La jueza investiga la cadena de decisiones tras el desastre que dejó 7 muertos y miles de afectados
Valencia, 25 de junio de 2025
Una nueva declaración en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Catarroja arroja luz sobre el caos y las responsabilidades compartidas en la gestión de la DANA que azotó la Comunidad Valenciana en octubre de 2024. La testigo, técnico de Protección Civil y coordinadora de Recursos del Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), ha afirmado que leyó en voz alta el correo de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) que alertaba de un preocupante aumento del caudal en el barranco del Poyo. El mensaje llegó a las 18:45 horas, pero su impacto no se tradujo en una reacción inmediata efectiva.
“El mensaje informaba de un caudal que superaba los 1.500 m³/s y era creciente”, explicó la técnico.
📨 El correo que nadie supervisaba
Según la declaración, el mensaje entró por un correo electrónico genérico del centro, sin que existiera una persona responsable de monitorizar específicamente la bandeja de entrada de la CHJ. La técnico lo leyó, lo comentó con un compañero en la sala, y asegura haberlo trasladado a un técnico de sala, aunque desconoce qué ocurrió después con esa información.
Este dato refuerza una de las principales líneas de investigación: la ausencia de un protocolo claro y jerarquizado en la recepción y gestión de alertas críticas, lo que podría haber influido directamente en la falta de anticipación ante el desbordamiento.
🧾 El polémico mensaje de alerta a la población
La técnico también se encontraba junto al puesto donde la entonces consellera de Justicia y Emergencias, Salomé Pradas, redactaba el mensaje del ES-Alert dirigido a la ciudadanía. Aunque no participó directamente en la redacción del aviso, recuerda que Pradas dijo que debía supervisar el texto y el envío personalmente, lo que también forma parte de la investigación judicial por posible negligencia.
📍 Presión, caos y tareas improvisadas
En su testimonio, la técnico ha descrito una sala de emergencias desbordada:
“La situación era totalmente fuera de lo normal. Había múltiples tareas simultáneas y urgentes.”
Entre ellas, colaboró en la redacción del informe para el Cecopi (Centro de Coordinación Operativa Integrada), que se constituyó a las 17:00. El documento se elaboró con datos de la AEMET, CHJ, carreteras y centros locales de emergencia. Participó incluyendo anotaciones sobre el riesgo en Utiel tras el desbordamiento del río Magro, y sobre la petición de intervención de la UME.
📡 ¿Quién recibió las alertas?
La técnico pertenece al grupo permanente de emergencias del 112, que comparte información por SMS, pero no sabe si el aviso del caudal del Poyo llegó a enviarse por ese canal. Tampoco puede asegurar quién más recibió las comunicaciones, aunque confirma que en el grupo estaban altos cargos como Emilio Argüeso (exsecretario autonómico de Emergencias) y el subdirector Jorge Suárez.
🗺️ El caso Forata
Otro de los episodios críticos relatados fue la entrega a Argüeso de información cartográfica sobre el río Magro, considerada clave por el riesgo de rotura de la presa de Forata. Fue entonces cuando la técnico vio a Pradas en la sala del Cecopi. La escena describe una coordinación improvisada, donde no quedaba claro quién mandaba ni qué información se priorizaba.
🧩 ¿Qué revela esta declaración?
Este nuevo testimonio añade complejidad al rompecabezas judicial en torno a la DANA de octubre de 2024. La jueza intenta esclarecer si hubo negligencia o fallos estructurales en la respuesta institucional a una catástrofe que se saldó con siete muertos, cientos de casas destruidas y miles de personas desplazadas.
Mientras tanto, las víctimas y los vecinos de municipios como Alfafar, Utiel o Picassent siguen esperando justicia… y explicaciones.