Las pintadas abundan, así la imagen de abandono y degradación sigue presente en las Naves del Espai Ribes del Parque Central de Valencia. El Círculo del Patrimonio sigue denunciando el aspecto de abandono y dejadez del exterior de las naves.
Unas naves declaradas como Bien de Relevancia Local (BRL) y propiedad del Ajuntament de Valéncia, una adscrita a la Universitat popular y la otra a Patrimonio Histórico, aunque cedida a la sala Escalante de la Diputació de Valéncia, cuya responsabilidad es de la actual concejal de Deportes Rocío Gil Uncio, a la par que diputada provincial y responsable del Teatre Escalante en la Diputació de Valéncia.
Las falsedades de los servicios municipales
El Círculo de Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural en varias ocasiones ha denunciado ante el Síndic d’Agravis esta situación de degradación de estas naves BRL y denuncia las falsedades de la comunicación al propio Síndic d’Agravis en la respuesta municipal.
Una pintada eliminada, que asegura que se han eliminado todas, cuando prosiguen, una mentira que le han intentado colar al Síndic desde el Servicio Municipal que denota su escaso interés por proteger y cuidar el patrimonio, incumpliendo su labor in vigilando como conservadores protectores del patrimonio de todos los valencianos. Con un ates y un después donde se ve claramente que son lugares distintos, más propio de un niño de primaria “pillado in fragantti” que trata de justificar su no hacer pero de forma claramente torticera.
Desde el Círculo de Defensa del Patrimonio se sigue asegurando que las pintadas se han adueñado de muchos edificios históricos y de gran parte del centro histórico y recuerdan que no son gamberradas, sino delitos contra el patrimonio y recuerdan que deben ser perseguidos. Por ello piden una unidad de policía local dedicada a estudiar los grafitis y perseguir a los que pintan las fachadas de edificios históricos, una brigada especializada en pintadas y patrimonio.
Cabe recordar que en la legislatura pasada sólo se conoce una denuncia en toda la legislatura por pintadas, el propio ex-alcalde las justificaba asegurando que una gran ciudad como Valencia se debería acostumbrar a estas pintadas en sus calles, por ello desde el Círculo de Defensar del Patrimonio piden a los actuales gobernantes no caigan en la complacencia y los errores del gobierno anterior y se tomen en serio la protección del patrimonio y la lucha contra las pintadas delictivas.
Un artículo a parte se merecen los servicios que tratan de ocultar la realidad al Síndic, porque alguien podría llegar a entender que estas actitudes son realmente falsedad en documento público y por tanto podríamos estar hablando ya de un delito… una realidad que todos podemos observar día a día y que Catalá debe de dejar de mirar hacia otro lado.
