De todos es sabido que el Ayuntamiento de Mislata no ha mostrado el más mínimo escrúpulo con 2 niñas muertas y sus familias, no ha dado explicaciones de nada y ni siquiera ha atendido a unas familias destrozadas por lo peor que te pueda pasar en la vida.
Ahora, la Audiencia provincial de Valencia ha rechazado la insistente petición de los padres de Vera para imputar al concejal de Fiestas de Mislata y cuñado del alcalde por el “accidente” del hinchable en el que murió su niña Vera y otra pequeña (Cayetana) dejando a un montón de niños heridos.
Según el tribunal, la labor de comprobación no era achacable a Antonio Arenas, el edil, como en su día también indicó el juzgado.
Un concejal que se pone hecho un energúmeno contra todos los que no votaron a su partido, lo que deja mucho que desear en un representante público y en todo caso, hace tiempo recibió un correo electrónico mío ofreciéndole dar la cara en mis artículos de opinión y como ya esperaba, ni una mísera respuesta.
Sin embargo, la petición de la representación legal de Vera realizada por el abogado penalista Jorge carbó se basaba en lo siguiente:
«Es la persona que decide realizar la actividad de la feria; quien contacta con el feriante para encargarle su ejecución, sin publicidad ni concurrencia alguna, a pesar de que cesó en su actividad como feriante en 2013, quien decide no ordenar la inspección de las atracciones, y, por tanto, el responsable de que no se comprobara ni la ubicación, ni que el montaje se acomodara al proyecto o a la declaración responsable; y es quien, por delegación de alcaldía, autoriza la instalación de la feria».
La Audiencia Provincial, sin embargo, sí que señala la dejación de funciones del Ayuntamiento de Mislata
A la vez, la Audiencia señala que el Consistorio estaba obligado a revisar y comprobar el estado del recinto ferial, algo que como ha quedado más que evidenciado, no se hizo y por lo que está imputado su técnico municipal junto al ingeniero de los feriantes que se sospecha que ni siquiera pisó Mislata cuando dio por buenas las atracciones y también están imputados los propios feriantes lógicamente. Todos permanecen en la causa judicial que se investiga por homicidios por imprudencia y lesiones por imprudencia.
«Según la norma, el ayuntamiento está obligado a la comprobación del cumplimiento de normativa de condiciones técnicas (seguridad del público y condiciones de solidez) cuando la declaración responsable no sea acompañada de certificación de OCA y sin la cual, además, no se podría iniciar directamente la actividad y precisará de licencia de apertura», es uno de los párrafos que indica el auto de la Audiencia provincial.
A su vez, el auto señala: «De la normativa que sigue, de una u otra manera, el ente local, debe tener acreditada la seguridad en la instalación, y es ese marco de comprobación administrativa el relevante, el más directamente implicado en provocación del siniestro, es el que alude a la correcta instalación».
El auto hace referencia a la Ley de Espectáculos de la Generalitat Valenciana (2010) y un reglamento que la desarrolla en 2015 como 2 de los textos legales que fijan la obligación de que el Ayuntamiento de Mislata hubiera comprobado la seguridad de la atracción. Ello hubiera permitido comprobar que no había suficientes anclajes, causa directa del vuelco mortal; que no estaban bien anclados, que la ubicación de las atracciones no respetaba la comunicada al Consistorio (y estaba más expuesta al viento) y que las cuerdas que aseguraban el hinchable no estaban en buen estado como varios técnicos han constatado de forma clara.
Silencio, victimismo y cinismo por parte del Ayuntamiento de Mislata
El señor Carlos Fernández Bielsa y el concejal de fiestas que es su cuñado Antonio Arenas Almenar, junto al resto de la corporación de su partido, no han dado explicaciones de por qué negociaban con feriantes con un historial de ilegalidades más largo que el Quijote, sin empleados ni actividad de alta, sin cumplir el proyecto municipal asignado por el Ayuntamiento, no explican si funcionaba el anemómetro y cuando supieron de las alertas meteorológicas de ese día o entre muchísimas cosas más, el porqué del cambio de ubicación de la feria.
Este alcalde cuyo mote ya es “el príncipe cobarde” tampoco se ha dignado a poner los medios necesarios para que el dolor angustioso de unas familias se aliviara mínimamente y en lugar de personarse en la causa para defender la dignidad de su pueblo y la de las niñas que en su ciudad “amiga de la infancia” perdieron lo más preciado que tienen que es su vida, se han personado para victimizarse de que según ellos, están siendo desprestigiados por “culpa” de la familia de Vera al tratar de imputar al concejal “sin fundamento” y dañarse con ello la imagen del alcalde, concejal y Ayuntamiento en los medios de comunicación.
Es sorprendente que se quejen de un supuesto desprestigio en los medios de comunicación cuando siempre han tenido a su disposición los mismos para dar su versión de los hechos y no han querido dar la cara.
Tal vez lo que principalmente hace dudar del concejal, sea su silencio, ya que ninguna explicación coherente hemos escuchado y de hecho, de él y del resto no hemos escuchado (nada más que cuando ha podido utilizar el accidente el alcalde en las elecciones y ahora para victimizarse).
Digo yo que si una persona no tiene nada que ocultar, lo lógico es dar la cara ante las familias, ante la opinión pública y ante los vecinos de Mislata.
En el mismo lugar en el que agonizaron las 2 niñas y los feriantes intentaban manipular la escena, hace poco se bebía, se reía y se comía bien a gusto borrando para siempre el recuerdo de Vera y de Cayetana entre una seguridad sorprendente y una foto del alcalde con otros cargos públicos para su protagonismo habitual y para dar una imagen totalmente falsa de sí mismo que por mi parte, jamás voy a blanquear ni me voy a andar con tibieza a la hora de escribir su forma de actuar, ya que estamos hablando de 2 niñas muertas, varios niños heridos y unas familias destrozadas y desatendidas.
El señor Bielsa tiene una obsesión preocupante con una imagen totalmente falsa que, en su mente, parece que se cree ser un alcalde cercano y empático, no olvidándose nunca de salir en fotos de manera obsesiva.
La verdad es que pone los pelos de punta de que un ayuntamiento que lleva en silencio desde que ocurre un accidente que mata a 2í niñas por un montón de negligencias corroboradas por la Policía Nacional y varios peritos, quiera personarse en una causa para el victimismo y protagonismo, pero no para apoyar a las familias y proteger la dignidad de su municipio y no la suya propia que es lo único que le preocupa o de lo contrario, se hubieran depurado responsabilidades ante tantos fallos en su Ayuntamiento corroborados por los peritos imparciales.
Como dijo la familia de Vera en una carta, la humanidad debería ser condición indispensable para trabajar en lo público.
“Para nosotros, los padres de una niña a la que arrebataron la vida, unos matones de feria en una instalación ruinosa que no supervisó el ayuntamiento liderado por el príncipe, este señor es un cobarde que carece de empatía, no afronta las situaciones extremas que se le pueden presentar a un cargo público y bloquea a quien no habla bien de él”, señalan en una de las cartas anteriores.
La sangre de Vera, los empleados sanitarios y las ilegalidades laborales de los feriantes
Eva Roz, madre de Vera, hizo unas declaraciones escalofriantes ante el juzgado indicando básicamente que la pequeña se desangró y el feriante ni la miró. De hecho, pasó por al lado mientras la niña se estaba desangrando cogiendo una muñeca para esconderla en la tómbola.
Es más, pillan al feriante dentro del perímetro de seguridad y la sangre de la pequeña está limpiada intencionadamente, a lo que tras ser preguntado por la policía, diría que habían sido los empleados del SAMU para su abogado, decir un programa de televisión “no sabemos si eso ocurrió y si ocurrió que lo hizo”.
Cuando un abogado no se pone de acuerdo con su propio cliente para al menos coordinar las mentiras…
Aún así, la policía preguntó a los empleados sanitarios negando los mismos lógicamente cualquier vinculación con la sangre limpiada de la niña de 4 años (su labor era otra, salvar VIDAS).
También, Eva recuerda bien a un empleado de origen magrebí que fue el único que se volcó en intentar ayudar a los niños que habían quedado atrapados y desapareció entiendo que por petición del feriante. Aunque intentan negar su existencia, una larga lista de testigos la corroboran y la familia de Vera lo recuerda perfectamente, ya que llegó a reprocharle que a la pequeña le hiciera quitarse sus famosas gafas rojas sin las que apenas veía nada.
La ilegalidad va más allá porque un empleado cercano a la plaza de la libertad, donde se ubicaba aquella feria del terror, indica que eran más de 10 empleados inmigrantes que dormían hacinados en una caravana y evidentemente, ninguno de ellos consta de la seguridad social.
Puedo nombrar perfectamente la palabra ilegalidad puesto que en la causa judicial han reconocido que los empleados trabajan casi voluntariamente y alguna vez, se les da unos euros o invitaciones para la feria.
Si algo puedo corroborar sin ningún género de dudas y con pruebas más que de sobra, es que las condiciones laborales de los empleados son precarias y que debería haber mucha más supervisión por parte de la inspección de trabajo, ya que estas prácticas y trampas, son más habituales de lo que pensamos en las ferias de atracciones como conozco de primera mano.
“El Ayuntamiento de Mislata carece de escrúpulos”
“El accidente de la feria fue sin lugar a dudas el momento más duro que he vivido como alcalde”, señalaba el señor Carlos Fernández Bielsa de manera cínica durante las elecciones ante un medio de comunicación muy leído.
Estas declaraciones chocan con no haber dado la más mínima explicación ante algo gravísimo o no haber atendido humanamente a unas familias que cada día viven un dolor grandísimo en su corazón por perder, una familia a Vera con 4 años y otra a Cayetana de 8 cuya familia presentó recientemente una nueva pericial demoledora y en lo poco que hicieron público en su día, dijeron:
«Como padre no sé qué decir ante lo sucedido, solo que la vida a veces es injusta y que ningún padre o madre está preparado para este tipo de situaciones ni aguantar este enorme dolor. Cuando pasa esto, solo podemos agarrarnos a la fe, intentar hallar un camino, y el único camino es superarlo e intentar ser un poco más fuerte cada día. Merece la pena por nuestro otro hijo, que también estaba en la atracción, y al que no le pasó nada al caer de rodillas. La vida le dio una segunda oportunidad».
«Querida Cayetana, tus papás te quieren muchísimo. Eres y siempre serás nuestro ángel. Cariñosa, amable y muy noble. Sabemos que cuidarás de nosotros y de tu hermano de 12 años allí donde estés».
Seguramente estas palabras, al igual que todas las que ha ido haciendo públicas la familia de Vera, ponen un nudo en la garganta a todos menos al Ayuntamiento de Mislata que ha pasado olímpicamente de las familias y si en su caso la excusa fuera que la de Vera quiere imputar al concejal de fiestas, la familia de Cayetana tampoco ha sido atendida por lo que nos quieren tomar el pelo y deberíamos darnos cuenta de una vez de la imagen totalmente falsa del alcalde y compañía ante sus vecinos de “comprometido, atento y cercano”.
No han atendido a las familias porque únicamente les importa su carrera política y no sienten para nada el dolor de Eva, Iván, Fernando, Marta y el resto de la familia de las 2 pequeñas que por mucho que se consiga en una resolución judicial, están muertas por la falta de control de esa feria y esto lo puedo decir claramente haciéndome eco de los expertos independientemente de lo que dictamine una resolución judicial.
Cierto es que desconozco lo que pretenden con estas actitudes incoherentes desde el polémico consistorio, pero también es cierto que el Ayuntamiento es muy poco inteligente y generando estas polémicas, consigue que se siga hablando del tema y de su “modo avión” y falta de transparencia respecto a algo tan gravísimo.
Conclusiones: El Ayuntamiento de Mislata lo último que debería haces es victimizarse
El Ayuntamiento de Mislata lejos de intentar aliviar un dolor insoportable como es el que supone perder a tu hija, se ha dedicado a aumentar todavía más ese dolor y ahora, personados en la causa como perjudicados en su imagen cuando aquí los únicos perjudicados son las familias y las niñas que murieron en esa oscura feria en la atracción de unos feriantes que como dice la familia de Vera, han hecho de la ilegalidad su tarjeta de visita y son usureros frente a otros que sí que cumplen sus obligaciones y ese es el problema, que aquí pagan justos por pecadores cuando pasa algo.
En última instancia, podríamos decir que los niños de Mislata y alrededores son también perjudicados, ya que desde entonces no se monta la feria por la incapacidad para saber ponerla bien y ni mucho menos para que pase un tiempo desde el suceso, porque como ya ha explicado, la juerga acechaba en ese lugar hace unos días.
Está claro que los niños que resultaron heridos en ese “accidente” o que ahora no pueden disfrutar de la feria, son víctimas, pero dentro de lo malo, no de hechos tan graves.
Ambas familias siguen luchando en una justicia lenta y un procedimiento en el que ya han pasado diferentes juezas. El Ayuntamiento de Mislata es protagonista una vez más, pero no para lo bueno, no es víctima de nada, sino de sus propios actos, como no supervisar la feria, según señalan los peritos y la Audiencia provincial. También son responsables de no dar explicaciones y de no atender a las familias.
La familia de Vera no ha dañado la imagen de nadie, la imagen se la daña uno mismo con sus actos como es el caso y es que tanto ocultismo da que pensar…
Si algo está más que acreditado, es la falta de control en esa feria cuyo hinchable tenía las cuerdas rotas, cables eléctricos empalmados con cinta aislante tirados en el suelo sin protección, empleados fantasmas, argollas que ni estaban, presunta manipulación de la escena, contradicciones constantes entre feriante y abogado, falta de alta fiscal y pago de la cuota de autónomos, polémicas anteriores y un larguísimo etcétera.
Aquí no se puede estar a medias tintas ni con titubeos porque es un hecho demasiado grave.
En 2017 ya hubo otro accidente en un hinchable de Mislata huyendo su responsable y el Ayuntamiento también se lavó las manos e incluso decía que ni siquiera estaba en la lista de atracciones que había suministrado la feria y supuestamente nadie se dio cuenta de que una supuesta atracción fantasma, estaba allí.
Las irregularidades de 2022 se constataron no solamente en el hinchable ruinoso, en toda la feria entera.
“MERECEMOS UNA EXPLICACIÓN; VERA LA MERECE”
Así se expresaban los padres de Vera en otra carta de las que hicieron públicas y es muy positivo seguir haciendo llegar todo esto públicamente. Además de pedir explicaciones y justicia, también sufren por otros niños que pudieran pasar por lo mismo y por ello, reclaman control en las ferias de atracciones.
Vera, Cayetana y sus familias, merecen una explicación y siguen esperando a día de hoy respuestas pasado más de un año y medio desde que el viento hiciera volar por los aires a las víctimas de esta película que parece de ciencia ficción (lo que darían las familias porque esto fuera una pesadilla de la que pudieran despertar).
No hay nada más triste en la vida que vivir mediante la frialdad y no ser capaces de empatizar con el dolor ajeno, pero ustedes señores del Ayuntamiento de Mislata, nunca podrán dormir con la conciencia tranquila mientras no den claramente la cara de todo lo que falló y mató a 2 pequeñas en vuestra feria que ni siquiera tenía licencia de apertura como tal.
Tenemos el deber de velar por la infancia
La Ley Orgánica 8/2021, de 4 de junio, de protección integral a la infancia y la adolescencia, recoge en su preámbulo que la protección de las personas menores de edad es una obligación prioritaria de los poderes públicos, reconocida en el artículo 39 de la Constitución Española y en diversos tratados internacionales, entre los que destaca la Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de 1989 y ratificada por España en 1990.
El principal derecho de la infancia, es el de la vida.
Por mi parte, seguiré desmontando la frialdad de este Ayuntamiento, su victimismo y su falta de escrúpulos porque no es justo aumentar el sufrimiento de unas familias angustiadas cada día.
Espero que todos los organismos públicos se pongan a trabajar no por hacerse la foto y sí por garantizar la seguridad de los hinchables y las atracciones de feria en general que no dejan de causar accidentes. Hace unos meses después de 9 años de procedimiento judicial, unos feriantes que hicieron que una niña de nombre Alba se electrocutara y muriera, solamente fueron condenados a unos ridículos meses de cárcel que ni cumplirán a no ser que tengan antecedentes.
En el caso de Mislata, el perito que tuvo que costear la familia de Cayetana para asegurarse la prueba, saca las mismas conclusiones que la anterior designado por el juzgado:
“la ocurrencia de este fatal accidente está directamente relacionada con el negligente uso de la instalación y de las personas que sean responsables de tal hecho”.
Hay muchas vidas en juego y mucho dolor a aliviar si se hacen las cosas bien, pero esto parece importarle poco a los responsables públicos y mientras, personas como Bielsa y su cuñado, frivolizando con las desgracias ajenas que aunque solamente fuera por respeto y un mínimo de empatía, entenderían que los padres de Vera quieran imputar al concejal de fiestas por la dejadez de sus funciones que ya han corroborado todos los expertos independientemente de que esté siendo imposible su imputación, pero otra cosa es el tema moral, el ocultismo y la frialdad de la que se puede hablar porque es más que evidente.
Voy a concluir este artículo con varias reflexiones para ver si se les despierta la conciencia a los responsables de esta cadena de negligencias, que si no hubiesen ocurrido, Vera y Cayetana seguirían vivas y las familias no estarían destrozadas por tan grave suceso unido a una falta de humanidad y de escrúpulos impresionante.
“La convicción de que otros también pueden sufrir y prosperar como nosotros mismos es la esencia de la empatía y el fundamento de la moralidad”. (Steven Pinker)
“La única persona que no puede ser ayudada es esa persona que culpa a los demás”. (Carl Rogers)
“La empatía se trata de estar en los zapatos de otra persona, sentir con el corazón, ver con los ojos. La empatía no solo es difícil de externalizar y automatizar, sino que hace del mundo un lugar mejor”. (Daniel H. Pink)
https://noticiasciudadanas.com/causa-judicial-del-hinchable-mislata/