Los vecinos de la zona de la Devesa del Saler llevaban días alertando de luces en el interior de las habitaciones por la noche, por lo que estaban seguros de que el interior había sido ocupado por varias personas.
Un vigilante para este recinto de más de 20.000 metros hacía las labores de seguridad en el complejo hotelero. El símbolo del lujo a la decadencia tras el total abandono del hotel más lujoso de Valencia hace años.
Todo está como se dejó, excepto mucho más sucio, abandonado y derribado y roto. Los gamberros, amigos de lo ajeno, okupas, han acabado por dejar el edificio en un estado lamentable.
La actuación de la Guardi Civil
Tras salir la noticias en varios medios nacionales la Guardia Civil se personó ayer en las inmediaciones del Hotel Sidi Saler, identificando en las proximidades a dos personas. Una de ellas presuntamente implicada en und elito grave de lesiones, por lo que la Guardia Civil requirió a la Policía Local de Valencia para que vigilara eñl edificio y comprobase su interior.
La Policía Local de Valencia acudió ante la llamada de la Guardia Civil. la morfología del edificio hacía complicada la búsqueda de más personas que estuvieran ocupando las instalaciones del antiguo hotel.
Al inicio se ha identificado a dos personas que abandonaban el lugar, una de ellas requerida por delitos contra la propiedad, por lo que ha sido detenida.
Finalmente tras la exploración del edificio no se ha encontrado en las plantas registradas a ninguna otra persona.
El hotel y su polémica en los últimos años
El abandono del hotel tras una década ha hecho mella en un edificio que fue el símbolo del lujo y la parada obligada de grandes artistas y personalidades, en un entorno privilegiado a pocos centenares de metros del mar, una playa casi virgen enclavada en un entorno natural. Compitiendo con el Parador del Saler, pero a lo grande.
Las pasadas legislaturas el gobierno municipal encabezado por Joan Ribó se empeñó en demoler el edificio quitándole la licencia de actividad tras 10 años abandonado. Pero los vecinos entonces empezaron una lucha, o se volvía a recuperar para un complejo hotelero o la propuesta vecinas era que la administración adquirieses las instalaciones y montar una residencia de mayores con centro de día en este entorno privilegiado.
Ribó y Sandra Gómez a pesar de en teoría su carácter progresista y social rechazaron este proyecto de centro de mayores y querían verlo derribado.
Con el cambio de gobierno, encabezado ahora por María José Catalá se ha contactado con los propietarios y esta misma semana se ha anunciado un complejo hotelero sostenible, bioclimático en las instalaciones, dando una nueva vida al complejo tras una década de abandono y olvido.
Otros ejemplos de decadencia tras la crisis
No es el único ejemplo de Hotel de lujo abandonado, justo en otro paraje, en el corazón del Vedat de Torrent se encontraba el Hotel Lido, símbolo de lujo, que cerró sus puertas en 2009 y donde las continuas incursioens de personas habían destrozado el complejo, convertido en vertedero.
En 2013, el gobierno socialista de Jesús Ros en Torrent decidió que la estrustura del edificio era inestable y decidió proceder a su derribo.
El Sidi ha conseguido salvarse, no como pasó con el Lido que tuvo sólo 40 años de historia
El Lido pasó a manos del Banco Sabadell que lo abandonó a su suerte y finalmente tras su derribo, dado su mal estado, vendió los terrenos a una promotora local para construir chalets y residencias en esta lujosa zona del Vedat de Torrent.
