuesta operativa, la coordinación entre administraciones y las decisiones sobre la activación del Cecopi (Centro de Coordinación de Emergencias). En algunos momentos, las pantallas de control no mostraban información del exterior ni las llamadas entrantes, lo que agrava las dudas sobre la eficacia de la respuesta institucional.

Este caso se ha convertido en uno de los mayores escándalos de gestión de emergencias en la historia reciente de la Comunitat Valenciana, y la investigación sigue abierta para depurar responsabilidades políticas, técnicas y administrativas.