Una pelea entre dos bandos en el Centro de Menores «temporal» ubicado en el antiguo Hospital Valencia al Mar se saldó la semana pasada con dos vigilantes heridos por los usuarios.
La pelea se inició porque no les gustaba la comida y se pelearon, según relatan los vigilantes de seguridad un bando quería fugarse del centro y el otro se peló con ellos por esto. Iniciada la pelea, los tres vigilantes en el lugar trataron de separarlos, y múltiples menores se abalanzaron sobre ellos. Por suerte, rápidamente se llamó a la Policía que se personó en el lugar casi de inmediato y consiguieron separar a los dos grupos bien definidos de «menores africanos».
El saldo de la pelea
Fuentes de la propia Consellería consultadas al día siguiente por este medio restaban hierro al asunto ya aseguraban que nadie había resultado herido y que era una pequeña pelea entre menores porque no les agradaba la comida, añadiendo que no tenían ninguna información de que el incidente hubiera llegado a más que un pequeño incidente, pero la policía tuvo que actuar de inmediato.
Ahora hasta tres personas contratadas como seguridades han sido suspendidos de empleo, pero siguen con su retribución.
Los vigilantes expedientados
«Diariamente se quejan de la comida y se cansaron e hicieron el motín, 30-40 tíos se empiezan a vestir y dicen que se van»
«Hay muchos chavales que lo pasan mal y hay que empatizar, pero si lo estás pasando mal, no coges la bandeja y la tiras al suelo, luego te quejas de que no les dan de comer».
«Una persona que lo está pasando mal has de agradecer que te dan techo, ropa, comida,…pero algunos te tiran la bandeja al suelo o a la basura».
Los 4 vigilantes contratados aseguran que «Hay tíos que miden más de 1,90m de altura que en privado aseguran tener 25 años, muchos no son menores, llegan a tener hasta 25 años».
Los vigilantes añaden a una entrevista a Cake Minuesa publicada en sus redes que «nos han abierto un expediente por actuar de forma agresiva, en el que ponen palabras en nuestra boca que no hemos dicho». Añadiendo que «lo que buscan es despedirnos y que sea un despido procedente cuando no lo es, lo único que hicimos fue separarlos y tratar luego de calmarlos, pero vivimos momentos de mucha tensión».
De «Hospital Valencia al Mar» a proyecto de Centro de Día y finalmente centro de menores
El centro luce el logotipo de la Generalitat Valenciana y en las licitaciones se asegura que es un centro de menores, no sanitario, que ocupa el antiguo hospital de Valencia al Mar, el conocido como San Juan de Dios
Este centro se vendió a la Generalitat Valenciana por más de 8 millones de euros.
La compra se cerró tras una fuerte presión social al entonces gobierno autonómico de Chimo Puig y Mónica Oltra que no lo tenían entre sus planes. Los vecinos y muchos colectivos resaltaron que esta zona de Valencia densamente poblada necesitaba más servicios sanitarios y sociales y que sería una excelente oportunidad para ampliar servicios de la zona de salud del Hospital Clínic-Malvarrosa, ya que el Hospital de la Malvarrosa no se podía ampliar y estaba a escasa distancia.
Finalmente tras su compra a finales de 2021 por parte de la Generalitat Valenciana, la misma anunció que el centro se destinaría a ser centro para personas con daño cerebral, aunque este proyecto no se concretó en toda la legislatura que duró hasta mayo de 2023.
La guerra de Ucrania
Vino la Guerra de Ucrania y entonces se decidió por parte de la Generalitat Valenciana utilizar el edificio para ser centro de acogimiento de refugiados, de familias procedentes de la Guerra de Ucrania. Para ello se hizo una reforma exprés del edificio de lavado de cara interior y adecuación del edificio para ellos. Así, en marzo de 2022 cientos de personas fueron derivadas a este centro durante al menos 6 meses.
Tras comprobar que la invasión rusa y la guerra sería de larga duración, las familias ucranianas fueron derivándose a otros lugares más permanentes y abandonaron el edificio, con tan mala suerte que la Generalitat Valenciana olvidó poner seguridad en el edificio y parte del mismo fue desvalijado en varias ocasiones.
El centro estuvo más de un año cerrado ya bajo el auspicio del nuevo Gobierno de la Generalitat Valenciana, pero la crisis de migrantes y la saturación de otros centros obligó en verano de 2024 a la Generalitat a plantearse utilizarlo de nuevo, por lo que una nueva reforma mejoró y adaptó de nuevo las instalaciones y reparó los años por los robos cuando estuvo más de 6 meses sin ninguna vigilancia.
Los menores no acompañados
En verano de 2024 la Generalitat Valenciana abrió de nuevo el centro, pero no para lo que fue adquirido, sino nuevamente para un tema «excepcional». Así cerca de medio centenar de migrantes menores no acompañados fueron alojados en el mismo y el centro fue cedido en gestión. Hoy en el mismo están un centenar de personas llegadas desde África.
El centro de menores «Valencia al mar»
La Generalitat Valenciana ha utilizado este centro de tres plantas de altura para alojar a cerca de un centenar de migrantes no acompañados, en teoría menores que ya están en sus instalaciones, y acomete obras de reforma en profundidad que se licitó en verano de 2023, con un gobierno de PP y Vox para ampliar este cenreo «de menores»
En la actualidad se acometen obras en profundidad en el edificio auxiliar trasero tal y como muestran las imágenes siguientes, pero por contra no aparece mostrada en ningún lugar la licencia de obras del complejo.
La licencia de apertura
Un establecimiento de este tipo debería tener una licencia de apertura, que es un tema municipal, pero al propia alcaldesa de Valéncia reconoció en exclusiva a Noticias Ciudadanas que sabía que no la tenía, así que reconocía ser consciente de la situación irregular del centro, que no sólo pone en peligro a los menores, también a sus cuidadores, y personal.
El centro en su parte delantera está bastante abandonado, con zonas oxidadas y que necesitan una reforma, el acceso se realiza por la puerta del aparcamiento del centro, mientras que la puerta principal no se utiliza.
Así, las obras continúan y en el objeto de licitación del 2023 ya aparecía como centro de menores, no como centro sanitario, por lo que a pesar de Catalá asegurar que es un centro sanitario no lo es, ya que cesó la actividad sanitaria hace años.
La extraña empresa que lo gestiona
El centro de menores es gestionado por una Fundación llamada Antonio Moreno, pero vinculada directamente a una empresa llamada Grupo El Castillo con sede social en Villena (Alicante). Los fines de la fundación son los siguientes según consta en su web:
«Los fines de interés general de la Fundación son preferentemente la atención y asistencia a la tercera edad, los discapacitados, las mujeres, la familia, la infancia, las guarderías infantiles y los inmigrantes, además de: a. La asistencia e integración social. b. El cuidado al dependiente y la atención al menor. c. La reeducación de menores. d. La promoción e integración mediante labores de acción social de los colectivos o personas en sectores desprotegidos o desfavorecidos. e. Ser un instrumento de reflexión conjunta, de toma de decisiones en favor de sectores desprotegidos o desfavorecidos y de voz representativa ante las Administraciones Públicas, estatales y comunitarias. f. La impulsión y coordinación de iniciativas y proyectos sectoriales que respondan a intereses comunes de la Asociación. g. Llevar a cabo cuantos fines sean conexos o afines con los anteriores.»
La Fundación pertenece a una empresa Grupo El Castillo, que se dedica a múltiples sectores:
- Atención sociosanitaria, donde mete a la Fundación y tiene varios centros de día, residencias de mayores, residencias universitarias y pisos tutelados.
- Hoteles y turismo, con varias residencias hoteleras en España y en el extranjero.
- Sector agroalimentario, con varias fincas agrícolas.
- Sector inmobiliario, se define como constructora.
- Empresas de servicios, como los de limpieza,…
Todo esto lo explica en su web.
Una gran empresa de múltiples sectores que para los sectores más específicos sociosanitarios como pisos tutelados y atención a menores migrantes utiliza su propia Fundación.
La situación de los migrantes menores no acompañados en la Comunitat Valenciana
La Generalitat Valenciana asegura que los recursos para menores tutelados los tiene al 140%, aperturando el algergue juvenil de Torre de Alborache y otro centro «temporal» en Alcoy con 60 `plazas más, pero este año según el reparto obligatorio para desatascar de menores los centros de Canarias, más de 500 menores serán trasladados a la Comunitat Valenciana según el cupo del Gobierno, que dejará a Cataluña fuera de este reparto por las negociaciones entre Junts y PSOE para mantener en Moncloa a Pedro Sánchez.
La Generalitat Valenciana preguntó el pasado verano a los ayuntamientos por recursos para destinar a este fin y ningún ayuntamiento les contestó, por lo que anunció la fórmula del reparto según población, así a la Ciudad de Valencia le tocarían aproximadamente acoger a 200 menores no acompañados migrantes más, algo que niega la alcaldesa María José Catalá según sus propias palabras.
El temor es que estas obras que se realizan en el antiguo Hospital Valencia al mar signifique que se está preparando para albergar a más de 100 migrantes, de hecho podría duplicar esta cifra.
Desde la Consellería se asegura que como el de Alcoy cada uno tiene su cupo actual y no se va a superar, pero visto lo visto muchos ya recelan y en el barrio de la Malvarrosa recelan ya de este asunto, si bien en público todos aseguran no estar preocupados, en privado añaden que a los yonkis y el mercado de la droga a sólo 100 metros del centro ya tienen bastante y exigen mucha más seguridad.
La empresa y sus falsas denuncias
«Casualmente» en algunos medios de izquierda radical han sacado en los últimos días la versión de que la empresa denuncia presiones de la extrema derecha y acoso a estos menores, incluso rotura de lunas de coches de cuidadores, algo extraño. Lo que se les olvida mencionar es la pelea y los heridos dentro del centro y cómo por las noches revientan en los alrededores decenas de vehículos, y cómo los monitores ante cualquiera que se acerca a hacer fotos le persiguen e increpan, a este redactor le han dicho «seguro que eres de extrema derecha» y llamaron a la policía por simplemente pasear por las aceras que lo rodean y hacer fotos al edificio desde fuera…Parece que ahora está prohibido caminar por algunas calles y no nos hemos enterado…
La realidad es que con algunos menores organizados en un grupo de unos 50 dan muchos problemas y ahora tenemos la sospecha confirmada por los vigilantes expedientados de que algunos aseguran tener hasta 25 años, y que generan inseguridad en el barrio. Muchos vecinos piden un refuerzo policial.
Ya no preguntaremos a los vecinos por el Hospital de Día y los servicios e salud mental prometidos en el centro por el anterior gobierno de PSPV y Compromís y que nunca se llevó a cabo, porque visto lo visto tampoco se llevará a cabo en esta legislatura de PP y con el apoyo de Vox.





















