En el mundo de la gastronomía, la creatividad y la pasión no conocen fronteras, y esto queda demostrado en el Concurso Nacional de Cocina para Invidentes, un evento único que celebra su cuarta edición este próximo sábado 11 de enero en las instalaciones del restaurante Muelle 21, en Sevilla.
Esta iniciativa, patrocinada por la Fundación Abades, busca visibilizar las capacidades de las personas con discapacidad visual severa y ceguera total, demostrando que no hay límites cuando se trata de arte culinario.
El certamen es organizado por la Asociación Cocinar a Ciegas, que desde 2019 trabaja para crear espacios de inclusión y oportunidades en el ámbito gastronómico.
Lo que nació como una idea de Juan Manuel Medina, persona con discapacidad visual y apasionado de la cocina, ha evolucionado hasta convertirse en un referente nacional.
Este año, el evento contará con la participación de diez finalistas de distintas regiones de España, quienes competirán por demostrar su talento en los fogones.
Un concurso con un propósito especial
Más allá de ser una competición, este evento tiene un objetivo claro: concienciar a la sociedad sobre los retos que enfrentan las personas con discapacidad visual y, al mismo tiempo, celebrar sus logros.
En esta edición, los finalistas provienen de lugares tan variados como Málaga, Asturias, Cádiz, Segovia y La Rioja.
Cada uno presenta no solo su destreza culinaria, sino también una historia de superación y resiliencia.
Entre los participantes destaca un equipo muy especial: José Luis Fernández e Ignacio Ruiz, quienes, además de ser concursantes, tienen la particularidad de ser sordociegos.
Ignacio actúa como mediador para garantizar la comunicación y el trabajo en equipo, este tipo de casos refleja cómo el concurso no solo celebra la gastronomía, sino también la capacidad humana de adaptarse y superar barreras.
El jurado: Una constelación de estrellas culinarias
Para evaluar las creaciones de los concursantes, el evento contará con un jurado de lujo, compuesto por figuras reconocidas en el ámbito gastronómico. Entre ellos se encuentra el crítico gastronómico ciego Jonatan Armengol, quien presidirá el panel.
Armengol es un referente en la crítica culinaria tanto a nivel nacional como internacional.
Otros nombres destacados en el jurado incluyen:
- Koldo Royo, fundador de Afuegolento.com y presidente de la Asociación de Cocineros y Reposteros de las Islas Baleares, con una trayectoria llena de premios y reconocimientos.
- Elías del Toro, chef ejecutivo de Abades Triana, conocido por sus estudios en el Basque Culinary Center y su paso por prestigiosos restaurantes como el Celler de Can Roca.
- Fran Vallejo, parte esencial del equipo del triestrellado restaurante Aponiente, famoso por innovar con embutidos marinos.
- Cristian Rodríguez, jefe de cocina de Alevante, restaurante galardonado con dos estrellas Michelin.
- Irene Nam, una joven cocinera que ha trabajado en reconocidos restaurantes como Diverxo.
- Carlos Alba, chef con experiencia en varios restaurantes con estrella Michelin y figura mediática en programas de televisión.
Con semejante equipo de expertos, los concursantes tendrán la oportunidad de mostrar su talento frente a una audiencia verdaderamente exigente.
Un premio especial para los amantes del mar
Este año, el concurso incluye un premio especial otorgado por Esteros Lubimar y la Asociación de Productores de Pescado de Estero de Andalucía.
Este galardón será para el mejor plato elaborado con lubina y consiste en productos premium que reflejan la calidad de los esteros andaluces. Este detalle añade un toque único al certamen y resalta la riqueza de los productos locales.
Ediciones pasadas: Una historia de éxito
Desde su primera edición en 2020, el Concurso Nacional de Cocina para Invidentes ha dejado huella en cada ciudad que lo ha acogido. La primera edición se celebró en Ronda, donde el fundador de la asociación, Juan Manuel Medina, resultó ganador.
En 2022, Estepona fue sede de la segunda edición, en la que un participante andaluz se alzó con el premio.
La tercera edición, realizada en Logroño, incluyó un congreso y una demostración de productos, destacando la participación de una concursante riojana que se llevó el título.
Una llamada a la inclusión y la inspiración
El Concurso Nacional de Cocina para Invidentes no es solo un evento gastronómico; es un movimiento social que pone de manifiesto la importancia de la inclusión y el reconocimiento de capacidades.
A través de este certamen, no solo se celebran los talentos de los participantes, sino que también se envía un poderoso mensaje: la discapacidad no limita los sueños ni las habilidades.
Al final, lo que importa no es cómo se ve un plato, sino el esfuerzo y la pasión que se pone en crearlo.
Más noticias relacionadas: