La reciente aprobación de la Ley de prevención del consumo de alcohol en menores marca un hito en la protección de la infancia y la adolescencia en España.
Fad Juventud, una de las entidades que ha luchado durante años por una regulación eficaz en esta materia, celebra esta medida, aunque subraya que su efectividad dependerá de su implementación y del compromiso de la sociedad en su conjunto.
Un enfoque educativo y no punitivo
Uno de los aspectos más destacados de esta ley es su enfoque preventivo.
Más allá de prohibir, busca educar y concienciar a la sociedad sobre los riesgos del consumo de alcohol en menores.
Para Beatriz Martín Padura, directora general de Fad Juventud:
esta ley «es necesaria y largamente esperada», pero destaca que «su efectividad dependerá de su implementación y de que la sociedad en su conjunto entienda la importancia de prevenir el consumo de alcohol en menores de 18 años»
Entre sus principales medidas destacan:
- Regulación estatal unificada, homogeneizando las normativas autonómicas y locales.
- Publicidad restringida, prohibiendo anuncios en espacios frecuentados por menores.
- Sanciones severas, con multas de hasta 600.000 euros por incumplimientos graves.
- Control de venta, reforzando la verificación de edad en puntos de expendio y máquinas expendedoras.
- Reinversión de sanciones en prevención, destinando fondos a programas educativos.
Participación de todos los sectores
Fad Juventud enfatiza la importancia de la colaboración de distintos sectores para garantizar el éxito de esta ley.
«No se trata de un problema aislado, sino de una situación que requiere la implicación de familias, centros educativos, sanidad, cuerpos de seguridad, productores y medios de comunicación», explica Martín Padura.
Esquema de la Ley
- Objetivo: Prevenir el consumo de alcohol en menores.
- Estrategias clave:
- Regulación estatal unificada.
- Enfoque educativo y de sensibilización.
- Endurecimiento de controles de venta y publicidad.
- Sanciones y reinversión en prevención.
- Sectores involucrados:
- Familias
- Educación
- Sanidad
- Seguridad
- Productores y medios
Una situación alarmante
Los datos actuales justifican la urgencia de esta ley.
Según la Encuesta Estatal sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias (ESTUDES 2023):
el 75,9% de adolescentes de 14 a 18 años ha consumido alcohol alguna vez en su vida y el 28,2% ha practicado el «atracón» de alcohol en el último mes
Además, la edad promedio de inicio en el consumo sigue siendo de 13,9 años, una cifra preocupante por las graves consecuencias que conlleva.
El reto de la implementación
Aunque la aprobación de la ley es un gran paso, su verdadero impacto dependerá de su correcta aplicación.
«El mayor reto será su implementación», recalca la directora de Fad Juventud.
La clave estará en asegurar que las medidas propuestas se lleven a cabo de manera eficaz y cuenten con el respaldo social y político necesario para generar un cambio real en las actitudes y comportamientos.
En definitiva, esta ley no solo establece prohibiciones, sino que busca transformar la cultura del consumo de alcohol en menores desde la educación y la concienciación, promoviendo una sociedad más responsable y saludable para las nuevas generaciones.
Noticias relacionadas:
«Fad Juventud» apoya el anteproyecto de ley de alcohol y menores