El proyecto ‘Requiem in Power’ está convirtiendo los cementerios municipales de Valencia en una gigantesca planta solar urbana, destinada a producir energía renovable para edificios municipales y hogares vulnerables. Con más de 6.600 placas solares instaladas, Valencia lidera la transición hacia un modelo energético más eficiente y sostenible.
Valencia está transformando la forma en que gestiona su energía a través de un proyecto pionero que ha captado la atención de toda Europa. Bajo el nombre de ‘Requiem in Power’ (RIP), el Ayuntamiento de la ciudad ha iniciado la instalación de placas solares en varios de sus cementerios municipales, convirtiendo estos espacios en una de las plantas fotovoltaicas urbanas más grandes del continente. El objetivo es generar energía limpia y renovable que será destinada a edificios municipales y hogares en situación de vulnerabilidad, marcando un hito en la transición energética de la ciudad.
Este innovador proyecto contempla una inversión de 3,2 millones de euros y la instalación de un total de 6.658 placas solares antes de finalizar el año. Una vez en funcionamiento pleno, los cementerios de Campanar, Benimàmet, el Grau, el Cabanyal y el Cementerio General producirán una energía anual estimada en 3,38 millones de kilovatios.
Un proyecto sostenible que beneficia a los más vulnerables
El objetivo de ‘Requiem in Power’ es claro: reducir la huella de carbono de la ciudad mientras se ofrece energía gratuita a los hogares más necesitados. Según explicó el concejal de Cementerios, Mejora Climática y Transición Energética, Carlos Mundina, hasta un 25% de la energía generada se destinará a hogares vulnerables, mientras que el 75% restante alimentará los edificios municipales de la ciudad. De esta manera, Valencia no solo ahorra en su factura energética, sino que también ofrece un alivio económico a las familias en situación de vulnerabilidad energética.
El primer cementerio en verter energía a la red será el de Campanar, donde ya se han instalado 375 paneles solares en una superficie de 800 metros cuadrados, con una capacidad de generación de 161,25 kWp. A este le seguirán otros como Benimàmet y el Grau, donde las instalaciones ya están finalizadas y se encuentran en los últimos trámites para comenzar a generar electricidad.
En palabras de Mundina, “en los próximos meses, más hogares se irán incorporando al sistema a través de los Servicios Sociales municipales. Mientras tanto, la energía sobrante será utilizada por los edificios municipales para evitar su pérdida”. Hasta el momento, 25 hogares ya han firmado las autorizaciones necesarias para beneficiarse de esta energía solar gratuita, y se espera que este número crezca progresivamente hasta alcanzar los 800 hogares cuando el proyecto esté completamente operativo.
Un impacto directo en la lucha contra el cambio climático
Además de sus beneficios sociales y económicos, ‘Requiem in Power’ está alineado con los objetivos del Acuerdo Climático del Ayuntamiento de Valencia y su plan para alcanzar las metas de la Mission 2030. La implementación de esta planta fotovoltaica urbana permitirá a la ciudad reducir sus emisiones de CO2 en más de 1.000 toneladas anuales, consolidándose como una de las urbes más comprometidas con la sostenibilidad y la eficiencia energética en Europa.
La instalación de estas placas solares es parte de la estrategia de Valencia para posicionarse como una de las ciudades líderes en sostenibilidad dentro del marco de su Capitalidad Verde Europea. Este proyecto, además de producir energía renovable, tiene un fuerte enfoque educativo. Los hogares beneficiados por la energía solar recibirán información y formación sobre cómo optimizar sus consumos energéticos y mejorar la eficiencia de sus hogares, adaptando sus hábitos de consumo a las horas de máxima producción solar.
Cementerios convertidos en centros de energía renovable
Aunque pueda parecer inusual, la elección de los cementerios para la instalación de estas plantas solares responde a varios factores. Los cementerios suelen contar con grandes extensiones de terreno que, aunque poco utilizadas para otras actividades, son ideales para la captación de energía solar. Además, estos espacios se encuentran a menudo en zonas estratégicas, cercanas a los núcleos urbanos, lo que facilita la conexión de la energía generada a la red eléctrica y su distribución eficiente.
El proyecto ‘Requiem in Power’ no solo aprovecha estas ventajas, sino que también busca minimizar el impacto visual y ambiental de las instalaciones. Según explicó Mundina, “aunque los paneles solares están ubicados en zonas visibles, se ha tenido especial cuidado en integrarlos de manera que no alteren significativamente el entorno de los cementerios ni el paisaje urbano”.
Valencia, un referente en energía fotovoltaica
Con este proyecto, Valencia se posiciona como uno de los principales referentes en el uso de energía fotovoltaica dentro de Europa. La planta solar urbana instalada en los cementerios municipales será la mayor de su tipo en todo el continente, marcando un antes y un después en la forma en que las ciudades gestionan su transición energética.
Además, la iniciativa servirá como modelo para otras ciudades que buscan formas innovadoras de impulsar la producción de energía limpia en entornos urbanos. La capacidad de generar más de 3,3 millones de kilovatios anuales es una prueba del potencial que tienen las energías renovables para transformar el paisaje energético de las ciudades.
Conclusión: Una ciudad más verde y solidaria
El proyecto ‘Requiem in Power’ no solo demuestra el compromiso de Valencia con la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático, sino que también refleja la importancia de incluir a los más vulnerables en la transición hacia un modelo energético más limpio y eficiente. La producción de energía solar en los cementerios municipales ofrece una solución innovadora que combina la eficiencia energética con la justicia social.
Con esta iniciativa, Valencia no solo reducirá su huella de carbono y ahorrará en costes energéticos, sino que también mejorará la calidad de vida de cientos de familias que, gracias a la energía solar, podrán hacer frente a sus necesidades energéticas sin cargar con altos costes en sus facturas. ¿Crees que más ciudades deberían seguir este ejemplo en la transición hacia energías renovables?