Valencia pone en valor el servicio de arqueológia en el año más uno de su 75 aniversario como servicio
El concejal de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Valencia, José Luis Moreno, ha puesto en valor el trabajo realizado por el servicio arqueológico municipal, que en 2023 cumplió 75 años de su fundación y que con esta exposición se quiere conmemorar este aniversario, al mismo tiempo que se exhibe una selección de piezas más representativas de la historia de la ciudad”. Una muestra que tiene lugar un año más tarde de lo previsto porque el aniversario tuvo lugar el año pasado aunque nunca es tarde si la dicha es buena.
En el acto vespertino dirigido a historiadores, arqueológos, investigadores estuvieron presentes dos de las figuras representativas del servicio arqueológico como Josep Vicent Lerma y Albert Ribera, quien durante años fue la cara visible de esta entidad de notable relevancia en el consistorio municipal y al frente del cual está ahora Pepa Pascual.
Además, del presidente de la sección de arqueológica de Valencia o la delegada de las empresas privadas del sector, Marisa Serrano, además de personalidades como Paco Taberner, el cronista de la ciudad, Paco Pérez Puche y la concejala socialista Maite Ibáñez además del anfitrión el edil y gestor cultural, José Luis Moreno, quien partió de la sala de exposiciones a otros actos como el de la presentación de los actos de la Hermandad de San Antonio Abad en el salón de cristal del mismo edificio consistorial.
Moreno recalcó en la presentación de la muestra 75 anys,75 peces. Una mirada a la història del SIAM”, que acoge la Sala de Exposiciones de la Casa Consistorial, y al que también han asistido la jefa del Servicio de Investigación Arqueológica Municipal, Pepa Pascual, la importancia de determinadas piezas y la configuración de las 5 salas que componen la exposición, así como miembros del servicio. El recorrido tiene una especial peculiaridad por mostrar 75 piezas representativas de todas las etapas históricas de Valencia, y que se ha planteado de una manera diferente como si fuera una excavación arqueológica en la que sala a sala se avanza en las capas del terreno, desde niveles más modernos hasta los más antiguos, para llegar así a los orígenes de Valencia.
Es muy interesante porque nos ayuda a conocer más nuestra ciudad y un servicio de arqueología, que quizás sea desconocido para la gente, pero que, además de la labor de recopilación de piezas arqueológicas, también se dedica a la investigación y autoriza las nuevas construcciones en Valencia, agregó Moreno.
Una labor complicada resumir en 75 piezas los 75 años de historia
Pepa Pascual ha señalado sobre la exposición que tratar de resumir todos los descubrimientos y todos los avances en materia arqueológica que se han producido durante estos 75 años es una labor muy complicada, sobre todo, en un espacio reducido, y más aún si tenemos en cuenta todas las publicaciones que se han hecho tanto a nivel científico como divulgativo. Por ello, pensamos que lo más atractivo sería contar los aspectos más desconocidos del SIAM y basar la exposición en el conocimiento que se obtiene de los restos arqueológicos que se encuentran en las excavaciones y que ayudan a recomponer el pasado. La responsable del servicio ha tenido palabras de agradecimiento a todo el equipo del SIAM de todos estos años por su dedicación que, en muchas ocasiones, excede del mero hecho de ocho horas diarias y llegan y han llegado a dedicar tiempo de su tiempo personal al trabajo por y para la historia de la ciudad.
Una distribución en cinco salas expositivas de más a menos, como si estuviera excavando el visitante
La primera sala está dedicada a las dos etapas diferenciadas en la historia del SIAM. Mediante una línea temporal se van poniendo diferentes hitos singulares, comenzando con las noticias de las primeras excavaciones realizadas en el año 1890 en la actual calle de Cirilo Amorós donde se encontraron 4 sepulturas medievales, cerca de la puerta de los judíos, pasando por los hallazgos romanos producidos con la apertura de la calle de la Paz, con las obras de la instalación de la red de agua potable y alcantarillado a principios del siglo XX, donde la Alcaldía ordena a la Sociedad de Aguas Potables que recoja todos los objetos de carácter arqueológico o artístico que sean descubiertos en las zanjas.
También se producen descubrimientos cuando se construye en 1905 el edificio del Punt de Ganxo, cuando se hace el seguimiento de las obras de construcción del mercado Central o en el viejo cauce del Turia. Después se pasa a la creación, primero de la Comisión Local de Excavaciones en 1946 y finalmente del Servicio de Investigación Arqueológica Municipal en 1948 que se mantuvo activo hasta la jubilación de José Llorca en el año 1974.
La incorporación de Albert Ribera y Josep Vicent Lerma en 1981 marca un renacer del SIAM
La nueva etapa del SIAM se inicia en el año 1981 con la incorporación al Servicio de los arqueólogos Albert Ribera Lacomba y Josep Vicent Lerma Alegria, el primero fue el director del SIAM hasta su jubilación en el año 2019.
A lo largo de los años se han ido incorporando otros técnicos hasta el momento actual en que el Servicio de Arqueología lo componen: Pepa Pascual, Carmen Marín, Vicent Escrivá, Amparo Salinas y Mercedes González.
Nueva etapa, nuevas metodologías…que han originado las Áreas de Vigilancia Arqueológica
En esta nueva etapa se ha apostado por una arqueología moderna, adoptando nuevas metodologías en el trabajo utilizadas en países anglosajones, acompañadas por normativas patrimoniales propias, como la Ley Patrimonio Cultural Valenciano o el Reglamento sobre excavaciones arqueológicas en la Comunitat Valenciana y otras de carácter urbanístico (PGOU, Planes especiales de barrios) que han hecho que la arqueología se incorpore al proceso constructivo de la ciudad mediante la delimitación de Áreas de Vigilancia Arqueológica o la incorporación de la arqueología de la arquitectura en los proyectos de rehabilitación de edificios históricos.
Esto ha permitido que lugares emblemáticos como la Almoina, la Cárcel de Sant Vicent, el Palau del Real, la galería del Tossal o el monasterio de Sant Vicent de la Roqueta, sean mejor comprendidos y valorados, integrándose en la cotidianidad de la ciudad.
En particular, el Centre Arqueològic de la Almoina ha revelado la evolución de Valencia desde su fundación en el año 138 a. C. hasta nuestros días, mostrando cómo ha cambiado y crecido a lo largo de los siglos.
Se ha colaborado en crear museos públicos y privados como el de Historia
El SIAM ha colaborado también en la creación de museos y espacios expositivos, tanto públicos como privados, como el Museu d’Història de València, el molino califal de la calle Salvador Giner, la muralla islámica, la muralla bajomedieval o parte del antiguo circo romano. En estos lugares, junto al discurso histórico, se exhiben materiales arqueológicos con una clara voluntad didáctica.
Además de estas investigaciones, el SIAM ha trabajado en la rehabilitación de edificios históricos importantes, como el Almudín, la Casa dels Bous, antiguas alquerías y molinos, así como refugios de la guerra Civil. Estos esfuerzos no solo han rescatado la memoria de València, sino que también han ayudado a crear espacios donde los ciudadanos pueden conectar con su historia.
Una muestra de las diversas excavaciones realizadas en los últimos 40 años se puede contemplar en un audiovisual situado también en esta primera sala.
Cinco piezas especiales de distintos períodos de la historia de Valencia
Como elemento central, se han seleccionado 5 piezas especiales de los períodos: romano-republicano, romano imperial, visigodo, andalusí y bajomedieval que sirven de introducción a las siguientes salas.
La Tinaja ibérica del Ciclo de la Vida, figura de un mimo o danzarín en bronce, bol vidrio de la “traditio legis” que representa la figura de Jesucristo entregando la Ley divina a San Pedro en presencia de San Pablo, así como el crismón y las letras Alfa y Omega (el principio y el fin), tesoro del siglo XI con más de 1000 monedas de plata y oro (dinares y dírhams) y finalmente el capitel medieval representando la leyenda de Aristóteles y Filis.
Se ha montado también una pequeña biblioteca que recoge algunas de las publicaciones que se ha realizado desde el SIAM en su labor de dar a conocer la arqueología de Valencia tanto a nivel científico como a nivel divulgativo.
En la sala segunda se presentan piezas de época contemporánea y moderna:
En la parte contemporánea se encuentra un panel cerámico publicitario de la marca Philips, placas de calles antiguas, una reproducción de una gárgola de piedra de las torres de Serranos de principios del siglo XX realizada por el escultor José Aixa, un altar de tela de pequeñas dimensiones y medallas perteneciente a un grupo de salesianos que estuvieron escondidos en el molino de Albors durante la guerra civil, correspondencia de soldados que están en el frente a sus familiares recuperada en la Alquería de Falcó, …
La zona moderna tiene como piezas un tesorillo monedas encontrado dentro de 2 vasijas de barro, una lápida funeraria de un personaje eclesiástico de la catedral de Valencia, un ajuar cerámico del antiguo Hospital General, la escultura de un ángel de la capilla del monasterio de la Roqueta y parte de un pavimento con azulejos que representan que representan diversos oficios gremiales proveniente de la calle Bolsería.
Un fragmento del primer puerto de Valencia se expone por vez primera tras hallarse hace 22 años
Un Montaje espectacular de un fragmento del muelle de Güelda, datado en 1685 del que se recuperaron las piezas de madera originales en la excavación del parking de J.J. Domine y que se exponen por primera vez después del proceso de liofilización, es decir las maderas y otros elementos congelados se colocaron al vacío para eliminar el agua u otros disolventes de la muestra, lo que permite cambiar directamente de sólido a vapor sin pasar por una fase líquida. Todo para una correcta conservación.
La inscripción de un personaje eclesiástico de la casa de la Almoina,las vigas de madera policromadas del monasterio de la Roqueta, un edificio vacio de uso en estos momentos y pendientes de asignarselo cuyo interior esta lleno de hierbas y sin terminarse la excavación, diferentes azulejos del siglo XV, piezas cerámicas de diversas producciones y dos grandes tinajas para transporte y almacenaje de vino y aceite conforman la parte medieval.
La sala tercera es la de Balansya ,,,,la época dorada valenciana de los años musulmanes
En esa sala se puede contemplar una pintura mural con motivos geométricos proveniente de una alberca de jardín del siglo XII proveniente de la plaza del Negrito, lápida de personaje de la nobleza musulmana enterrado en el panteón real de la Almoina, diferentes piezas cerámicas y metálicas que abarcan desde el siglo X al siglo XIII recuperadas en diversas excavaciones, una escápula de bóvido con el alfabeto islámico grabado y un montaje único con todos los elementos que formaban un alambique para destilar perfumes de principios del siglo XI recuperado en la Cárcel de San Vicente.
Y al final el espectáculo de época romana en las salas cuarta y quinta con dinares y mosaico espectacular
La primera parte de época romana Tesoro de 120 dinares de plata de época romana republicana y que estarían guardados en una bolsa y que se ha interpretado como el equivalente al sueldo de un soldado romano durante año y medio. Selección de monedas de monedas de diversos momentos del imperio romano, destacando la moneda de la ceca de Valentia que presenta en el anverso la cabeza de Roma y por el reverso la cornucopia de la abundancia.
También se expone una pequeña hoja de laurel de oro perteneciente seguramente a una corona.
Destaca de esta sala la escultura de piedra de una figura femenina sin cabeza recuperada en los alrededores del mercado Central, así como diversas piezas de época visigoda entre las que destaca un maravilloso anillo de oro con piedra semipreciosa, con grabado de un crismón que perteneció a un obispo y que se recuperó en una sepultura en la Almoina.
El mosaico tiene un medallón central con los rasgos de la musa Terpsícore
En la última sala se ha realizado un montaje del mosaico y pinturas murales perteneciente a una domus, o residencia, que debía pertenecer a un personaje romano de alto rango social a juzgar por la riqueza de los elementos decorativos que formaban esta habitación.
El mosaico, que se expone por segunda vez desde su hallazgo, presenta un medallón central incompleto donde se distinguen los rasgos de un personaje femenino identificado con la musa Terpsícore rodeado de motivos geométricos y 4 cráteras en las esquinas.
De la expo de los 75 años a una pieza con vida propia el refugio antiáereo
Aquí acaba el recorrido de la exposición de la que se sale por el corredor lateral desde el que se puede acceder al refugio antiaéreo musealizado en el patio de la casa consistorial y se puede visita. De los tres existentes dos están abiertos mientras el de Massarojos está cerrado hace casi dos años.
La Sala de la Almoina acogerá desde enero una muestra temporal donde se reconoce a los profesionales del SIAM
A parte de esta exposición, en el mes de enero, se hará una pequeña muestra complementaria en la sala de temporales del Centre Arqueológic de l’Almoina, que se centrará en la vertiente más humana de la arqueología, en la que se pretende reconocer el trabajo y dedicación de los profesionales relacionados con la arqueología en Valencia durante los últimos 40 años en los que se han realizado más de 1000 intervenciones en toda la ciudad.
Se hará también una recopilación de prensa donde la arqueología ha sido protagonista de numerosas noticias, a veces favorables y otras más críticas.
El catálogo de la exposición como colofón para el primer trimestre de 2025
Y no podíamos dejar de tratar la vertiente más especializada de la exposición que contará con un catálogo con artículos de diferentes investigadores y un anexo con las fichas y fotografías de todas las piezas que se muestran en la exposición.