Un equipo de investigadores del Instituto Universitario de Biotecnología y Biomedicina (BIOTECMED) de la Universitat de Valéncia ha identificado un nuevo factor clave en la progresión del Parkinson.
Se trata de una alteración en la actividad de la microglía, las células inmunes del cerebro, que a medida que envejece, en lugar de eliminar las proteínas tóxicas, facilita su propagación.
Este descubrimiento abre la puerta al desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas para frenar la enfermedad.
El Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa que afecta al sistema nervioso central, causando síntomas como temblores, rigidez y problemas de coordinación.
Se produce por la pérdida de neuronas productoras de dopamina, un neurotransmisor esencial para el control motor.
Aunque su causa sigue siendo desconocida, se sabe que en los pacientes con Parkinson se generan acumulaciones anormales de la proteína alfa-sinucleína, conocidas como cuerpos de Lewy.
El doble papel de la microglía en el Parkinson
El equipo de investigación, liderado por la catedrática Isabel Fariñas, ha demostrado que la microglía desempeña un papel doble en la progresión de la enfermedad.
En el cerebro joven, estas células eliminan y destruyen la alfa-sinucleína tóxica, protegiendo las neuronas.
Sin embargo
a medida que el cerebro envejece, la microglía pierde eficacia y, en lugar de eliminar la proteína dañina, favorece su acumulación y propagación
Para demostrar esto, los investigadores inyectaron cuerpos de Lewy de pacientes con Parkinson en ratones jóvenes y envejecidos.
Observaron que, en los ratones jóvenes, la microglía eliminaba eficazmente las proteínas tóxicas, mientras que en los envejecidos no solo no las destruía, sino que facilitaba su propagación a las neuronas cercanas.
Un hallazgo con impacto terapéutico
Este estudio, cuyos resultados han sido publicados en la revista Molecular Neurodegeneration, no solo se realizó en modelos murinos (cepas especiales de ratones), sino que también fue validado en muestras de tejido humano de pacientes con Parkinson.
Los hallazgos sugieren que fortalecer la capacidad de la microglía para eliminar la alfa-sinucleína anómala podría convertirse en una estrategia eficaz para ralentizar la progresión de la enfermedad.
La investigación ha sido desarrollada en colaboración con:
- la Universidad Católica de Valéncia, el Instituto de Neurociencias del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, la Universidad de Burdeos, el Instituto de Biomedicina de Sevilla y el Institut de Recerca Vall d’Hebron de Barcelona.
Gracias a este avance, se abre un nuevo camino en la búsqueda de tratamientos más eficaces contra el Parkinson, una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo.