León XIV, nuevo Papa de la Iglesia Católica: fe, homenaje y unidad
El cardenal Robert Francis Prevost aceptó canónicamente su elección como Sumo Pontífice con el nombre de León XIV.
Su primer gesto fue una oración ante la tumba de Francisco y ha presentado un escudo profundamente agustiniano
El acta oficial y el nombre elegido: León XIV
El cardenal Robert Francis Prevost ha sido oficialmente elegido como nuevo Papa de la Iglesia Católica y ha aceptado canónicamente su elección bajo el nombre de León XIV.
León XIV, el primer Papa de la historia que es de Estados Unidos
Así lo confirma el acta redactada en latín por el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, Monseñor Diego Giovanni Ravelli, quien actuó como notario del acto solemne.
En el documento, el nombre León XIV aparece destacado en color rojo, subrayando su significado histórico y espiritual.
Este nombre evoca a una tradición papal que no se usaba desde 1903, cuando falleció León XIII, y se interpreta como un guiño a la firmeza doctrinal, pero también a la apertura social que caracterizó a aquel pontífice.
Al asumir este nombre, el nuevo Papa parece posicionarse en una continuidad histórica que une la profundidad teológica con una atención decidida a los signos de los tiempos.
Una rosa blanca para Francisco: el primer gesto del Pontífice
Apenas elegido y tras su visita al santuario mariano de Genazzano, León XIV sorprendió a fieles y turistas al detenerse en la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma. Allí, en un gesto cargado de simbolismo, oró ante la tumba de su predecesor, el Papa Francisco.
En un momento de profundo silencio, arrodillado y con la cabeza inclinada, colocó una rosa blanca sobre el mármol que lleva la inscripción Franciscus.
Este gesto remite a Santa Teresita del Niño Jesús, de quien León XIV es particularmente devoto, y resalta el vínculo espiritual con el Papa emérito recientemente fallecido.
El silencio fue total en la Basílica cuando el nuevo Pontífice rezó en soledad. Luego, dedicó unos instantes a la imagen de la Salus Populi Romani, protectora del pueblo romano, y saludó brevemente a los fieles presentes, visiblemente emocionados por la inesperada aparición del nuevo Papa.
Un escudo con corazón agustiniano y lema de comunión
Hace dos días se hizo público el escudo papal de León XIV, que mantiene los símbolos y lema de su consagración episcopal.
El escudo está dividido diagonalmente: en la parte superior, sobre fondo azul, figura un lirio blanco; en la parte inferior, un fondo claro sostiene un libro cerrado con un corazón atravesado por una flecha, imagen profundamente ligada a la conversión de san Agustín.
La frase «Vulnerasti cor meum verbo tuo» (“Has traspasado mi corazón con tu Palabra”) ilustra la experiencia del Padre de la Iglesia que inspira al nuevo Pontífice.
El lema elegido, «In Illo uno unum» (“En Él que es Uno, seamos uno”), proviene de un sermón de san Agustín sobre el Salmo 127.
Este subraya el deseo profundo de León XIV de promover la unidad dentro de la Iglesia.
Como explicó en una entrevista en 2023, la comunión, junto con la participación y la misión, es esencial para su visión pastoral, especialmente en el marco del proceso sinodal que marcó los últimos años del pontificado de Francisco.
Con este inicio, León XIV deja claro que su pontificado se apoyará en las raíces agustinianas de unidad y profundidad espiritual, honrando el legado de sus predecesores y mirando hacia los desafíos contemporáneos de la Iglesia.
Ayer celebró misa en las Grutas Vaticanas
Ayer, el Papa León XIV presidió una Misa en las Grutas Vaticanas, celebrada junto al altar de la tumba de San Pedro.
Concelebró con él el Prior General de la Orden de San Agustín, padre Alejandro Moral Antón.
Tras la celebración, el Pontífice se detuvo a rezar ante las tumbas de sus predecesores y también ante el «Nicho de los Palios», donde se conservan las estolas que usan los nuevos Papas.
Más tarde, a las 12 del mediodía, León XIV se asomó a la Logia central de la Basílica de San Pedro para rezar y cantar el Regina Coeli, dirigiendo unas breves palabras a los fieles congregados en la Plaza.
León XIV clama por el milagro de la paz en su primer Regina Coeli
En su primer Regina Coeli como Papa. desde la Logia central de la Basílica de San Pedro, el Papa León XIV pidió el fin de los conflictos que azotan al mundo y recordó el horror de la Segunda Guerra Mundial, al cumplirse 80 años de su final.
Expresó su cercanía con Ucrania, pidió un alto al fuego en Gaza y la liberación de los rehenes, y celebró el anuncio de cese de hostilidades entre India y Pakistán.
“¡Nunca más la guerra!”, clamó el Pontífice ante los 100.000 fieles congregados, a quienes también saludó con calidez en su primera aparición pública mariana.
Encomendó a María Reina de la Paz la súplica por una paz verdadera y duradera.
No faltó su emotivo saludo a las madres en su día: “Una oración por todas, también por las que ya están en el Cielo. ¡Feliz Día de la Madre!”.