Maite y su entonces novio fueron los únicos 2 trabajadores de 1.058 que Sanitat no subrogó al tomar posesión del Departamento de salud de Torrevieja
El entorno de Oltra sigue dando noticias, y en este caso justo en la parte contraria, ya que los abogados de Maite, la menos abusada por el entonces marido de Oltra fue despedida del Hospital de Torrevieja donde fue contratada junto con su entonces novio, también un antiguo menor tutelado por la Consellería de Oltra.
El caso es que un juzgado de Alicante ya había demostrado que de los 1058 trabajadores que disponía Torrevieja Salud en el momento de la reversión a lo público, 1.056 fueron subrogados y sólo hubieron 2 casos en los que la Consellería de Sanitat no subrogó a los trabajadores. «Casualmente» estas dos personas fueron la menos abusada por el entonces marido de Oltra que había denunciado y su entonces novio, cubrían sustituciones en el Hospital desde hacía más de dos meses, y la empresa Ribera Salud los había contratado para ayudar a su situación financiera y por tanto para que los dos menores a su cargo tuvieran una situación económica más desahogada. Cabe recordar que la Consellería de Oltra intentaba ya entonces quitarles al menor y Maite estaba embarazada de su segundo hijo.
Tras la primera sentencia, los abogados de Maite apelaron a instancia superior, asegurando que la indemnización de 10.000€ para su cliente, Maite, no era suficiente ni reflejaba la realidad sufrida tras el despido. Ahora el TSJV reconoce que la Consellería de Sanitat, entonces en manos de Ana Barceló al no subrogar a estas dos personas, las discriminó y le obliga a la readmisión en el hospital, pero a su vez reconoce que como estaba realizando una sustitución por baja, no cabe la readmisión, pero sí el pago del salario hasta la finalización de la sustitución. Más de dos años.
Sanitat deberá abonar más de 40.000€ a Maite
En total serán dos años de empleo, los atrasos e intereses y los 10.000€ por despido improcedente, lo que eleva la cifra a 40.000€. Un dinero que le servirá a Maite para tratar de recuperar a sus hijos, ya que les fue retirada la custodia por la entonces Consellería de Oltra y actualmente están en familias de acogida.
Maite ha sufrido un calvario tras denunciar al entonces marido de Oltra, un calvario que menguó cuando Ribera Salud les contrató para ayudarles económicamente y la pareja se trasladó a la zona, pero tras la reversión fueron marginados, discriminados, apartados, parece que tras ello una razón de peso, ser la que había denunciado al entorno de la entonces vice-presidenta del Consell, una ñposible razón que todos intuímos y que ahora se confirma al saber que ella y su novio fueron los dos únicos trabajadores no subrogados como personal laboral a exntinguir del Departamento de Torrevieja.
Tras este despido, Maite volvió a la calle, y estuvo escondida viendo en naves abandonadas y en pensiones que pagaban ayudas privadas. La mendicidad y la mala vida fue la excusa perfecta para que la Consellería, quizá como vendetta, le retirara la custodia de sus dos hijos. Ahora ese dinero tratará de reparar, en parte, todo el daño causado y será la primera piedra para rehacer su vida y tratar de conseguir de nuevo la custodia de sus hijos, ya sin su pareja y tratando de empezar de nuevo.
Una menor tutelada, abandonada por el sistema y a los 18 años completamente marginada, esa es la triste realidad. La ex-vicepresidenta del Consell y su entorno se quieren mostrar ahora como víctimas de un juicio político, pero la verdadera víctima tiene cara, es Maite y su vida ha sido marcada por estos hechos, eso es incuestionable, y 40.000€ no darán ni para empezar a reparar el daño causado por la Generalitat Valenciana.
Maite a parte, ya conoce que su depredador sexual está ya en la cárcel desde hace unos meses cumpliendo condena y espera de esos abusos una indemnización, pero ni todo el dienro de mundo repararán el daño causado a Maite y el abandono de la Generalitat valenciana a su propia tutelada, aprendamos de este gran error y fracaso del sistema y que nunca más vuelva a ocurrir.