De nuevo ha saltado la polémica, de cara a la negociación de los apoyos que deberá recoger el ya candidato Pedro Sánchez para conseguir ser investido presidente.
Uno de los condicionantes de los independentistas catalanes es el total apoyo al Puerto de Barcelona y parece que de nuevo en detrimento del puerto de Valencia. Otra vez parece que los valencianos y nuestra economía son la moneda de cambio que exigen los vecinos del norte para apoyar una futura legislatura de Pedro Sánchez.
Ya en la anterior legislatura el actual síndic en Corts Valencianes de Compromís, Joan Baldoví para impedir la ampliación del muelle norte del puerto de Valencia, apostó por eliminar en los presupuestos de 2023 toda inversión en el puerto de Valencia. Buscaba estrangular económicamente a la Autoridad Portuaria de Valencia para así obligar a detener las obras planificadas de ampliación del recinto portuario.
Esa circunstancia fue aprovechada por ERC para pedir que esas inversiones fueran a parar al puerto de Barcelona. Todo siguiendo una clara estrategia de favorecer a Barcelona en detrimento del puerto de Valencia, que lidera el tráfico de contenedores en el Mediterráneo.
Ahora en plena negociación de los apoyos a Sánchez el mundo independentista catalán que anhela su entelequia de los países catalanes en el que nos meten sin preguntar nuestra opinión como valencianos, pretenden de nuevo que seamos moneda de cambio para favorecer una legislatura de Pedro Sánchez.
Las autoridades valencianas ya han exigido claridad y han asegurado tanto desde la Generalitat Valenciana como desde el propio Ajuntament de Valencia que no van a permitir ese chantaje y que las inversiones en el puerto de Valencia como uno de los más importantes de España no pueden utilizarse como moneda de cambio para favorecer a Cataluña.
Ya nos pasó con las infraestructuras ferroviarias, donde en los últimos años las inversiones que necesitaba Valenciana eran relegadas una y otra vez en favor de inversiones en Cataluña. Ahora el puerto de Valencia vuelve a estar en el punto de mira del independentismo catalán.
Una provincia sumisa de Barcelona
Parece que en el mundo del independentismo catalán quieren convertir a la Comunitat Valenciana en una provincia sumisa de Barcelona, de su entelequia enfermiza de los países catalanes, apoyadas por valencianos que lejos de defender los intereses valencianos, prefieren ser unos estómagos agradecidos y luchar por los paisanos del norte. lo que no entienden es que con estas propuestas menoscaban a los valencianos y en el fondo es un desprecio más que nos aleja cada vez más, y que fomenta la división.
Todo bajo el yugo del independentismo catalán que parece va a tierra conquistada con el beneplácito de parte de Madrid y una parte muy pequeña de valencianos que siguen prefiriendo ser sumisos a los vecinos del norte,e so sí,a cambio llevan años con los bolsillos llenos, un ejército de estómagos agradecidos que ha conseguido negarnos el agua, al financiación y las infraestructuras que necesitamos como Pueblo Valenciano.