Hace unos días estuvimos frente al matadero del pueblo valenciano de Torrent y lo vivido allí, fue terrible por describirlo en una sola palabra.
Este será mi primer artículo para este nuevo medio de comunicación independiente al que agradezco su pluralidad y libertad a la hora de expresar lo que siento como persona antiespecista. Para quien no lo sepa, el especismo es la discriminación por especie al igual que el racismo discrimina a las personas por su color de piel.
Vigilia frente al matadero animal
La actividad que hicimos se llama vigilia y se realiza desde hace años a nivel internacional.
En Valencia, fue convocada una vez más por Valencia Animal Save que es un colectivo en el que intento hacer activismo por la liberación animal. Estuve entrevistando a las diferentes personas que allí vinieron a presenciar la llegada de en este caso, cerdos y los testimonios recogidos son demoledores.
Mientras hacía las entrevistas, un camión lleno de vidas entraba a ese mugriento lugar en el que la sangre chorrea por todo el interior y otros camiones permanecían en la puerta durante un montón de tiempo y lo que observas con tus propios ojos y hueles con tu propia nariz es difícil de describir.
¿Porque todo esto es ocultado por parte de la industria cárnica?
Este artículo no es para juzgar a nadie y más bien, para que se conozca una situación que está oculta ya que hace 3 años me hice vegano gracias a artículos e informaciones como esta.
Por eso es tan importante el activismo que hacemos con el fin de documentar la verdadera cara que estas industrias tienen dando a la vez, un trato humanitario a los animales aunque sea en sus últimos momentos de vida.
Animales de 6 meses de “vida” miserable que han sufrido prácticas terribles desde su primer aliento viniendo de granjas muy lejanas cuyo viaje es infernal.
El material que obtuvimos fueron fotos y vídeos clarísimos en los que se ve a animales amontonados como si de bolsas de basura se tratara, llenos de heridas fruto de los malos tratos que soportan, angustiados, sucios y sin comida ni agua para que bajen más rápido. El olor a muerte de estos sitios lo dice todo como comentaba anteriormente.
Las tres personas que coordinan la Asociación Valéncia Animal Save
Durante la actividad y delante de los camiones de animales en condiciones lamentables, tuve primero una conversación con Guillermo Martínez que es uno de los coordinadores del colectivo antiespecista y se pronunciaba en estos términos:
“Creo que es importante venir a las vigilias para recordar por quién estamos luchando, aunque seamos veganos hace tiempo y sepamos la dureza de verlo y no poder hacer nada. Esto refuerza las ganas de hacer hacer activismo y crear conciencia en la gente ya que es necesario visibilizar la realidad para poder concienciar a la población”.
José Ferrer es otra de las personas que coordinan este grupo y antes de acabar la actividad, tuvo estas palabras frente a los camiones que allí permanecían parados a las puertas del matadero:
“Aunque hemos venido muchas veces, uno nunca se acostumbra a verlos encerrados. A ver sus ojos, sus orejas con crotal y sus heridas. Tampoco al hedor que sale de los camiones ni a los chillidos de dolor fruto de su hacinamiento. Se pisan, se muerden, se orinan y tú sabes que no puedes hacer nada más que mirar y grabar para mostrárselo a tu entorno y esperar que alguien más abra los ojos”.
Respecto a las alternativas vegetales, cada vez crecen más por lo que tenemos que recordar que este tipo de alimentación, no es nada privativa.
Si bien el veganismo no es la alimentación sino una filosofía ética de vida que también incluye los experimentos, entretenimiento o vestimenta a costa de criar masivamente animales.
¿Se puede ser vegano desde la infancia?
Por supuesto que sí, pero por desgracia, en las escuelas se oculta toda esta realidad para que la infancia no genere empatía con los demás animales ya que cuando conocen su situación, son los primeros que no quieren contribuir a ello, pero es más fácil engañarles y ocultarles todo.
M. Jesús Puertes es vegana desde hace 5 años al igual que su hija de 10 y como coordinadora también del colectivo, le pedí que sus declaraciones fueran respecto a la infancia:
“Por desgracia, muchas veces se nos olvida la importancia que tiene transmitir los valores de respeto, cariño y cuidados hacia los animales a los niños y niñas. Yo como la mayoría de la gente, he crecido comiendo carne, pescado, huevos y lácteos; yo he visitado zoológicos y acuarios; he asistido a circos con animales y a ver Bous al Carrer. Para mí era tan normal todo ello y ni siquiera se me pasaba por la cabeza que los animales pudieran sufrir”, explica.
“Ahora llevo 5 años como vegana y soy madre de una niña de 10 que también es vegana desde hace tiempo. Considero necesario que se le haga saber a la infancia toda la violencia que sufren los animales y se les muestre una vida en la que no se use a los animales para ningún fin”.
Continua explicando: “Si a los niños se les mostrase la realidad seguramente no querrían comer animales ni vestir con plumas así como tampoco montar a caballo o participar en ninguna actividad que implique lastimar a un animal.La infancia vegana es compatible con la salud y es vital para los animales que se eduque a los niños y a las niñas en el respeto por la vida y la libertad de los animales sin distinción de especies”, zanja.
Gente que acude por primera vez a ver esto
Este era el caso de Neus, una activista a la que le costaba hablar para este artículo puesto que su estado de shock le hacía que ni le salieran prácticamente las palabras, pero esto es lo que nos dijo allí:
«No hay palabras para describir todo esto, es muy duro ver a los animales aterrorizados mordiendo los barrotes. No puedo entender que se siga haciendo esto hoy en día».
La activista, decidió hace un tiempo hacerse vegana gracias a una persona que se lo fue comentando y al ver que cada vez hay más alternativas vegetales mediante las cuales, no te privas de nada.
Pablo Barragán de 23 años también se pronunció frente al matadero de Torrent:
«He asistido a 1 vigilia de pollos en Algemesí con rescate incluido de unos animales que se salvaron y 2 de cerdos. Esto me recuerda porque llevo casi 5 años siendo vegano e intentando concienciar a más personas».
Buscando la “liberación animal”
Yo tengo 31 años y vegano desde los 28 al no pararme a pensar antes y es por ello que es necesaria toda la información posible ya que hubiera sido mucho antes mi cambio.
Es innegable que los animales sufren y que los traemos masivamente para vivir toda una corta vida de miseria hasta la muerte incluida en la industria láctea o del huevo, pero una vez te informas, es difícil mirar para otro lado como si nada estuviera pasando
Ya por otra parte, el impacto medioambiental de estas industrias puesto que son las más contaminantes de todas y que más agua gastan.
Por otro lado, las redes de pesca suponen nada menos que el 46% de plástico en el mar cuyos animales mueren por una angustia lenta mediante la asfixia teniendo incluso en algunos supermercados, calcadas alternativas vegetales “del mar”.
Hasta el hambre en el mundo podríamos evitar puesto que estamos alimentando a millones de animales más que humanos cuando directamente, esos recursos se pueden destinar a la población y nadie pasaría hambre e incluso se podían hacer las imitaciones veganas con el mismo sabor y textura en versión más saludable, ética y sostenible.
La próxima vigilia será de pollos que son engordados rápido para matar en 40 días permaneciendo en las mismas condiciones que las gallinas mencionadas.
Es completamente viable en cualquier etapa de la vida e incluso previene muchas enfermedades como ha tenido que reconocer la academia Americana de nutrición y dietética o la asociación española de pediatría entre muchos otros expertos.
En Instagram, está la página “Nutricionistas veganos”.
«Choca mucho ver a estos animales sabiendo donde van a acabar y parte de la sociedad no quiere aceptarlo. Llevo 7 años siendo vegano impulsado por querer abrir los ojos viendo la realidad de los animales que por suerte, cada vez hay más información y vídeos que muestran su horrible, injusta e innecesaria situación», explica Daniel Ángel de 26 años que también asistió a documentar la situación de las víctimas en sus últimos momentos de vida.
“Es posible y fácil”
Este artículo de opinión lo he redactado y he recogido estos testimonios puesto que al igual que a mí en su día me ayudó leer estas cosas, seguramente si has llegado a leer hasta aquí es porque quieres cambiar tus hábitos para evitar el holocausto animal, el hambre en el mundo, lo que mayor responsabilidad tiene en la urgencia climática que atravesamos y problemas de salud.
Si nos ponemos a hablar de alternativas veganas, prácticamente todas las cadenas de comida rápida, tiendas y supermercados, tienen cada vez más productos e incluso con sabores que te cuesta notar la diferencia.
Cualquier receta de toda la vida la puedes veganizar buscando en Internet y evitando que en la industria láctea maten a los terneros para que no se beban la leche que su madre produce de manera natural para así, poder manipularlas genéticamente, encerrarlas, esclavizarlas , inseminarlas por la fuerza una y otra vez para después, mandarlas al mismo matadero que la industria cárnica.
Parecida es la industria del huevo cuyos pollitos machos mueren nada más nacer ya sea triturados vivos o agonizando en una bolsa de basura por no valer para la producción.
Las gallinas toda su “vida” encerradas en jaulas o naves industriales en las que nunca ven la luz del sol y viven entre sus propios excrementos siendo igualmente manipuladas genéticamente para producir mucho más de manera artificial y después, acabar también en el mugriento matadero.
Las tortillas de patata veganas son brutales y muy fáciles de hacer.
En Valencia tenemos restaurantes veganos buenísimos en los que disfrutas de lo que te apetezca de manera compasiva.
En cuanto a los precios de la compra diaria, es falso que sea más caro puesto que con verduras, tofu, seitán o soja texturizada, se pueden hacer maravillas y es muy económico especialmente lo último que imita perfectamente a la carne picada valiendo unos 2€ la bolsa que dura un montón porque se infla poniéndola a remojo unos minutos antes y siendo súper nutritivo. Los caprichos, pues pueden valer un poco más.
El veganismo además de ser una filosofía ética de vida, es una causa social más y por ello, me sentía hipócrita realizando activismo por los derechos LGTB, contra el racismo, a favor del medio ambiente o lo que más, voluntariado con la infancia más vulnerable cuando realmente, en otros aspectos no estaba luchando contra una injusticia en la que era necesario tomar posición siendo la solución a la mayoría de problemas.
Para ir terminando, considero que es mi obligación moral contarte todo esto y que puedas decidir ya que evitar todo este mal y hacerlo sin privarse de nada, creo que es una responsabilidad de todas las personas y un posicionamiento coherente ante una injusticia que afecta a millones de animales y a las mismas personas.
Sería importante que pensaras en todos los animales que están viviendo un infierno o agonizando en los minutos que has tardado en leer mi artículo, en el futuro que vamos a dejar a los más pequeños o en la infancia que está sufriendo malnutrición en el tercer mundo mientras con recursos vegetales, alimentamos masivamente a animales criados para explotar. La mayoría de soja que se produce es también para alimentar al “ganado”.
Os agradezco que leáis la información que aporto
Lo que viví junto a las compañeras y compañeros frente al matadero de Torrent, pone los pelos de punta a pesar de que ya he estado en varias ocasiones en estas actividades.
Un día después, realizamos una concienciación en pleno centro de Valencia mostrando la realidad de las industrias mediante pantallas y carteles mientras otras personas, daban información a quien quería tras el impacto visual de la crueldad que el ser humano ejerce contra unas criaturas que jamás nos han hecho ningún mal y solo intentan vivir tranquilamente sus vidas en sus hábitats sin ser molestados.
La mejor decisión que pude tomar en mi vida, será mantenida para siempre puesto que no quiero que mi existencia, sea el calvario de otras especies y también quiero dejar a la infancia un planeta en el que vivir.
Sé que habiendo leído todo lo que aquí digo, vas a empezar a buscar información veraz y alejada de la que el sistema quiere que aceptemos como normal incluyendo al ministerio de consumo que realmente, tampoco hizo mucho más que venirnos a decir que los animales están para eso, pero que vivan “un poco mejor”.
Gracias por leerte mi artículo por la liberación animal y gracias también a este medio independiente que ha permitido que puedas estar leyendo esto.
Sigue las redes sociales “Valéncia Animal Save” y recuerda que hoy puedes comenzar a salvar vidas contribuyendo a una causa justa, sencilla y humanitaria.