Las familias de los alumnos que utilizan el servicio de transporte escolar gestionado por la empresa Monbus expresan su profunda preocupación y malestar ante las continuas deficiencias que aseguran están sufriendo desde hace meses.
«Los autobuses sufren averías frecuentes, llegan con más de una hora de retraso y, en numerosas ocasiones, los vehículos no disponen de plazas suficientes para todos los niños, dejando algunos sin poder acceder al servicio.»
«Esta situación vulnera el derecho fundamental de los pequeños a una educación de calidad, puesto que los retrasos y las ausencias forzadas afectan su rendimiento académico. Además, estas incidencias suponen un grave trastorno para la conciliación familiar, obligando los padres y madres a reorganizar sus jornadas laborales de manera imprevista.»
Numerosas quejas presentadas
«A pesar de haber presentado numerosas quejas a la empresa y a las administraciones competentes, no se han implementado medidas efectivas para solucionar estos problemas. Es más, Monbus ya ha sido objeto de sanciones en el pasado por incumplimientos similares. Por ejemplo, en septiembre de 2023, la Consellería de Educación abrió un expediente sancionador a la empresa para dejar sin servicio además de 1.000 alumnos en el primer día de curso, con una posible sanción de hasta 2 millones de euros «.
Además, en septiembre de 2024, FAMPA-Valencia denunció nuevamente incidencias en el transporte escolar gestionado por Monbus, incluyendo autobuses sin capacidad suficiente, sin rampas para alumnas con movilidad reducida y retrasos constantes.
Estas deficiencias no son casos aislados. En agosto de 2024, las administraciones de Toro y la Diputación de Zamora exigieron a Monbus la recuperación de trayectos a Madrid que habían sido suprimidos, afectando gravemente los usuarios.
«Ante esta situación insostenible, exigimos a las administraciones públicas que tomen medidas inmediatas para garantizar un servicio de transporte escolar seguro, puntual y adecuado a las necesidades de nuestros hijos e hijas. Es imprescindible que se priorice el bienestar y el derecho en la educación de los pequeños, así como la tranquilidad de las familias que confiemos en este servicio público.»
«No podemos permitir que la inacción de las autoridades competentes continúo poniendo en riesgo la educación y la seguridad de nuestros hijos. Es hora de tomar medidas contundentes para asegurar un servicio de calidad que garantice el derecho en la educación y facilito la conciliación familiar.»