El rey encarga una nuevo debate de investidura a Pedro Sánchez

El rey encarga una nuevo debate de investidura a Pedro Sánchez

La presidenta del Congreso Francina Armengol acaba de comunicar que tras la segunda ronda de contactos de Casa Real su majestad del Rey encarga la nueva investidura al candidato socialista Pedro Sánchez.

Una vez formulada la propuesta, la presidenta del Congreso fijará la fecha para celebrar la sesión de investidura, en la que el Pleno decidirá si otorga su confianza al candidato propuesto por S.M. el Rey.

La sesión de investidura, prevista en el artículo 99 de la Constitución y regulado en los artículos 170 a 172 del Reglamento del Congreso de los Diputados, comienza con la intervención del candidato, que explica su programa del gobierno y solicita al Pleno la confianza de la Cámara. Tras su exposición, intervienen para fijar su posición los representantes de los distintos grupos parlamentarios.

Una vez finalizado el debate, se celebra la primera votación, en la que el candidato debe alcanzar la mayoría absoluta de la Cámara, fijada en 176 diputados. En caso de no obtener dicha mayoría, se realizará una nueva votación pasadas 48 horas, y el candidato será investido presidente si obtiene mayoría simple. Alcanzada la mayoría requería, en cada caso, la presidenta del Congreso lo comunicaría al Rey para que nombrara al candidato presidente del Gobierno

Si el candidato no obtiene la confianza de la Cámara, el jefe del Estado podrá continuar proponiendo nuevas candidaturas siguiendo el mismo procedimiento. Pero en caso de que Sánchez no consiga la confianza de la Cámara, continuaría en vigor la previsión constitucional del artículo 99.5: si transcurridos dos meses, a partir de la primera votación de investidura, ningún candidato ha obtenido la confianza del Congreso, el Rey decretará la disolución de las Cámaras y la convocatoria de nuevas elecciones, con el refrendo de la presidenta del Congreso.

El 27 de noviembre o presidente del gobierno o convocatoria de elecciones

 

Por lo tanto, los dos meses a los que hace referencia el artículo comenzaron a contar a partir del 27 de septiembre, fecha de la primera votación de investidura de Alberto Núñez Feijoó, presidente del Partido Popular (PP), como candidato a la Presidencia del Gobierno.

Las elecciones se celebrarían, en este supuesto de repetición electoral, a los 47 días de la publicación del decreto de convocatoria, en lugar de a los 54 días, de acuerdo con la disposición adicional séptima de la LOREG. En ese Real Decreto figuraría, además, la fecha y la hora de la nueva sesión constitutiva que, como determina la Constitución, se produciría en los 25 días siguientes a los comicios.

Los problemas de Sánchez

 

Si bien tanto SUMAR como el PNV azeguran que el acuerdo está lejano para un voto afirmativo al candidato Pedro Sánchez, Coalición canaria que apoyó la investidura de Feijóo asegura que si Pedro Sánchez apoya todo lo que se comprometió Feijóo podrian darle su apoyo.

Ahora la solución está en el tejado de los partidos independentistas catalanes, que ya han exigido el comienzo de tramitación de una ley de amnistía y además negociar un futuro referéndum de autodeterminación.

Por su parte Compromís también ha condicionado su voto a una serie de reivindicaciones como son la eliminación de la deuda histórica, la financiación autonómica o infraestructuras. Lo que complica enormemente la legislatura a Sánchez. Un candidato que ve como se alejan sus opciones, ya que los socios de gobierno han elevado sus reivindicaciones.

Habrá que ver qué precio está dispuesto a pagar Pedro Sánchez para ser investido presidente y cómo actúan el resto de grupos políticos ante estas concesiones del presidente para llegar a la Moncloa. Pero no tiene nada fácil superar esta investidura. Sánchez tiene poco más de un mes para conseguir los apoyos necesarios o habrá que convocar la repetición electoral que se fijará para enero.

La legislatura se le escapa a Pedro Sánchez con reivindicaciones cada vez mayores de sus posibles socios

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