Durante una visita a Paiporta, el presidente Pedro Sánchez fue abucheado y objeto de lanzamiento de objetos por parte de un grupo de manifestantes. A pesar del incidente, Sánchez reafirma la prioridad de su gobierno: “salvar vidas” y apoyar a las zonas devastadas por la DANA. La tensión en la localidad evidencia una frustración creciente en algunos sectores, mientras el Ejecutivo asegura que la ayuda sigue en marcha.
Visita a una zona devastada: Pedro Sánchez y el Rey Felipe VI enfrentan un ambiente hostil en Paiporta
El devastador paso de la DANA ha dejado imágenes desoladoras y un saldo de vidas perdidas en la Comunidad Valenciana, especialmente en localidades como Paiporta. En medio de este doloroso contexto, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acompañado por el Rey Felipe VI, la Reina Letizia y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, visitaron la zona para mostrar apoyo a los afectados. Sin embargo, la jornada se convirtió en un tenso enfrentamiento con un grupo de manifestantes, quienes lanzaron gritos e insultos, y arrojaron objetos hacia la comitiva presidencial. Con gritos de “asesinos” y “mentirosos”, el ambiente en Paiporta reflejó un malestar que ha sido amplificado por las circunstancias de la catástrofe natural.
Mientras el Rey Felipe VI y Carlos Mazón continuaban su recorrido, los agentes de seguridad se vieron obligados a escoltar a Pedro Sánchez en una salida de emergencia, protegiéndolo con paraguas para evitar que fuera impactado por objetos lanzados por algunos manifestantes. Finalmente, el presidente suspendió el resto de su visita en la zona ante el riesgo de nuevos incidentes.
Sánchez responde desde el Cecopi: “Nuestra prioridad es salvar vidas”
Tras los altercados, Pedro Sánchez se pronunció desde el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) en l’Eliana, donde dejó claro que, a pesar de los disturbios, el Gobierno no se desviará de su compromiso de ayuda y rescate para los afectados por la DANA. Sánchez calificó de “violentos y absolutamente marginales” a los responsables de las agresiones y enfatizó que el foco del Ejecutivo es la atención a los damnificados y la restauración de las áreas afectadas.
“Estamos aquí para salvar vidas, y no vamos a permitir que unos pocos nos distraigan de esta misión”, declaró Sánchez, insistiendo en que el apoyo y la solidaridad del resto de la población es el mensaje que debe prevalecer. En su intervención, el presidente agradeció a los ciudadanos, voluntarios y equipos de emergencia movilizados en la Comunidad Valenciana y en toda España, recordando que su administración no permitirá que el trabajo de rescate y recuperación se vea interrumpido por actos de hostilidad.
La postura del Gobierno: “grupúsculos radicales” y el respaldo a la acción de Sánchez
La respuesta del Ejecutivo no se hizo esperar. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se refirió a los manifestantes de Paiporta como “grupúsculos radicales” que no representan el sentir de la mayoría de la ciudadanía española. Montero defendió la retirada de Sánchez como una medida de seguridad protocolaria, argumentando que la prioridad es evitar cualquier altercado que pueda poner en riesgo tanto a los funcionarios públicos como a los equipos de rescate.
Para Montero, estos incidentes no deben opacar la “enorme solidaridad” mostrada por la ciudadanía en los últimos días. En palabras de la ministra, la mayoría de los españoles y valencianos han actuado con “responsabilidad y compromiso” ante esta catástrofe, organizando donaciones, colaborando en rescates y ayudando a los afectados de múltiples maneras.
Paiporta y la creciente frustración social: ¿dónde queda el apoyo gubernamental?
El altercado en Paiporta no es un hecho aislado. La devastación causada por la DANA ha generado una profunda angustia y, en algunos sectores, un sentimiento de abandono. Los residentes de las zonas más afectadas enfrentan la pérdida de viviendas, infraestructuras colapsadas y una sensación de inseguridad económica que, en muchos casos, desemboca en una frustración latente.
Para varios de los habitantes, la visita de las autoridades es vista con escepticismo. Algunos consideran que las ayudas y promesas gubernamentales no se traducen en soluciones inmediatas, mientras la población lucha por recuperar un sentido de normalidad. Esta sensación de impotencia y, en ciertos casos, desconfianza hacia las instituciones, puede ser un factor que amplifica las reacciones hostiles en momentos de crisis.
Los trabajos de emergencia continúan: apoyo a los equipos y coordinación interinstitucional
A pesar de los disturbios, las labores de rescate y asistencia en la Comunidad Valenciana avanzan, con la colaboración de equipos de seguridad, personal sanitario y voluntarios que trabajan incansablemente para dar respuesta a las necesidades más urgentes. La Generalitat Valenciana y el Gobierno central han reiterado que los recursos y ayudas seguirán llegando a las zonas afectadas, sin importar la adversidad.
Desde el Cecopi, se sigue coordinando el despliegue de recursos y la gestión de los servicios de emergencia. La activación de fondos europeos, solicitada por el Ejecutivo, servirá para cubrir los daños materiales y facilitar el retorno de las familias a sus hogares en las próximas semanas. Además, instituciones locales y nacionales trabajan en la evaluación de los daños y en la planificación de la reconstrucción de las infraestructuras básicas, tarea que se prevé extensa y costosa.