AVA ASAJA ha realizado esta mañana el balance agrario del año 2024 al que califican como el peor de la historia reciente de la agricultura valenciana.
La sequía, las plagas y enfermedades, los altos costes de producción, además de la competencia desleal de las importaciones, unido a los daños de fauna salvaje y los robos han hecho de la campaña de la agricultura del 2024.
En la #DANA del pasado 29 de octubre, 50.000 hectáreas fueron afectadas en la agricultura
La #DANA arremetió con lluvias torrenciales, inundaciones, pedrisco y tornados, afectando hasta 50.000 hectáreas de terrenos agrarios en las provincias de Valencia y Castellón. Las mayores pérdidas se produjeron en infraestructuras agrarias, cosechas pendientes de recolección (cítricos, caquis, hortalizas y aguacates) y en parcelas arrasadas y afectadas por asfixia radicular. Pero también los viveros, las explotaciones ganaderas, la maquinaria y los vehículos agrarios han sido afectados.
La estimación de daños por la organización agraria para el 2024 se fija en 1.870 millones, a los que hay que sumar los 1.640 millones de euros en daños provocados por la #DANA
El abandono de tierras
La crisis de rentabilidad de los agricultores y ganaderos es el abandono de explotaciones. En el año 2024 la Comunitat Valenciana dejó de cultivar 2.770 hectáreas y batió su propio récord con 176.446 hectáreas de terreno cultivable abandonados, siendo el farolillo rojo no sólo en España sino también en la Unión Europea.
La Comunitat Valenciana no es sólo la comunidad con más tierras dejadas de cultivar, sino que aumenta la diferencia respecto del cómputo nacional, en la que se recuperaron por contra 7.339 hectáreas para el cultivo.
Una de cada cinco hectáreas cultivables en la Comunitat Valenciana está abandonada
Las superfícies que más superficie perdieron en 2024 en la Comunitat Valenciana fueron las siguientes:
- Almendro, con 2.216 hectáreas menos.
- Cítricos, con 1.347 hectáreas menos cultivadas.
- Frutales de Hueso, con 908 hectáreas menos.
- Viñedo, con 381 hectáreas menos.
- Caqui, con 158 hectáreas de terreno menos cultivadas.
El envejecimiento del agricultor valenciano
Otro de los grandes problemas de la agricultura valenciana residen en el nulo recambio generacional y la escasa implantación de jóvenes debido a la pérdida de rentabilidad. Así, la Comunitat Valenciana también lidera el envejecimiento del campo, con casi un 50% de los agricultores mayores de 65 años.
“Se ha de hacer una reforma en profundidad, decidida por los protagonistas, para profesionalizar el sector, con personal profesional cualificado”.
Así, desde la organización agraria además señalan que la falta de principios activos para luchar contra las plagas y la prohibición de cada vez más fitosanitarios unido a que no hay tratamiento biológico alternativo ha hecho que se pierdan hasta un 50% de muchas cosechas, hasta casi desaparecer, como ha pasado con el arroz Bomba en l’Albufera.
“La lucha biológica que se intentaba, criando insectos útiles para minimizar las plagas, el Ministerio de Transición Ecológica se ha negado, lo ha prohibido, Teresa Ribera que ahora es vice-presidenta en Bruselas.”
A esto los agricultores añaden los cada vez mayores daños por la fauna salvaje, recordando que España es ya el tercer país con más población de lobos censados de la Unión Europea.
Chantaje de las plataformas de compra
Desde AVA ASAJA se señala a que algunas plataformas de compra utilizan el miedo con corredores hacia el propio agricultor, mediante amenazas como traer naranjas de Egipto o arroz de Mianmar, así exigen una rebaja en el precio al agricultor que muchas veces no cubre ni los gastos de explotación.
Europa
Respecto a Europa desde la organización agraria siguen muy críticos con la gestión europea que califican han sido muchos años de espaldas a la agricultura europea, y recuerdan las grandes manifestaciones en Bruselas que han obligado a nombrar un nuevo comisario de Agricultura.
“Nos obligan a un pacto Verde con muchos requisitos, pero no puede haber pacto verde si la profesión de agricultor no es rentable y digna, no hay situación peor que depender de fuera en el sector agroalimentario, vamos a no tener ninguna soberanía alimentaria”