El Riff, restaurante estrella Michelín del chef Bernd Knöller, inicia una nueva etapa tras una ambiciosa reforma del local. Ahora, la cocina a la brasa y la interacción directa con los comensales definen la experiencia en un ambiente renovado y diseñado para disfrutar.
El restaurante Riff, uno de los referentes gastronómicos de Valencia con estrella Michelín, ha reabierto sus puertas tras una profunda renovación tanto del espacio como de su concepto culinario. El chef alemán Bernd Knöller, quien dirige este icónico restaurante desde hace más de una década, ha decidido emprender un cambio radical en su propuesta, apostando por una experiencia más lúdica y cercana donde el fuego, la brasa y la interacción con los clientes serán protagonistas.
Durante la inauguración, Knöller explicó que la necesidad de un cambio en el Riff surgió de una reflexión personal: “Me aburría un montón la forma que tenía el restaurante. Necesitaba un cambio de verdad”. Este impulso ha llevado a una transformación que no solo afecta al diseño del local, sino que redefine la experiencia gastronómica en sí misma.
Un cambio radical en el concepto
Conocido por su cocina de autor que pone en valor los productos locales y la sostenibilidad, Bernd Knöller ha decidido dar un paso más allá, creando una propuesta que combine la excelencia culinaria con una atmósfera más relajada, enfocada en la diversión y la participación activa de los comensales.
La renovación del Riff pone especial énfasis en el fuego y la brasa, elementos centrales en la nueva cocina del restaurante. Este giro hacia técnicas más primitivas y esenciales busca resaltar los sabores auténticos de los ingredientes, mientras que el uso de la brasa añade una capa de complejidad y textura a los platos. Los comensales podrán disfrutar de una cocina más cercana, donde la preparación de algunos platos se realiza a la vista, creando un vínculo más directo entre el chef, el equipo de cocina y los clientes.
Además, Knöller ha mencionado que el nuevo concepto permitirá una mayor interacción con los comensales, buscando que la experiencia en el Riff sea más que una simple comida, sino un momento para disfrutar y compartir. “Quiero que la gente venga a divertirse, a disfrutar del momento, de la comida y de lo que ocurre alrededor de la mesa”, afirmó el chef.
El fuego y la brasa: el corazón de la nueva propuesta
El uso del fuego en la cocina no es una novedad, pero en el Riff se ha convertido en el eje de su nueva identidad. Bernd Knöller ha integrado esta técnica para potenciar los sabores naturales de los ingredientes, que en su mayoría siguen siendo de proximidad, manteniendo así su compromiso con el producto local y sostenible.
Carnes, pescados y verduras frescas de temporada pasarán por las brasas, donde el control del calor y el manejo preciso del fuego serán esenciales para lograr cocciones perfectas. Esta técnica, que confiere a los alimentos un sabor ahumado único, será el sello distintivo de muchos de los platos de la nueva carta.
Además, los postres no se quedan fuera de esta revolución culinaria. En algunos casos, el fuego también jugará un papel en la creación de dulces sorprendentes que, según Knöller, buscarán “despertar la curiosidad y el paladar” de los comensales.
Un espacio renovado para una experiencia diferente
La renovación del espacio ha sido fundamental para materializar la nueva visión de Bernd Knöller. El restaurante ha sido rediseñado para ofrecer una atmósfera más cálida y acogedora, donde el fuego se convierte en un elemento decorativo que simboliza la transformación que ha vivido el Riff. Las cocinas abiertas permiten que los comensales sean testigos del proceso culinario, mientras que los nuevos detalles arquitectónicos y de interiorismo contribuyen a una sensación de cercanía y relajación.
El mobiliario ha sido seleccionado cuidadosamente para fomentar una mayor comodidad y crear un ambiente en el que los comensales puedan disfrutar de una experiencia pausada y placentera. Este cambio responde al deseo de Knöller de romper con la rigidez que a veces caracteriza a los restaurantes de alta gastronomía, acercando su cocina a un público que busca tanto calidad como disfrute.
Diversión y participación: una nueva forma de entender la alta cocina
Uno de los objetivos del chef con esta nueva etapa es romper las barreras entre la alta gastronomía y los comensales, alejándose de la formalidad excesiva y acercándose a una experiencia más distendida. Knöller quiere que la gente se sienta cómoda para interactuar con los platos y participar activamente en su degustación, creando un entorno en el que la cocina sea un juego en el que todos pueden tomar parte.
Los menús degustación, que siguen siendo una de las apuestas principales del Riff, estarán diseñados para sorprender y entretener, ofreciendo platos en los que la interacción sea clave. Por ejemplo, se introducirán presentaciones en las que los comensales puedan participar en el acabado del plato, añadiendo condimentos o realizando pequeños pasos de preparación junto a los camareros o incluso los cocineros.
Sostenibilidad y compromiso con el entorno
A pesar del cambio en el enfoque culinario, el Riff mantiene su compromiso con la sostenibilidad. Bernd Knöller ha sido un defensor del uso de productos de proximidad y de temporada, algo que sigue presente en la nueva carta. El chef trabaja con productores locales y pequeños agricultores de la región, asegurando que los ingredientes utilizados no solo sean de la más alta calidad, sino que también respeten el medio ambiente y apoyen a la economía local.
Knöller ha mencionado en varias ocasiones que la sostenibilidad es un pilar fundamental en su cocina, y esta nueva etapa del Riff no será una excepción. El uso responsable de los recursos y la reducción del desperdicio alimentario siguen siendo prioridades, tanto en la selección de los ingredientes como en la planificación de los menús.
La estrella Michelín, un reto en constante evolución
El Riff, que ostenta una estrella Michelín desde hace años, se enfrenta a un nuevo reto con esta transformación. Bernd Knöller no solo busca mantener el prestigioso reconocimiento, sino que espera seguir evolucionando y sorprendiendo a los críticos y al público con una propuesta que desafíe los límites de la alta gastronomía sin perder de vista la diversión y el placer de comer.
Este cambio supone una apuesta arriesgada, pero el chef está convencido de que la clave para el éxito reside en la capacidad de adaptarse y reinventarse sin perder la esencia. La nueva etapa del Riff pretende precisamente eso: ofrecer una cocina de altísima calidad, pero en un ambiente relajado, divertido e interactivo.
Reflexión final
La reapertura del Riff marca un nuevo capítulo en la escena gastronómica de Valencia, donde la innovación y el disfrute se unen en una experiencia única. ¿Qué opinas de esta nueva forma de vivir la alta gastronomía? ¿Crees que la interacción y la diversión pueden redefinir el futuro de los restaurantes de autor?