¿Turismofobia en el Mercado Central de Valencia? Al menos persecución y hostigamiento al turista
Turismofobia, esa palabra tan fea que define a una fobia al turismo y que es lo que se está viviendo en los pasillos del Mercado Central de Valencia, donde se persigue al turista incluso con seguridad privada, que lo acecha y molesta, impidiendo una correcta visita de este espectacular edificio que junto a la Estació del Nort de ferrocarril y el Mercado de Colón son los mejores ejemplos del modernismo valenciano definido por la utilización de estructuras de hierro con formas singulares y mucha decoración en hierro forjado y en cerámica valenciana.
Es tal el acoso de los seguridades, hostigados a su vez cual azote por la gerente del Mercado, que muchos grupos de guías turísticos han decidido no parar en el Mercado, y por tanto las tiendas de souvenirs, de joyería, o de productos gourmet, o incluso de degustación de vinos y de vermouths están notando el descenso de ventas provocado por la actitud de una asociación de vendedores que posee como una joya la gestión del mercado, eso sí, en precario desde 2018.
Una asociación cuya presidenta tiene una parada de frutas y justamente o casualmente casi todos los de la junta ejecutiva de la asociación tienen paradas de comida de primera necesidad, cuyo cliente no es el turismo precisamente, eso sí, olvidan que cuando vienen las remesas de turistas en cruceros, éstos sí llenan sus despensas en sus tiendas previo pedido al Mercado Central. Pero muchos de los vendedores se preguntan si estas normas contra el turismo las hacen representando a sus propios intereses o a los de todos los vendedores, cosa que no parece.
La Asociación de Vendedores y trabajadores La Cotorra exige responsabilidades al Ayuntamiento de Valencia
Desde la asociación de vendedores y trabajadores de La Cotorra que sigue esperando más de un año una reunión con el concejal de Mercados Santiago Ballester exigen al consistorio municipal como propietarios del mercado que vele por todos los intereses de los vendedores y no ´solo por el de unos pocos y recuerdan que hoy en día en una ciudad que vive del turismo atacar al turismo es atacar a la gallina de los huevos de oro.
«No puede ser que un pequeño grupo de turistas venga a consumir un vermouth y los seguridades les estén hostigando y la propia Gerente haciendo fotos a los guías turísticos, eso es persecución».
«Han conseguido que el turismo no venga al mercado Central y los pasillos estén vacíos y eso no es de recibo»
La gerente incluso a través de la asociación de guías con el que el Ayuntamiento firmó un protocolo de buenas prácticas lo ha tomado como ley, sin ser de obligado cumplimiento y parece se dedica a instigar a los turistas y a los pocos guías que entran al mercado a consumir con ellos, a los que parece incluso puede estar llegando a amenazar.
La nueva sheriff del Mercado hace y deshace con arreglo a sus propios criterios, manteniendo publicidad ilegal y cometiendo tropelías varias con la total connivencia de su amigo el concejal Santiago Ballester. Una superviviente «amiga» de todos los concejales» ya que es una trabajadora contratada para llevar la gestión, muy mejorable visto lo visto.
«Nos negaron a pesar de consumir y por tanto llevar tickets para el servicio para orinar el poder utilizar el baño, asegurando que los tickets no eran válidos».
Desde esta asociación de La Cotorra aluden además que el precio estipulado de pago por utilizar el baño con el Ayuntamiento es de 0,50€ mientras se está cobrando 1€, justo el doble de lo estipulado.
El tema de la utilización de los baños es digno de mención, ya que sólo es posible utilizarlos si se paga con tarjeta, no sirve el efectivo, en un ejemplo claro de irregularidad manifiesta y de falta de servicio de una instalación municipal.
Los vendedores hartos señalan a la gerente del hostigamiento y persecución y a la propia asociación de vendedores que lleva más de seis años en precario con el consentimiento del Ayuntamiento y con múltiples irregularidades en la gestión y el mantenimiento del edificio.
Por todo ello, desde la Asociación de Vendedores y trabajadores del Mercado Central La Cotorra se exige la remunicipalización de la gestión del recinto municipal y que se solvente todos los problemas actuales, una larga lista difícil de enumerar por lo larga.
La turismofobia de la sheriff del Mercado Central
Nada dice la gerente «sheriff» de las centenares de lipotimias cada año por el calor en verano, o de los resbalones debidos a la cantidad de goteras que tiene el recinto municipal, por contra parece dedica todos sus esfuerzos a perseguir al turista, eso se llama turismofobia.